Los Pakal en la Sierra
Aunque se sabía que la prioridad en la política gubernamental sería el tema de seguridad, pocos pensaban que el combate al crimen organizado habría de ser inmediato. Afortunadamente, lo ha sido, con lo que se ha jugado con el factor sorpresa.
A dos días de que se cumpla el primer mes de este gobierno, ha habido más acciones para desmembrar a la delincuencia organizada que en todo el sexenio anterior.
La Fuerza de Reacción Inmediata Pakal, cuyos miembros fueron preparados con discreción, está siendo determinante en esta nueva forma de encarar a la delincuencia.
Su primera participación, y que llamó la atención incluso de medios internacionales como Le Monde y El País, fue en Comitán, cuando detuvieron a 92 policías, ocho días después de que Eduardo Ramírez Aguilar tomara protesta como gobernador del estado.
Ayer otra vez los Pakal se hicieron del eco mediático cuando el gobierno informó que habían aprehendido al presidente municipal de Frontera Comalapa, Jorge Antonio Villatoro Herrera, presuntamente vinculado a la organización el Maíz, que depende del Cártel Jalisco Nueva Generación, según ha publicado el periodista Fredy Martín Pérez.
La presencia del gobernador Eduardo Ramírez Aguilar en Motozintla a un día que terminara el año fue paradójicamente el mensaje del inicio del restablecimiento del orden en la región Sierra.
El gobierno de la Nueva Era, dijo el mandatario, no será un gobierno ausente, sino un gobierno para hacer valer la ley con autoridad en Chiapas:
“Nos preguntaron si no teníamos miedo, porque empezamos con todo, y les contestamos: amamos tanto a Chiapas que se nos olvidó tener miedo. Nosotros estamos haciendo nuestro trabajo, priorizando el tema de seguridad, porque es lo que quiere el pueblo: paz. Y así lo haremos aunque tengamos que gastarnos todo el presupuesto, pero la paz volverá a regresar a nuestro estado”, apuntó.
En abril del año pasado, al visitar Frontera Comalapa como candidato, prometió que regresarían las horas serenas a la región: “estoy empeñado en la paz en Chiapas; aspiro a que en Chiapas tengamos un estado donde no vivamos confrontados; somos un solo pueblo y somos una sola Sierra Madre, no somos distintos, no somos diferentes”.
Con las detenciones de mandos policiacos y del presidente municipal de Comalapa queda claro que en los territorios en disputa están involucrados políticos, que el crimen organizado ha sido capaz de poner o quitar a miembros de cabildo y a candidatos.
Reestablecer la gobernabilidad y la tranquilidad plenas entre los habitantes de la Sierra es un objetivo viable.
Habrá dificultades, por supuesto, porque los grupos delincuenciales han tomado como rehenes a los habitantes de las comunidades de Jaltenango, Siltepec, Frontera Comalapa, Motozintla, La Trinitaria y Capitán Luis Vidal, a quienes obliga a instalar retenes, establecer bloqueos y a protestar en contra de la presencia de las fuerzas armadas y de las policías.
Habrá errores, desde luego, y lo aprovecharán los delincuentes para desprestigiar en las redes sociales a la Fuerza de Reacción Inmediata Pakal. Algunas personas se sumarán a la burla, pero del éxito de este grupo de élite depende en gran parte la tranquilidad de los chiapanecos.
Ojalá que cuando los grupos delincuenciales vean que hay firmeza por combatirlos decidan alejarse de las comunidades. Es poco probable, pero no hay que descartarlo. Lo más probable es que no cedan la plaza con facilidad, que decidan enfrentarse y utilicen a los habitantes como escudos y hasta como combatientes forzados. Por lo pronto, los resultados de los Pakal y de las autoridades de seguridad son positivos y vislumbran un cambio de rumbo necesario.
No comments yet.