El remolino destructor del Mocri EZ

Bajo la tutela del gobierno, el Movimiento Campesino Regional Independiente Emiliano Zapata (Mocri EZ) se ha expandido en los diferentes municipios de Chiapas, en una ola destructiva que arrasa sembradíos, pequeñas propiedades y casas habitación.

En Villaflores, Pueblo Nuevo, San Fernando, Ocozocoautla, pero sobre todo en Berriozábal, en donde cuenta con el apoyo de la presidencia municipal, el Mocri impone su ley, cobra derecho de piso, se apropia de predios y secuestra a legítimos propietarios.

No hay nadie que detenga el remolino pulverizador del Mocri EZ; por el contrario, en los ministerios públicos y en el aparato de justicia se ralentizan las acusaciones en su contra o se archivan definitivamente.

A la Mocri EZ, no hay que confundirla con la Mocri CNPA MN, y esta última lo ha advertido: “El Mocri EZ se ha dedicado a filtrarse en el movimiento social chiapaneco para desprestigiarlo y golpear a diferentes organizaciones y personajes, han hecho de porros en contra del movimiento magisterial, ha agredido a organizaciones estudiantiles, de transportistas, personajes de la política local, ha despojado de predios a particulares, ha retenido ilegalmente a ciudadanos pero lo peor de todo es que ha asesinado en varias ocasiones y aunque se ha hecho las denuncias nunca se ha dado un seguimiento real”.

El Mocri EZ no fue, ni siquiera en sus inicios, una organización que abogara por los derechos legítimos de sus integrantes. Sus líderes encontraron en sus seguidores una vía para medrar y enriquecerse, y por sus vínculos gubernamentales, una alianza perfecta que les ha garantizado dinero y defensa de los órganos institucionales.

MOCRI CNPA MN diferente a MOCRI-EZ

De cuando en cuando, para maquillar su imagen, el Mocri EZ se incorpora a alguna marcha en contra del gobierno, como lo hicieron en la movilización contra el gasolinazo, en donde cerraron la manifestación ciudadana con el golpeteo de sus garrotes y consignas contestatarias de los setenta.

Los propietarios afectados, sabedores de esa relación del Mocri EZ-gobierno no tienen muchas esperanzas de ser escuchados, y podría suceder, que ante tanta indiferencia oficial, se registren enfrentamientos, con resultados sangrientos, que podría cimbrar al sistema político local.

En Berriozábal y en Ocozocoautla, fundamentalmente, se está gestando un volcán explosivo, sin que ninguna autoridad intervenga o investigue lo sucedido, pese a las múltiples denuncias interpuestas por los afectados del Mocri.

Los despojos más recientes de esta organización se registraron en el Fraccionamiento Magaly y Santa Inés, en Berriozábal, en donde los se adueñaron de pequeños predios.

En el caso de Santa Inés han afectado a por lo menos 250 propietarios de casas y predios, los cuales cuentan con escritura pública.

Santa Inés era propiedad de María Mota de Burguete, pero por allá del 2000 decidió lotificar su propiedad. Encomendó para esas tareas a Ismael Castañón Ruiz y Rosa Veiry Clemente Solís, quienes poco después empezaron la comercialización, por cuenta propia, de los predios.

Eso, que fue calificado de despojo, llevó a la cárcel a ambos personajes. Ismael falleció en la cárcel pero Rosa Veiry logró salir y se juntó al Mocri EZ, quien ya con esta nueva alianza continuó con la tarea de ocupar predios de forma irregular y comercializarlos. Surgieron las colonias San Andrés, San Marcos y La Independencia.

Sabedores que no hay ley que le sea aplicado, el Mocri ha continuado su ola expansiva de adjudicación unilateral de terrenos y casas. No solo eso, según dicen los perjudicados, el Mocri amenaza, golpea y extorsiona a los pocos habitantes que aún permanecen en Santa Inés. La mayoría ha sido obligado a huir del remolino extorsionador.

Imparable, Mocri EZ sigue avanzando y consolidándose en un reinado del caos que se ha encargado de crear y propagar, con la complicidad del gobierno, en gran parte del territorio chiapaneco.