Érika Moreno, la maestra apacible, tratada como criminal
La profesora Érika Moreno esperaba que la jornada de protestas del viernes fuera rápida y pacífica.
Salió, sin desayunar, a las siete de la mañana de su casa, ubicada en el barrio El Último Suspiro de Suchiapa. Poco más de dos horas después había sido gaseada y detenida por la Policía Federal, y por la madrugada del sábado, trasladada, como delincuente de alta peligrosidad, a un penal de Nayarit.
Érika Moreno, de 35 años, no tiene nada que ver sin embargo con una delincuente como el gobierno pretende hacerla pasar; es de carácter apacible, profesional, formada en la Universidad Pedagógica Nacional de Tuxtla Gutiérrez, y profesora de la Escuela Primaria Juan de la Barreda de la colonia Los Pájaros desde hace cinco años.
Para ella, como para muchos de sus compañeros, no le fue fácil obtener una plaza; tuvo que cubrir interinatos por más de seis años y después de un examen quedarse con una definitividad como profesora de educación primaria.
En realidad, no está en desacuerdo con las evaluaciones, pero se opone a la reforma educativa por lesiva, mal planeada y por tratarse principalmente de una reforma laboral.
El viernes apenas estaba llegando al lugar en donde iniciarían las protestas cuando una nube de gas lacrimógeno le cegó la vista. No pudo correr. Los policías entonces la detuvieron y la subieron a un camión. No la golpearon, a diferencia de sus compañeros.
Su padre, Javier Moreno Gutiérrez dice que es una injusticia, que no comprende por qué a su hija y a sus compañeras detenidas las trasladaron en menos de 24 horas a un penal federal, y tampoco que no le permitieran hablar con ella.
Por las imágenes que difundió la PGR se enteró que su hija le dieron de comer en el camión que la llevó al aeropuerto, poca antes que la subieran a un avión que la trasladó a Tepic.
Cree que las cosas que llevaba Érika el día de su detención, como un celular y cartera, no se recuperarán jamás. Y es lo que menos le importa, “sino que regrese y bien, porque existe el riesgo que la quieran desaparecer”, dice.
La madre de Érika está al lado de su esposo. No participa en la plática. Se le ve triste, preocupada y cansada.
No es para menos. A diario ha visto a su hija salir muy temprano de su casa para trasladarse a su trabajo, pero en estos dos días siente su ausencia. Y aunque los compañeros y compañeras de Érika la han visitado y le dicen que pronto saldrá libre, porque no hay delito qué perseguir, ella se mantiene pensativa; pregunta por ratos, a su hija más pequeña, si hay alguna noticia de Érika.
Pero hasta el momento no hay nada. Solo la certeza de un atropello y una represión injustificada, de violencia institucional desmedida y desbocada.
Maestra Erika:
Solo pida a Dios y haga mucha oracion para que muy pronto este con los suyos, pida mucho por sus papás para que tengan un poco mas de paciencia, sabemos de usted por que la conocemos desde que usted una niña, dedicada y con muchas iluciones de ser maestra por que siempre quiso ser maestra, hare mucha oracion para que usted regrese pronto, la esperamos maestra ya verá que sera muy pronto.
Mendigo gobierno mira q le h valido el dolor de l pobre familia q inhumno es pero si la hace desaparecer s q mi padre Dios q esta en ls cielos muy temprano descargarà si ira contra el. Dios harà justici no hay mejor justicia q la q Dios hace. Primero Dios tengo mi fe bien puesta en Dios q asi sera. El.unico q tiene poder es Dios. Yo l he vivido en mi secuestro el me salvo a traves de mis oraciones. Y ya empece a orar x Erica y sus compañeros la.maldad del diablo gobierno no la.tocarà. a los hijos d Dios.
TENGO LA FORTUNA DE CONOCER A LA PROFESO ERIKA PORQUE EN LA ESCUELA DONDE TRABAJA ESTUDIA MI HIJO Y CUANDO SUPE QUE LA HABIAN LLEVADO A NAYARIT A UNA PRICION DE ALTA SEGURIDAD ACUSADA DE TERRORISMO Y NO SE QUE MAS ME DIO UNA GRAN INDIGNACION PORQUE NO ES POSIBLE QUE LE ACUSEN DE TAL COSA A UNA MUJER EN CUYO SEMBLANTE SOLO SE VE HUMILDAD Y MUCHAS GANAS DE HACER SU TRABAJO QUE CON MUCHO AMOR LO EJERCE.