Herzlich Willkommen 2018
Con cariño y gratitud al público lector de Voces Ensortijadas
En un abrir y cerrar de ojos transcurrió el 2017, al menos eso es lo que percibí, ya ustedes dirán si coinciden o no con mi opinión, estamos tan sólo a unos días de despedirlo. Es probable que ante la llegada del nuevo año hayan hecho memoria de los propósitos que se hicieron para este 2017, quizá no recuerden todos (como a mí me sucede), sin embargo, algunos los deben haber cumplido. Bueno, desde mi perspectiva lo importante es que esos propósitos que nos hacemos al comienzo de cada nuevo año no sólo queden en intención, sino que se realicen. Estoy convencida que el orden de cada propósito no obedece a una lista establecida, los diversos factores de nuestro entorno, en conspiración con el universo y el ser divino en el que ustedes crean son aliados importantes, sin dejar a un lado el interés propio, la constancia, el amor, la pasión, el entusiasmo y la esperanza que cada persona vaya depositando en sus propósitos.
Algunas ocasiones sucede que aunado a lo que nos trazamos al inicio de año, en el caminar van surgiendo otros propósitos. Eso es sumamente grato, esto puede implicar grandes retos, cambios, hasta ciertos sacrificios; no obstante, tiene su parte agradable, de aprendizajes, deconstrucciones y vivencias nuevas. Les comparto que uno de los propósitos que tuve oportunidad de realizar este 2017 es comenzar a escribir las líneas que de manera semanal ustedes me hacen el honor de leer a través de esta columna, Voces ensortijadas.
Voces ensortijadas cumplió este diciembre seis meses de estar compartiéndose, retomo un fragmento del primer texto de presentación de la columna publicado en la primera semana de julio, “Heme aquí entretejiendo palabras para iniciar una travesía que he venido dibujando desde el año pasado, diversos motivos han dado la pauta para empezar a caminar en el mundo de los géneros periodísticos de opinión, a través de la columna que he nombrado Voces ensortijadas. Entre las motivaciones está leer a Damaris Disner, a Andrea Pérez Mendoza Sánchez, a Isabel Araujo, a Alonso Herrera, a otrxs compañerxs columnistas, entre ellos a algunos de mis maestros, escuchar a mi familia, a mis seres amados, ir entablando comunicación con estudiantes, leyéndoles, escuchándoles, motivándome a partir de sus corazones, sus gustos, los míos, sus tristezas y mis días de nostalgia”.
Escribir no es tarea sencilla, implica muchos retos, entre ellos la constancia y el sumar este gusto o pasión con las demás actividades que hacemos. Lo anterior, sin dejar a un lado que, desde mi óptica, el corazón debe estar presente además de la razón. A seis meses de estar aprendiendo y desaprendiendo, me siento muy agradecida con Chiapas Paralelo por el espacio brindado, con mis seres amados por ser una importante fuente de inspiración y con ustedes público lector que además de leer, realiza comentarios que son elementos valiosos para continuar en este caminar lleno de experiencias para la vida. ¡¡Gracias por ser parte de estas Voces ensortijadas!!
Desde el corazón deseo que si en este recorrer del 2017 no llevaron a cabo todos sus propósitos o metas trazadas, se animen para realizarlas en el 2018 o se propongan nuevos retos, eso sí que puedan llevar a cabo y les resulten muy significativos. Si por el contrario, las metas trazadas para este año si las realizaron, les felicito.
Herzlich willkommen 2018, bienvenido 2018 y que tengan muy buen cierre del 2017.
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