Elecciones 2021: ¿reconfiguración política en Los Altos de Chiapas?

Por Delmar Méndez Gómez*

Sobre los partidos políticos

A casi un mes de celebrarse la jornada electoral 2021, los resultados obtenidos en la región de Los Altos de Chiapas, conformados por los distritos locales electorales V, XXI y XXII, manifiestan ciertos cambios y constantes en comparación con el proceso electoral del 2018. Esto permite comprender el dominio y la presencia que mantienen ciertos actores políticos en esta región del estado. En lo que corresponde a los ayuntamientos, el Partido Revolucionario Institucional (PRI) se mantuvo en los municipios de San Juan Cancuc, San Andrés Larrainzar y Zinacantán, sumándose el municipio de San Juan Chamula, donde perdió el partido Morena, después de un proceso opacado por una violencia política que se mantuvo desde el 2018.

El Partido Verde Ecologista de México (PVEM) obtuvo el triunfo en cinco municipios: en Chenalhó (reelección), Aldama, Santiago El Pinar, San Cristóbal de Las Casas y Teopisca. Seguido del Partido Mover a Chiapas al ganar en dos municipios: Chanal y Tenejapa. Finalmente, están los partidos que únicamente ganaron en un municipio. El partido Morena en Chalchihuitán; el Partido de la Revolución Democrática (PRD) en Pantelhó, por la vía de la reelección; el Partido del Trabajo (PT) en Huixtán; y, finalmente, el Partido Fuerza México en Mitontic[i]. En resumen, de los 15 municipios, el PVEM obtuvo el mayor número de alcaldías, seguido del PRI, lo cual los coloca como la primera fuerza política en los municipios considerados indígenas.

Lo anterior, nos permite pensar que, por un lado, el partido Morena, que así mismo se considera de “izquierda”, no ha tenido la fuerza suficiente ni la proyección para gobernar en dichos municipios indígenas. Ello está vinculado con la poca formación política y de alianzas como sí ha sucedido, al parecer, en Tapachula y Tuxtla Gutiérrez donde nuevamente fueron los ganadores, aunque con varias inconsistencias demostradas en el trienio que terminará en septiembre de 2021. Por el otro lado, demuestra que aun existe una tendencia por apoyar a los partidos políticos de antaño, que cimentaron una cultura política asociada con la religiosidad y las costumbres de los pueblos, como una señora de San Juan Cancuc me compartió: “aquí se vota por el PRI porque así es la costumbre”.

Además, un sentir común en varias comunidades es que, con la llegada de Morena a la presidencia de México y la gubernatura de Chiapas, el programa “Prospera” ––de creación Priísta–– fue retirado en las comunidades, y sustituido por el programa “Bienestar social[ii]”. Esto generó cierta molestia en las familias que estaban acostumbradas a recibir fondos económicos y, por supuesto, el recorte de los operadores políticos que malversaban los recursos y los condicionaban con fines políticos-electorales. De acuerdo con Manuel Martínez Espinoza, con los datos ofrecido por el Instituto Nacional de Estadística y Geografía, “en el 2015 el 29.6% de los hogares en México recibían ingresos monetarios por programas de gobierno, esa cifra se redujo al 25%, según el censo del 2020”[iii]. Por ello, no es gratuito el sentir de un señor campesino de San Juan Cancuc, quien me expresó lo siguiente: “antes recibía un dinero por cada uno de mis hijos. Ahora ya no me dan nada, ese dinero me alcanzaba para comprar comida y fertilizante para mi maíz. Voté por Obrador pero no me gustó que quitara el Prospera […] ya no pienso votar por su partido”. Hay, al parecer, un malestar con las políticas sociales y los programas del actual gobierno, que ha cambiado las dinámicas de vida que las familias estaban habituadas a reproducir.

Por otro lado, vale la pena mencionar que de los partidos locales que contuvieron en la pasada jornada electoral, únicamente el partido Mover a Chiapas es el que ha logrado mantenerse en el terreno político-electoral, a diferencia de Chiapas Unido, Nueva Alianza Chiapas y Partido Popular Chiapaneco, los cuales no figuran en la vida política de los municipios indígenas de la región Los Altos. Cabe acentuar que, en casi todos los municipios de Los Altos, las candidaturas para las alcaldías se hicieron sin alianzas, es decir, se fueron por la vía del partido único, a diferencia de las candidaturas por la diputación local y estatal donde sí se formalizaron alianzas, principalmente entre Morena-PVEM-Chiapas Unido-PT y Chiapas Unido; y PRI-PAN-PRD. La mayoría de los curules del congreso local fueron para la primera de las alianzas antes mencionada.

Tabla 1. Resultados de las elecciones 2018 y 2021

Elaboración propia

De las 15 alcaldías mencionadas, únicamente en tres de los casos ganó una mujer: Angelina Díaz Méndez, con el PVEM, en Aldama; Rosa Díaz Méndez, con el PVEM, en Santiago El Pinar; y Maruca Méndez Méndez, Fuerza por México, en Mitontic. Sin embargo, esto no quiere decir que el ejercicio de su labor de alcaldesas se haga efectiva, pues se ha señalado insistentemente que existe una usurpación de los cargos por los hombres que dirigen los partidos políticos, por las parejas y los familiares de las mujeres elegidas. Por ello, resultará importante que el Instituto de Elecciones y Participación Ciudadana (IEPC), así como las instancias correspondientes, mantenga la mirada en los municipios donde las mujeres se ejercerán como alcaldesas, y en cualquiera de los cargos de elección popular, de las 19 que serán para el 2021-2024[iv].

Escenario otros y posibles

Como ya se ha mencionado por otros medios y analistas, la amplia victoria del PVEM es un parteaguas e indicativo de lo que será el proceso electoral para el 2024, al ganar en 35 municipios a nivel estatal. Morena, al quedarse con 25 de las 29 que obtuvo en el 2018[v], se verá condicionado por las decisiones y acuerdos del partido Verde, que se proyecta como la primera fuerza política en la entidad Chiapaneca[vi]. Esto permite inferir, por un lado, que su actual líder Eduardo Ramírez Aguilar[vii] tenga un camino “abierto” para contener por la gubernatura, que le fue negada en los comicios del 2018. Del otro lado, que Morena, al quedar como segunda fuerza, posiblemente tenga que aliarse con el PVEM, tal como lo hizo para las diputaciones locales. De otro modo, tendría un panorama complicado, y sus aspiraciones por ir por la vía del partido único, se vería mermada ante la nula presencia de dicho partido en la región Altos de Chiapas. En este sentido, las aspiraciones de Zoé Robledo Aburto, actual director General del Instituto Mexicano del Seguro social, quien ya empieza a “sonar” como el posible candidato de Morena para la gubernatura de Chiapas en el 2024, tendría un terreno con varias dificultades. Si bien faltan tres años para que sucedan las próximas elecciones, el terreno político y su configuración territorial empieza desde ahora, a partir de las alianzas, las negociaciones y estrategias que tanto los líderes de los partidos a nivel nacional y estatal planteen, y los simpatizantes que fungen como una de las vertebras principales para operar en las comunidades y municipios.

La alianza Morena-PVEM fue un experimento que dejó ciertos resultados esperados, como el obtener la mayoría en la próxima legislatura del congreso de Chiapas. Sin embargo, la visión política de Morena de llamarse un partido “alternativo”, de “izquierda” y “para el pueblo” es ficticio. Pues estas elecciones pusieron al descubierto que, cuando se trata de aliarse con el mejor postor y operador, el partido está dispuesto a renunciar a sus “ideales” políticos que los hizo ganadores en el 2018 ––de la mano de Andrés Manuel López Obrador––, para ser un primo hermano del PRI convertido en “Verde”. No por nada, ahora la alianza Morena-PVEM es considera la nueva figura caciquil con el nombre de “Vermor” o “Mover”, como recientemente lo escuché. Esto quiere decir, que Morena ya es considero uno de los tantos partidos políticos con los mismos vicios de antaño. Y eso, sin duda, tendrá un peso en el horizonte de la política que se delinea camino al 2024.

* Doctorando en Ciencias Antropológicas, Universidad Autónoma Metropolitana-Iztapalapa. Colabora en el Observatorio de las Democracias: sur de México y Centroamérica, (ODEMCA-UNICACH). E-mail: delmarmego@gmail.com

[i] Véase Martínez Mendoza, Sarelly (2021). “El Verde, el ganador de las elecciones en Chiapas”, en Chiapas Paralelo, disponible en: https://www.chiapasparalelo.com/opinion/2021/06/el-verde-el-ganador-de-las-elecciones-en-chiapas/ fecha de consulta: 25 de junio de 2021.

[ii] Véase Martínez Espinoza, Manuel (2021). “30 meses de política social de la 4T”, en Observatorio de Las Democracias,https://observatoriodelasdemocracias.com.mx/columnas/f/30-meses-de-pol%C3%ADtica-social-de-la-4t fecha de consulta: 26 de junio de 2021.

[iii] Véase Martínez Espinoza, Manuel, ídem.

** Inicialmente, el Partido Acción Nacional (PAN) había ganado con irregularidades. Después de un proceso de disputa, se diluyó el partido para conformar un Concejo Municipal, aunque integrado por simpatizantes priístas y morenistas.

[iv] Véase Ocampo, Isaías (2021). “Resultados elecciones 2021: El Partido Verde Avanza en Chiapas”, en Alcaldes de México, disponible en: https://www.alcaldesdemexico.com/notas-principales/resultados-elecciones-2021-el-partido-verde-avanza-en-chiapas/fecha de consulta: 26 de junio de 2021.

[v] Véase Ocampo, Isaías (2021). “Resultados elecciones 2021: El Partido Verde Avanza en Chiapas”, en Alcaldes de México, disponible en: https://www.alcaldesdemexico.com/notas-principales/resultados-elecciones-2021-el-partido-verde-avanza-en-chiapas/fecha de consulta: 26 de junio de 2021.

[vi] Los resultados obtenidos en Chiapas no se comparan con lo logrado a nivel nacional, donde Morena demostró su fuerza al ganar en 11 gubernaturas, sumando con 15 en total con las que ganaron en el 2018: Sonora, Sinaloa, Baja California, Baja California Sur, Nayarit, Colima, Michoacán, Guerrero, Tlaxcala, Campeche y Zacatecas; además de Chiapas, Tabasco, Veracruz y Ciudad de México.

[vii] Hay que mencionar que Eduardo Ramírez es actual senador de Chiapas por el partido Morena. No obstante, al ser el PVEM el que tiene la primera fuerza política en Chiapas, sea quien dicte los acuerdos y estrategias para obtener el triunfo en el estado para los comicios del 2024.