Palabrear
Hablar es tener consideraciones con los demás
Me gusta decir. Diré mejor: Me gusta palabrear.
Las palabras para mí son cuerpos tocables, sirenas visibles, sensualidades incorporadas.
Escribo sin querer pensar… dejando que las palabras me hagan fiesta, niño pequeño en su regazo. Frases sin sentido, que corren con una fluidez de agua sentida, un olvidarse de riachuelo en el que las olas se mezclan, volviéndose siempre otras, sucediéndose a sí mismas…
No tengo ningún sentimiento político o social. Tengo, sin embargo, un alto sentimiento patriótico. Mi patria es mi idioma. No me pesaría que invadiesen mi país. Pero odio, con odio verdadero no a quien escribe mal, no a quien escribe con una ortografía simple, sino a la persona que escribe sin darle valor a la palabra. Porque la palabra son personas que serán vistas y escuchadas.
“Pienso a veces que nunca saldré de aquí. Y esto escrito, entonces, me parece la eternidad”.
Nota: Apuntes que tomé de Pessoa.
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