¿Guardia militarizada?
De hecho, siempre lo fue. No habría sorpresa. Pero para algunos lo es. Tampoco sorpresa debería causar que las recurrentes, repetitivas, viejos argumentos regresen nuevamente, y, con ello, devolverle a la gente el miedo y el susto que produjo en las psiques el confinamiento y la pandemia. Una de las expresiones es “militarizar”, resultado automático del decreto presidencial que sugiere ingresar a la Guardia Nacional al ejército.