AMLO en Xalapa: crónica de un arroz a medio cocer
Desde muy temprana hora, las calles del centro de la ciudad empezaron a ser bloqueadas con el fin de instalar el templete y el mobiliario para el mitin que habría de celebrarse a las 5 de la tarde. Una amiga me dijo que si no tenía que ir al centro, mejor no lo hiciera porque a esa hora estaría López Obrador en la Plaza Lerdo. Alrededor de la una de la tarde me enteré que en las redes sociales ya circulaba la noticia que había algún tipo de altercado entre partidarios y detractores de AMLO. Por simple curiosidad hice un recorrido por el centro y no encontré nada de lo que ya se informaba a través de facebook, si pude observar que algunas personas acomodaban las vallas metálicas que suelen usarse en estos eventos, otras comentaban que había una disputa por el espacio y una muchacha filmaba con su celular lo que estaba ocurriendo. Pero, en general, nada fuera de lo “normal”.
Conviene precisar que en las oficinas del palacio de gobierno despacha, Miguel Angel Yunes Linares, quien por mucho tiempo militó en el PRI, pero ahora conquistó la gubernatura a través del PAN. En las oficinas de un costado, las que corresponden al gobierno municipal, está al frente un profesor universitario que contendió por Morena y ganó la alcaldía arrolladoramente, Hipólito Rodríguez Herrero. Antes de esto, Hipólito había sido candidato a diputado local por el PT, pero no tuvo éxito en esa contienda. El alcalde conoce muy bien las problemáticas de la ciudad no sólo porque la ha recorrido en todos sus rincones sino porque, además, ha sido tema de sus investigaciones y estudios. Por ahora, el reto más grande consiste en ofrecer soluciones a algunos de los problemas de la ciudad en un periodo de elecciones en que brotan conflictos por todos lados. Ciertamente no es el mejor clima para gobernar, pero esas son las condiciones que le han tocado, agravadas por una relación tirante con el gobernador actual, quien pretende heredar el cargo a su primogénito, Miguel Angel Yunes Márquez, quien compite por el frente PAN, PRD, MC.
Desde su llegada al palacio de Enríquez, Hipólito ha sido sistemáticamente hostigado por el gobernador. Malacostumbrados como están los gobernadores en México, creen que una vez que llegan al poder se les concede la facultad para la arbitrariedad y asumen sus cargos como si fuera patente de corso para la impunidad. Miguel Angel Yunes Linares, fiel a la pedagogía que recibió durante tantos años en el PRI, ha pretendido tratar como empleado al presidente municipal constitucional de Xalapa; pero éste ha resistido las andanadas autoritarias y pendencieras del gobernador, cuando lo que debería prevalecer es el respeto y el diálogo entre dos poderes que no se relacionan por obediencia sino, por el contrario, sería deseable e incluso necesario un espíritu de colaboración con el propósito de atender los reclamos de la ciudadanía.
Este es el ambiente que antecede a la visita que el día de ayer realizara el candidato puntero en prácticamente todas las encuestas, Andrés Manuel López Obrador. Por distintos medios se supo que la cita sería en la Plaza Lerdo a las 17:00 horas, pero eran casi las 6 de la tarde cuando llegué al lugar, pensando que me había perdido buena parte del evento. No obstante, pude percatarme que en el templete no estaba el candidato, solamente se encontraba alguien animando a las personas que ya abarrotaban la plaza, el parque Juárez y calles aledañas; lo cual me hizo pensar que la espera sería larga. En efecto, AMLO llegó casi a las 7 de la tarde y me pregunté más de una vez ¿Qué es lo que nos mantiene a todos aquí esperando?
López Obrador llegó acompañado de Cuitláhuac García, candidato de Morena a la gubernatura. Como en Chiapas, en Veracruz habrá elecciones concurrentes, con la diferencia de que acá no se elegirán alcaldes. En el entarimado estaban varios candidatos y dirigentes de Morena. Asimismo, se encontraba el dirigente nacional del PT, Alberto Anaya. Una de las primeras en tomar la palabra fue la candidata al senado, Rocío Nahle, quien cedió el uso de la voz a Ricardo Ahued, otro de los candidatos al senado. Ahued fue alcalde de la capital veracruzana por el PRI, pero el desastre en que se convirtió Veracruz desde el gobierno de Fidel Herrera y no se diga con Javier Duarte, hicieron que don Ricardo emigrara hacia otras trincheras políticas. Con capital político propio, Ricardo Ahued es un empresario y dueño de una compañía que se dedica a la venta de enseres domésticos muy reconocida entre la población xalapeña y de la región central de Veracruz. Mientras fue alcalde de la capital tuvo un desempeño aceptable y luego como diputado federal se opuso al incremento del IVA. En su intervención, dijo sentirse muy orgulloso de participar en la 4ta transformación de México y pidió voto parejo de los candidatos de Morena a los distintos cargos de elección popular.
Otro de los que tomó la palabra fue, Rafael Hernández Villalpando, quien se desempeñó como rector de la Universidad Veracruzana a principios de los noventa del siglo pasado. Luego fue alcalde de la capital veracruzana por el PRD y fue el primero en arrebatarle el poder municipal al PRI. Su gobierno estuvo plagado de conflictos con el gobierno estatal, situación que lo llevó a abandonar el poder mientras se le perseguía por el delito de bigamia. El candidato a diputado federal por el distrito X de Xalapa urbano, simplemente ofreció todo su apoyo a López Obrador.
El tercero en la palabra fue, Cuitláhuac García, candidato de Morena a la gubernatura. Delineó algunos puntos de su programa de gobierno, si el voto de los veracruzanos le favorece en las urnas. Mencionó que su plan se articula a través de cuatro ejes: apoyos al campo (particularmente a la producción de arroz y café), combate a la inseguridad (no con balas, sino con capacitación e incremento de salarios para policías), apoyo a los jóvenes y ampliar el número de escuelas. Todo esto podrá lograrse si se mantiene una eficiente coordinación con el gobierno federal.
En su alocución, volvió a reiterar sus críticas al gobierno de Miguel Angel Yunes, en el sentido de que no ha sido capaz de controlar la delincuencia, mientras que la inseguridad crece por todos los rincones del estado. Acusó a Yunes porque en campaña ofreció resolver el problema de la inseguridad, pero hasta la fecha no ha cumplido porque “mintieron, no saben cómo resolverlo o son cómplices; yo tengo la certeza de que los Yunes son cómplices de la delincuencia”.
En su turno, AMLO reiteró muchas de las propuestas que ya ha mencionado en otras ocasiones, como las de cancelar “la mal llamada reforma educativa” y la energética. Criticó al gobernador, Miguel Angel Yunes Linares, por pretender dejarle el cargo a su hijo y lo acusó de estar usando todos los recursos del estado para esos fines. (…) “nunca en la historia de México un gobernador ha dejado a su hijo siendo gobernador”. “Nos quieren hacer creer, dijo, que existe un empate entre Cuitláhuac y Miguel Angel Yunes Márquez, pero eso no es cierto porque el candidato de Morena le saca una ventaja de más de 15 puntos. Por eso pidió a sus paisanos veracruzanos un voto parejo por los candidatos de Morena para poder gobernar. Habló, también, de los sueldos de los altos funcionarios y de las pensiones de los ex-presidentes, mientras reiteraba que eso se va a acabar. “No puede haber gobierno rico y pueblo pobre”. Dijo que su sueldo quedará reducido a más del 50% de lo que hoy recibe Peña Nieto y como existe una ley que no permite que haya sueldos más altos que el del presidente en la administración pública, pues los altos funcionarios no tendrán más remedio que ajustar sus salarios. De nuevo, puso énfasis en la necesidad de combatir la corrupción y los recursos que sean liberados por estas medidas serían “para sacar adelante al país”.
Termino simplemente planteando algunas diferencias. Una de las que más me preocupa es la convocatoria al voto parejo, es decir, al sufragio indiscriminado por los candidatos de Morena. Entiendo la lógica del discurso, en tanto que se trata de contar con una mayoría en el Congreso para emprender reformas que reviertan aquellas que se aplican desde los 80 del siglo pasado y, al mismo tiempo, una estrategia política que permita estabilidad mediante el control del Congreso. Como ciudadano y elector potencial, no puedo más que estar en desacuerdo cuando se me pide votar de esa forma, cuando existen candidatos de Morena que no necesariamente tienen el mejor perfil. En Veracruz, por ejemplo, existen más de uno que resultan verdaderamente impresentables, que han formado parte del régimen anterior, es decir, son parte de la mafia del poder local. Por eso creo que el ciudadano veracruzano tendrá la disyuntiva de votar en forma diferenciada o completa, tal y como lo solicita el dirigente máximo de Morena, (no por los argumentos de los actuales gobernantes o lo que dice AMLO para contrarrestarlos) porque resulta una falta de respeto y un desafío a la inteligencia solicitar nuestro sufragio por alguien en quien no podríamos depositar nuestra confianza y no pasa una mínima certificación por dudosas trayectorias políticas.
No comments yet.