Domotej, un techo verde capaz de refrescar hasta 17 grados el interior de una vivienda
*El origen del proyecto fue buscar que los beneficios de los techos verdes se permitan para el interés de la vivienda social.
*En tiempo de lluvias los techos reverdecen, pero en época de estiaje no las riegan y se secan, porque el proceso no es estético, sin embargo, reconoció que aún hay mucho por investigar.
Especialistas de la Universidad Autónoma de Chiapas (UNACH) consiguieron crear Domotej, un techo verde capaz de refrescar hasta 17º el interior de una vivienda, debido al desempeño térmico y puede ser utilizado en un clima tropical.
Gabriel Castañeda Nolasco, profesor de la Facultad de Arquitectura de la Universidad Autónoma de Chiapas (UNACH) e integrante del cuerpo académico de componentes y condicionantes de la vivienda dio a conocer que, dicho proyecto de investigación inició alrededor del 2004, financiado por el sistema interno de la Universidad.
En ese entonces, la finalidad del trabajo era buscar los beneficios que brindan los techos verdes, enfocados a las viviendas de interés social, sin embargo, solo las personas con suficiente recurso económico podían tener uno.
Su alto costo es porque requiere de materiales que impiden la penetración del agua al techo, el cual está diseñado para los rellenos sanitarios, pues es resistente a la corrosión de los lixiviado, que es la descomposición y mezcla de diferentes compuestos de desechos orgánicos, así como un drenante que permite que el agua no escurra, que se usa para drenar las autopistas, como de otros para la industrialización.
Castañeda Nolasco dijo que, un metro cuadrado de un techo verde convencional cuesta desde 1500 hasta 3500 pesos, por el contrario, el de losa esta en mil pesos, fui ahí cuando surgió el reto de que esta fuera económica.
Durante la primera etapa lograron evaluar que el techo funcionara, pero surgió otro problema, pues el sustrato pesaba 200 kilogramos por metro cuadrado (kg/m2), este no era conveniente porque el reglamento de construcción exige que sea más ligero.
En proyectos posteriores, trabajaron con agrónomos y lograron bajar el peso del sustrato hasta 50 kg/m2, que las plantas se desarrollaran bien, y con materiales que están en cualquier tienda local.
Pueden usar materiales de residuos como las botellas de PET (polietilentereftalato) para que sea el material drenante, el sustrato lo podemos hacer con materia orgánica de hojarasca de los mismos jardines, y una pequeña porción de tierra o arena para que filtre, materiales económicos y que incluso puede ser trabajado por las mismas familias, dijo el profesor.
Castañeda Nolasco enfatizó que los techos verdes brindan diversos beneficios, entre ellos y el que más les interesó fue que al estar en un clima cálido, húmedo y subhúmedo, se retuviera el paso de calor hacia el interior de la vivienda.
Otro beneficio es evitar el escurrimiento del agua, ya que el crecimiento de la ciudad provoca que se sustituya el suelo vegetal por uno de pavimento hidráulico o asfaltico que además se impermeabiliza.
Agregó que, al caer agua en el techo escurre a las calles que suelen ser pendientes muy pronunciadas, por ello llegan con una gran velocidad al Rio Sabinal acompañadas de piedras, estas pueden provocar accidentes.
20 años atrás había la posibilidad de que en el suelo se impregnaba de agua y se infiltraba, ahora va a una velocidad tremenda por las calles volviéndose ríos, como en un mismo momento bajan de todos lados, el arroyo del Sabinal no es suficiente entonces se desborda y provoca las inundaciones que conocemos, hay muchas zonas de riesgo por los afluentes, dijo el profesor.
Entre otros beneficios esta la producción de oxígeno con ayuda de las plantas, estas consumen dióxido de carbono (CO2) que están ligadas con el calentamiento global, al deforestar esta es liberada al ambiente.
Al mismo tiempo, las plantas transforman la energía radiante del sol en energía química, por la fotosíntesis, en cambio las losas la almacenan y lo reemiten, esto da pie a que el aire se caliente.
El investigador puntualizó que, las plantas que usan son endémicas, es decir, no requieren de gran atención, han logrado implementar hasta 22 especies en las cubiertas que tienen en la Facultad de Arquitectura, desde plantas de aroma hasta medicinales.
Por último, mencionó que pueden dar asesorías, pero debido a la cantidad de gente que ha solicitado el apoyo, realizaran un curso para el próximo 26 de junio de 2021, por lo pronto, el día 21 de junio brindaran un taller especial una empresa de Querétaro, quien enviara a cuatro personas para obtener el curso.
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