Si las paredes hablaran
Es probable que en alguna ocasión ustedes hayan escuchado entre charlas la frase si las paredes hablaran o quizá hasta suelan mencionarla en conversaciones. Sin embargo, ¿se han detenido un momento a pensar sobre el trasfondo de estas cuatro palabras? Les comparto una breve reflexión sobre mi pregunta anterior.
Recientemente, al transitar por las calles del lado oriente de Tuxtla Gutiérrez, mi ciudad coneja, me percaté del derribo de una escuela primaria, una de las que tuvo afectaciones por el sismo del 7 de septiembre del año pasado. Fue momentáneo el tiempo que tuve para apreciar este suceso, ver la maquinaria dejando todo en escombros es impresionante. Vino a mi mente que en enero de 2018 me tocó presenciar parte del derribo de lo que años atrás fue el cine Chiapas… gratas experiencias de mi infancia quedaron ahí.
Hilando ambos sucesos no pude dejar de traer a la memoria todas las historias que han quedado en las viviendas, escuelas, edificios que se colapsaron y los que han sido destruidos por lo deterioros que tuvieron a raíz de los sismos de septiembre del 2017.
Si las paredes de cada vivienda hablaran, cuántas historias nos tendrían que contar, desde las más amables y felices hasta las más tristes y desencantadoras. Cada instante que se fue tejiendo en la vida y esas paredes que dieron cobijo a distintas etapas de cada persona, familias, historias que se dibujan y desdibujan, susurros, voces, gritos, algarabía, llantos, nostalgia, silencios…
Las experiencias de personas adultas mayores que perdieron sus viviendas son tristes, ahí se les fue una parte de su vida… si las paredes hablaran qué tanto no nos dirían, inmensos tesoros acumulados en la narrativa oral de generaciones tras generaciones guardadas en ellas.
Es probable que algunas personas tengan más apego que otras a sus viviendas, sobre todo si detrás hay historias de esfuerzo y arduo trabajo, si las viviendas formaron parte de sus ancestros el valor sentimental cobra un sentido más fuerte.
Finalmente, algo que no se puede negar es que cada vivienda es un elemento importante en nuestras vidas y para mí las paredes que las resguardan tienen una función esencial, más allá de una simple construcción, son las guardianas de tesoros intangibles.
Sin comentarios aún.