Republicanos españoles y futbol en Chiapas

Entre el mar de papeles que uno conserva a pesar de los constantes cambios de domicilio y lugar de residencia, me encontré una hoja suelta del periódico o revista Chiapas en México con un encabezado resaltado en mayúsculas y letras negras que dice: El Desastre del Futbol. Por más que busqué no encontré la fecha de la publicación. Pero existe una foto del Campeón de Liga y de Campeones, el equipo del Instituto de Ciencias y Artes de Chiapas (ICACH), fechada en 1947-1948, que me hace suponer que la publicación referida proviene de aquellos años: 1947, 1948 o cuando más, 1949. El texto de marras contiene las opiniones de cuatro entrevistados: Andrés Fábregas Roca, Carlos Rincón Rincón, Crescencio Mancilla García y Héctor N. Utrilla. En el texto introductorio a las respuestas de los entrevistados se informa que la conversación la condujo Chiapas en México, sin que aparezca el nombre del entrevistador. Por cierto, la hoja no está completa y existe una nota al final de la página que dice “Sigue en la página 10”, la cual no tengo. Quizá exista en la Hemeroteca Castañón en Tuxtla Gutiérrez el ejemplar de esta publicación. Lo cierto es que me hizo recordar dos fotos que buscando entre cajas no logré encontrar. En una de esas fotos aparece el “Equipo España” fotografiado en Tuxtla Gutiérrez hacia 1940, recién llegados a Chiapas los llamados “refugiados españoles”, los republicanos emigrados después de haber resistido el golpe de Estado que encabezó el General Francisco Franco en España en 1936. Por cierto, en la página 122 del libro de Tito Maza, Historia del Deporte en Tuxtla. 1908-1960, hay una foto en la que aparecen entremezclados republicanos del Equipo España y preparatorianos del equipo Preparatoria (tuxtleco), fechada en 1939. Esa fecha no es correcta porque Andrés Fábregas Roca no llegó a Chiapas sino hasta 1940, en las postrimerías del gobierno del General Cárdenas. Esa foto debe haber sido tomada o bien en la segunda mitad del año de 1940 o en 1941. En la foto está también Agustín de Leonardo Mingo, que llegó en el mismo grupo en el que venía Andrés Fábregas Roca. La otra foto que recuerdo es la que le fue tomada al equipo Atlas de Tuxtla Gutiérrez, campeón de liga 1944-1945. Es una foto coloreada que el Maestro Andrés Fábregas Roca tenía prendida de una pared en la biblioteca de su casa en la Colonia El Retiro. Tengo la memoria de que me pregunté siempre por qué el Maestro Fábregas (como se conoció a mi padre en Chiapas) tenía simpatías por ese equipo que representaba, en aquellos años, a la aristocracia tapatía.(¿Sería por los colores rojo y negro?). En la foto, los jugadores lucen el clásico uniforme roji-negro del Atlas y el Maestro Fábregas, hacia el costado izquierdo, aparece vestido sin uniforme. Mi padre me platicaba que había disfrutado esa época de entrenador del Atlas tuxtleco y más, haber logrado el campeonato de liga. Esa conversación desataba el tema del papel que había jugado el futbol en la integración de los republicanos a la sociedad en Chiapas. En efecto, la tarde que llegaron a Tuxtla Gutiérrez los republicanos, bajaron de los autobuses que los transportaban rodeados de la tuxtlecada que, curiosa pero también advertida por el sacerdote local, acudía para ver a los “comunistas” que deberían tener aspecto diabólico, según el mencionado sacerdote. Mi padre relataba, entre carcajadas, que se escuchaban expresiones como “y en donde están los cachos” o bien, “parece que no tienen cola”, haciendo referencia a los prototipos del demonio que difundía el sacerdote local. El gobierno chiapaneco, fiel a las instrucciones de Lázaro Cárdenas, había dispuesto una casa lo suficientemente grande como para alojar a los republicanos. Además, según platicaba el Maestro Fábregas, desde el día en que llegaron, el gobierno de Chiapas les facilitó un peso diario durante un mes, mientras encontraban trabajo. Por supuesto, el gobierno pagaba la renta de la casa. Así que aquella primera tarde en Tuxtla, y después del recibimiento que no escatimó el grito de “gachupines”, los republicanos se reunieron para discutir la estrategia de cómo ganarse a la sociedad local.  Decidieron que lo mejor que sabían hacer en conjunto era jugar futbol y de esta manera formaron el equipo España, que empezó con “juegos de exhibición” hasta ser aceptado en los torneos locales o en encuentros pactados. El futbol fue un excelente embajador y logró que paulatinamente se olvidara en la sociedad local el mote de “comunistas” y de “diablos”. En las entrevistas que dieron pie a este texto, el primer entrevistado es, precisamente el Profesor Fábregas. En un párrafo que precede a las entrevistas, se lee: “Afortunadamente, todas aquellas personas que recibieron nuestro escueto cuestionario han contestado al ver que no nos impulsaba más que la grandeza de Chiapas. Como verán los aficionados y amantes del futbol, los nombres de las personas que responden hoy, son todas conocidas en las lides futboleras…¿quién no ha recibido toda la ayuda bondadosa y sincera de don Chenchito Mancilla?….¿quién no los consejos del maestro Fábregas o de Carlitos Rincón?—:¿quién otro la ayuda monetaria de Alberto Redondo…” La opinión de los entrevistados que logré leer es que en Chiapas había talento para jugar al  futbol pero que la organización para hacerlo era un desastre. Se recomendaba establecer la Federación Estatal de Futbol amén de reorganizar las ligas municipales y el campeonato del Estado. Además se menciona a jugadores habilidosos de aquellos días. Por ejemplo, el Maestro Fábregas menciona al “Feyo” Aguilar como un jugador de excelentes facultades. Vienen a mi memoria los partidos de futbol que se organizaban en la casa de Don Enrique Zardaín, el empresario del café, que tenía un campo de futbol. Allí se integraban chiapanecos y españoles. Pero también los mismos españoles, los que eran republicanos y los que no lo eran. En esos partidos vi jugar a mi padre junto a un Benito Pardo, muy joven, que después despuntó en el futbol profesional con el equipo de Puebla. Queda mucho por saber de aquellos días en que llegaron a México los republicanos españoles, invitados por un Lázaro Cárdenas, que vivía los últimos días de su gobierno antes de pasar el poder a quien fungió como  Secretario de la Defensa Nacional durante el gobierno cardenista, el General Manuel Ávila Camacho. Hago votos porque algún estudiante de las escuelas de Historia en Chiapas, se interese en el tema y sumergiéndose en los archivos, escriba la historia de cómo, los republicanos españoles llegados a Chiapas, encontraron en el futbol al aliado más efectivo para integrase a la sociedad local.

Ajijic. Ribera del Lago de Chapala. A 19 de septiembre de 2021.