Hace 40 años
Una historia siempre traza en su imaginario el día que considera es el nacimiento, el inicio, o el hecho mismo, como la Revolución Mexicana, cuya fecha es el 20 de noviembre de 1910, pero al ser descubierta, en Puebla, días antes, inició la gesta de principios de siglo XX.
El EZLN que se dio a conocer a fines de 1993, pero resonó los primeros días de enero de 1994, tiene como fecha de surgimiento, un 17 de noviembre de 1983, pero en realidad la historia en Chiapas dio inicio entre 1971 y 1974 con el surgimiento del Núcleo Guerrillero Emiliano Zapata que habían conformado las Fuerzas de Liberación Nacional (FLN), las cuales surgieron un 6 de agosto de 1969.
Con el descubrimiento de la llamada Casa Grande en Nepantla, en 1974 se supo del lugar en donde se encontraba el Núcleo, y con ello inició la llamada Operación Diamante, por parte del ejército mexicano, el cual tardó varios meses hasta desaparecer al último guerrillero del núcleo.
Las FLN ante el golpe, se reorganizan y en 1975 vuelven a la montaña, y durante dos años se preparan de nueva cuenta, y en Chiapas, aprende de lo vivido, y reconocen el territorio, pero por desgracia el primer responsable muere, en 1979, por lo que los planes guerrilleros tienen que empezar. Con la tozudes que les caracteriza, se reorganizan, nombran al nuevo responsable nacional, y se agrupan de manera colectiva, y con la entrada de nuevos cuadros, las FLN crean sus reglamentos y es en donde aparece la idea-objetivo de formar al EZLN.
La organización crece a nivel nacional, su estrategia de acumular fuerzas en silencio, que le da, además, los criterios y principios revolucionarios, y que los hace encontrar con personas y experiencia de lucha para poder tener presencia en Chiapas para contar con lo básico y llegar a la meta de formar el llamado ejército del pueblo.
A partir de 1980, las FLN se dan a la tarea de formar cuadros y militantes provenientes de pueblos de la Selva, de los Altos, gozando de una extensa red familiar, y de personas allegadas a la Diócesis, lo que Neil Harvey ha llamado al Encuentro del mundo indígena con la organización político-militar como un cruce de caminos. Y es así porque los caminos de las organizaciones en Chiapas, de la iglesia, de activistas es eso, un cruce de caminos.
Chiapas ha tenido una larga lucha contra la finca, contra cacicazgos, contra la exclusión, y se han constituido procesos organizativos como el llamado movimiento campesino-indígena, pero también el de maestros, y de la llamada sociedad civil.
No se puede explicar la lucha en Chiapas sin todo eso, y más en la década de los años ochenta cuando se agudizan las políticas neoliberales que terminan afectando a la comunidad campesina e indígena y la represión de los gobiernos del partido de Estado.
La creciente organización clandestina provocó que los mismos pueblos decidieran ser parte del proceso, por eso cuando las FLN deciden dar el paso hacia la constitución del EZLN, lo hacen porque los pueblos pueden sostener tal travesía. Y así como los ahora, conocidos seis: tres mestizos y tres indígenas, debe valorarse a los compañeros que acompañaron en la base de la montaña, y que tejieron la red de apoyo para que desde los pueblos no faltar lo básico para alimentarse al pequeño núcleo; sino que el crecimiento en Chiapas y en otras partes del país, para alimentar de más personas con la preparación militar que ahora ya lo harían en la montaña.
Frank, uno de los seis, y además fundador del ANCIEZ, a una pregunta que pueden leer en libro IV que publica la Casa de todas y todos y que tiene por nombre Toma de pueblos (1983-1993, nos comparte lo que fue algo de su experiencia:
“Fue en la noche sí, ya entrada la noche nosotros nos trasladamos para llegar al Río Jataté, en ¿cómo se llama? Ahí hicimos un campamentito y ahí al día siguiente, es tiempo de lluvia.
Sí, noviembre
Ya crecido, hasta la chingada. Sí, había que atravesar hasta nadando el río porque los cayucos los arrasaban y porque además como teníamos un contacto ahí directo, había que gritar. Había quien nos podría cruzar, pero como éramos extraños, pues ese era el problema.
Mujeres, ¿o nada más la compañera Elisa?
Sí, ya nos vamos, nos fuimos adentrando. Primero, llegamos a la orilla del río Jataté, después del río Jataté nos fuimos a la Sultana “arribita”, entre La Sultana y Plan de Guadalupe se llama el pueblito, ahí pernoctamos. Fíjate que no caminamos mucho. No sé por qué. Estábamos muy pesados. Llevábamos mucha carga, bien cansados, ahí quedamos. Ahí nos escondía más o menos el compa ese, el “primo” y ya estuvimos ahí. Salimos de noche, salimos de madrugada… creo… (página 26)
Como puede leerse, el nacimiento del EZLN es colectivo, y nace en la montaña, arropado por el pueblo indígena, y la organización que había sido consecuente desde los años setenta, y que, aprendiendo de lo vivido, cumplió con el objetivo de formar el llamado ejército del pueblo como arma de liberación.
Hoy se dice que nació por sí mismo, y si se entiende cómo una organización clandestina pone su empeño para que los pueblos sean los protagonistas, es correcta tal afirmación. Pero se comete la injustica de no darle sentido a la historia, que nos dice y ejemplifica, el cómo una organización político-militar, puso a lo mejor de sus mujeres y sus hombres en acompañar al pueblo en su complejo caminar hacia su liberación, y es el caso de las FLN.
Las FLN/EZLN laboraron duro para fortalecer, que desde 1983 hasta su aparición pública, su formación política y militar fue por parte de cuadros, dirigentes y no, y que con el tiempo la responsabilidad militar corrió a cargo del Subcomandante Marcos, quien previamente fue acompañado por los Comandantes Germán, Rodrigo y Elisa. Su aprendizaje como cuadro de las FLN y sus propios compañeros y compañeras que son parte o lo fueron, como todo en la vida, aprendemos de manera colectiva.
El EZLN se fue fortaleciendo por los pueblos, por el trabajo de organizaciones que volcaron sus esfuerzos para el EZ pudiera llegar a cumplir los objetivos de cambiar la situación, con una teoría y práctica revolucionaria fincada en el marxismo-leninismo, y lo aprendido en la teología de la liberación de no pocos cuadros políticos de la organización.
La preparación y la situación en la entidad y el país, obliga a que la organización madre tome la decisión de formarse como Partido, y desde 1989 inicia los trabajos de preparación, de nuevos estatutos, y de hacer crecer los llamados frentes de combate, es así como intentan formar un frente norte, un frente paracentral, y fortalecer el más grande: el Frente Suroriental.
El avance de este frente Suroriental, demandan que el inicio de hostilidades se de a la brevedad posible, por lo que la Dirección de las FLN convoca a un Congreso fundacional del Partido Fuerzas de Liberación Nacional y que, en Chiapas, en 1993, toma la decisión de reorganizarse, y se aprueba la Declaración de Guerra: ¡El Congreso de las FLN le declara la guerra al Estado Mexicano el 26 de septiembre de 1993! Y se da el plazo que no pase un año, y se de inicio a las hostilidades. Es así como se prepara en 1993 la guerra del Partido Fuerzas de Liberación Nacional, por parte del brazo armado y que es de los propios pueblos.
La guerra inicia a fines de 1993, por ello en diciembre-enero se conmemoran los 30 años del levantamiento armado, así como los 40 años, este 17 de noviembre de la creación del EZLN. Hechos que sin duda son parte de la historia de Chiapas, de México. Y que sin estas acciones es difícil explicar la historia de hoy. Largos 40 años duros y ejemplares, como siempre Feliz Aniversario.
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