Reestructuración de la deuda, inmoralidad
Paso a paso, de manera fatal, se va legitimando institucionalmente la inmoralidad de la deuda contraída en el sexenio anterior. El jueves los diputados locales de la XLV Legislatura, los mismos que en su primera sesión de octubre de 2012 avalaron el empréstito de 3 mil 870 millones de pesos solicitado por Juan Sabines en el último suspiro de su gobierno, aprobaron que el Ejecutivo reestructure 11 mil 750 millones de pesos de los pasivos adquiridos con Banobras y la banca privada. Emilio Salazar Farías, apasionado defensor en tribuna del endeudamiento de último minuto, nos dice que no habrá más préstamos, que sólo se reestructurarán los plazos de pago y la tasa de los intereses. ¿Y de qué cuenta los bancos, que no son hermanas de la caridad, van a dar todas esas facilidades sin pedir nada a cambio? Mínimo quieren ver voluntad de pago en pesos constantes y sonantes, ¿y de dónde va a salir ese dinero? Una pista: ¿recuerdan que ya en septiembre pasado el Congreso, con esa cortesía hacia el Ejecutivo que le caracteriza, le autorizó contraer la posibilidad de un nuevo empréstito ante el Banobras, al que servirá como garantía el Fondo de Aportaciones para la Infraestructura Social? ¿Que no se pueden usar esos recursos para tal fin? Sólo es cuestión de “ingeniería financiera”. La voz discordante de Alejandra Soriano Ruiz, que denunció las triquiñuelas de la Mesa Directiva en la distribución del dictamen y el avasallamiento de la Junta de Coordinación Política, fue acallada por el coro del servilismo a ultranza. La devota sabinista Blanca Ruth Esponda, justificó: “necesitamos fortalecer la gestión de un gobernador muy comprometido con el pueblo de Chiapas”. ¿Desmemoria o cinismo? Diputados que llaman “receso económico” a la crisis económica, al desfalco de las arcas públicas, no son de confiar. Borrón y cuenta nueva es la consigna. Nadie quiere la rendición de cuentas porque es como escupir para arriba, porque sería como traicionar la red de complicidades que los colocó en ese lugar de privilegio. Sólo les falta aprobar la cuenta pública del último año del gobierno de la ignominia, para coronar su abyección. Felicidades diputados, están llevando a cabo un trabajo casi impecable. Excelente labor Luis Fernando Castellanos Cal y Mayor, Neftalí del Toro Guzmán, en el presupuesto recibirán su recompensa. Los dueños del poder se los agradecerán, los ciudadanos, no.
NI TANTA INTELIGENCIA.- Uno de los tantos secretos que tiene la confrontación gobierno-CNTE, salió a la luz de golpe. La guardia magisterial de la Sección 7 del SNTE detectó a tres agentes encubiertos de la Policía Federal que se infiltraron en la asamblea estatal de maestros. Dos mujeres y un hombre fueron desarmados y exhibidos ante los medios de comunicación. Duro golpe al comisionado nacional de Seguridad, Manuel Mondragón y Kalb y a su división de Inteligencia, que en este caso le hizo bastante falta. No debe haber mayor humillación para un espía que ser descubierto y que su identidad sea revelada frente a cámaras fotográficas y de televisión. Quedó comprobado a qué vinieron a Chiapas los más de mil policías federales que se hospedan en varios hoteles de Tuxtla. Dentro de sus atribuciones está “detectar los factores que incidan en las amenazas o en los riesgos que atenten contra la preservación de las libertades de la población, el orden y la paz públicos y proponer medidas para su prevención, disuasión, contención y desactivación”, pero resultaron muy novatos para cumplir con ese cometido que los exhibió como burdos “orejas”. Queda la duda de que si esa labor de espionaje a movimientos sociales le correspondería más bien al Centro de Investigación y Seguridad Nacional y no a la PF, orientada más a combatir a la delincuencia. ¿Pugna entre agencias de espías, falta de coordinación o ya el gobierno trata con perfil policiaco el conflicto social y político que superó ya los 70 días de existencia? Los agentes pillados fueron entregados sin un rasguño a la Procuraduría General de Justicia del estado, dependencia de la que salió el auto en que llegaron a las instalaciones del SNTE. Funciona la colaboración interinstitucional. Bien por los maestros, controlaron sus impulsos violentos. Claro, no es lo mismo golpear a periodistas que intentar agredir a agentes policiacos federales.
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