Defensores y defensoras de México y Guatemala exigen cancelación de proyectos hidroeléctricos

Ofrenda al Río Cacaluta por parte del Frente Popular en Defensa del Soconusco en Aacacoyagua, Chiapas. 14 de marzo 2020 Crédito: Área de comunicación Otros Mundos

La Escuela de Justicia Energética Binacional México-Guatemala integrada por diferentes movimientos, colectivo y organizaciones exige la cancelación total de los proyectos hidroeléctricos concesionados a empresas nacionales y extranjeras.

Los defensores de la tierra y la naturaleza junto a líderes de los territorios de Chiapas y Guatemala, informaron que la imposición de proyectos hidroeléctricos que responden a la política energética y el modelo energético implementado en México y Guatemala han sido un modelo depredador económico demandante de energía; ante la invasión y despojo de los territorios, criminalizando a los pueblos que defienden la vida y la madre tierra, según los líderes del movimiento.

Las y los defensores comentaron que es a través de la construcción de estos proyectos que los gobiernos, las bancas financieras, como el Banco Interamericano de Desarrollo(que es una organización financiera internacional con sede en la ciudad de Washington D.C. Estados Unidos, con el propósito de financiar proyectos viables de desarrollo económico, social e institucional y promover la integración comercial regional en el área de América Latina y el Caribe) y las empresas pretenden imponer su desarrollo. Un desarrollo que impone un modelo de vida que señala a los pueblos mesoamericanos como “subdesarrollados”, como un estorbo, discriminando así decisiones acerca de su territorio con el fin de generar ganancias económicas para las empresas y las familias oligarcas implicadas, pero no para los pueblos; afirmaron los líderes.

¡Queremos energía para los pueblos y no para las empresas!- la Escuela de Justicia Energética Binacional México-Guatemala integrada por diferentes movimientos, colectivo y organizaciones.

Las organizaciones y resistencias que forman parte de la Escuela de Justicia Energética de Chiapas y Guatemala exigen el respeto de derechos y de su autodeterminación como pueblos originarios. Como pueblos ancestrales, comunidades rurales y campesinas, protectores y guardianes de la naturaleza al ejercer su derecho a decir

!No a las hidroeléctricas! Sí a disfrutar con paz, tranquilidad y armonía los bienes comunes y de la madre tierra.

“Como pueblos hermanados, somos hilos de unidad entre México y Guatemala en defensa del territorio; buscaremos siempre en esta unidad fortalecernos para la defensa se nuestros ríos, con valentía y de pie. Para que nuestros pueblos y ríos sean siempre libres.” -exclamaron los miembros.