Don Quijote y la Biblia o el facebook
La mayoría de ojos que ahora saltamos de esta a esta y a esta palabra, podríamos en 2015 leer, por lo menos, la Biblia y don Quijote si diéramos a la lectura el tiempo que pasamos en el Facebook.
¡Pero a la Biblia no le entiendo! ¡El Quijote es muy difícil de leer!
Es posible. Tal vez es un poco como despertar en Nueva York sin saber inglés. Al principio te perderás, sufrirás hambre y frío. Si sobrevives, si no vas con un policía a pedirle por favor que te deporten, al final de 12 meses ya tendrás trabajo, sabrás inglés y conocerás buena parte de la ciudad. ¡Te sentirás muy orgulloso de ti!
Don Quijote de la Mancha es increíble, un prodigio de la inteligencia de Miguel de Cervantes Saavedra. Cuento dentro de un cuento, dentro de otro cuento; joya tras joya engarzadas en dos hilos fantásticos: Don Quijote de la Mancha y su fiel escudero, Sancho Panza, los personajes más inolvidables, los más entrañables de la literatura universal. Vale la pena perderse en su avenidas y de pronto no entender muy bien de lo que están hablando, como nos ocurriría en Nueva York, donde además del inglés se escucha gran puño de idiomas.
La Biblia, para los creyentes, es la Palabra de Dios. Y si es así, lógico es que tendrían que leerla. ¡Qué tal si Dios no es como me lo han pintado!
Escrita en tres continentes, por más de 40 autores y en por lo menos tres idiomas, narra la historia del hombre, a partir de la Creación hasta la consumación de todas las cosas. Es principalmente histórico (siguiendo el rastro del pueblo de Israel) profético, y poético (destacan los cantos del rey David y los textos de su hijo Salomón). Y en el Nuevo Testamento la vida y obra de Jesús.
(Cervantes tenía un ejemplar de la primera versión en español, traducida clandestinamente por Casiodoro Reyna. Se le conocía como la Biblia del Oso. Se castigaba con pena de muerte su lectura fuera de la iglesia).
¿Por qué Israel y no otro pueblo? ¿Por qué Jesús? Todo está claramente explicado para el que lee con calma, paciencia y deseo de saber. El peligro para un creyente es que comenzará a dudar mucho de su religión, de las enseñanzas de su abuelita y querrá hasta pleitear con Dios. ¡Eso está muy bien! Es el inicio de una Fe inteligente, más espiritual que religiosa.
¿Por qué un No creyente debe leer la Biblia?
Son muchas las razones. El nacimiento de Jesús partió la historia en dos: AC y DC. Es el libro, en su conjunto, con mayor influencia en el Arte (………) Dentro del paréntesis podríamos escribir decenas de músicos, novelistas, poetas, dramaturgos… inspirados en la Biblia. Es ésta una gran ciudad en la que también vale la pena perderse un poco.
Yo ya comencé. En 2015, si no flaqueo, volveré a verme las caras con don Quijote y el bueno de Sancho. Y volveré a sufrir con Job, a gozarme con David y a sorprenderme más con el inagotabilísimo Cristo, de quién dijo Juan, el evangelista: “Si se escribieran en libros las cosas que Jesús hizo y enseñó no cabrían en el mundo los libros que habrían de escribirse”.
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