La feria internacional del libro de la UNACH
Del 30 de septiembre al 4 de octubre del año en curso se llevará a cabo la sexta edición de la Feria Internacional del Libro bajo el cobijo de la Universidad Autónoma de Chiapas (UNACH). Con altibajos y vaivenes propios de las políticas institucionales, su existencia representa un esfuerzo en el estado para acercar los libros a los noveles lectores, pero también a los familiarizados con los textos por cuestiones profesionales o, simplemente, por el gusto, la fruición por la lectura.
Si en otras ocasiones Centroamérica tuvo un papel relevante con presencia de casas editoriales e instituciones académicos o universitarias, en este año el país invitado es Puerto Rico, una isla con estatus de Estado Libre Asociado de los Estados Unidos de Norteamérica, y que cuenta con una extensa tradición de relación con los libros. Solo hay que recordar sus casas editoriales, la historia poética con autores decimonónicos como José Gautier Benítez, y los más contemporáneos Rosario Ferré y Luis Rafael Sánchez. Además del respeto por creadores que encontraron refugio político durante el siglo XX, como fue el caso del poeta andaluz Juan Ramón Jiménez, quien fallecido en la isla caribeña mantiene su presencia, y la de su compañera de vida y creación, Zenobia Camprubí, a través de la “Sala Zenobia y Juan Ramón Jiménez” en el Recinto de Río Piedras de la Universidad de Puerto Rico. Con certeza el espacio donde se conserva e incrementa la información relacionada con el Premio Nobel y su época; un lugar privilegiado para visitar pero también fundamental para la historia de la creación poética en castellano según los investigadores especializados en la literatura de ambas orillas del Atlántico.
Como toda actividad abierta al público, el contenido y la organización de la feria siempre pueden ser perfectibles, sobre todo tomando en cuenta las dificultades presupuestales que arrastran todas las instituciones del México actual, y más aquellas relacionadas con la divulgación de la investigación científica y la creación en humanidades, sin embargo la existencia de la Feria Internacional del Libro en Chiapas nos conmina a todos aquellos interesados, y enamorados de los libros, a hacernos partícipes de sus actividades que trascienden los recintos para la venta de textos, y donde se incluye la presentación de obras de distinta naturaleza, destacando las referidas al territorio chiapaneco y a sus habitantes.
Demos la bienvenida, por lo tanto, a esta nueva edición de la Feria Internacional del Libro en nuestro suelo, una actividad que pese a su juventud debe provocar satisfacción y, por qué no decirlo, agradecimiento a la Universidad Autónoma de Chiapas por su tenacidad en darle una continuidad tan difícil de lograr en eventos y programas de naturaleza académica y humanística. Ojalá otras universidades, tanto públicas como privadas, se dieran a la tarea de apoyar la feria y unirse a este esfuerzo; ello representaría la oportunidad de demostrar generosidad institucional pero, sobre todo, un interés por labores educativas más allá de las impartidas en las aulas, puesto que la formación de las futuras generaciones también se relaciona con su capacidad para la lectura y su comprensión. Y lo anterior solo se logra acercándose a los libros y, por supuesto, leyendo.
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