Del grafiti en la banqueta a los muros de odio

 

  1. El Anti-Monumento

Los primeros monumentos (de tiempos de los griegos, los romanos, los egipcios) eran tumbas. Construcciones que se erigían por órdenes del emperador en turno para honrar a ciertas personas. Para eso se construyen, para recordar a los muertos. Los héroes del imperio tenían monumentos especiales, llamados heroa (heroon, en singular), que muchas veces eran construidos encima de cenotafios —tumbas vacías— pues solía pasar que el cuerpo de dichos héroes se perdiera en el campo de batalla. Se sabe que hubo guerras entre tribus por el control de estos santuarios.

El anti-monumento de +43 que se encuentra en la ciudad de México nos recuerda la impunidad; la incapacidad del Estado mexicano; la complicidad entre policías, militares y crimen organizado; nos recuerda que desde 2014 la sociedad no cuenta con ellos y nos recuerda también que muchísima gente, no sólo de México sino de todo el mundo, salió a las calles a demandar justicia, al grito de “¡Vivos se los llevaron, vivos los queremos!”.

Esa es nuestra convicción: están vivos. Nadie ha podido demostrar lo contrario (salvo que creamos en falsas historias de evidencias sembradas). Por eso el anti-monumento es un anti-monumento: porque no es una tumba ni un cenotafio. Es un recuerdo que nos dice “no se olviden de nosotrxs”. No sólo nos recuerda a 43 normalistas, tiene un signo de más (¡No es una cruz!) que nos dice que la cifra crece, que son muchas personas desaparecidas en este país desgobernado.

Hay mucha gente (en ese “mucha” estoy yo) que espera un día poder derribar el anti-monumento, sea porque los desaparecidos hayan aparecido o sea porque acabamos con la impunidad y la corrupción. No quiero que el anti-monumento se convierta, al paso de los años, en un monumento a la impotencia, un recordatorio incólume de lo que no pudimos cambiar.

Los monumentos se construyen desde arriba, así sean de Zapata, de Cantinflas, de Gamboa Pascoe o de Heydar Aliyev. El anti-monumento se hizo desde abajo. Los monumentos son para que los políticos lleven flores y den discursos. El anti-monumento debiera ser para encontrarnos, para mirarnos, para incluirnos. En lugar de decir “respeten y aléjense”, como dicen los monumentos institucionales, debiera ser un lienzo donde se encuentren todas las luchas que hacen frente a ese arriba que destruye y desaparece.

“Ninguna lucha aislada más” se dice fácil cuando son los otros, las otras, quienes se deben adherir a nuestra causa. Es más difícil cuando nos toca aceptar y recibir en el suelo de nuestros recuerdos a nuestras propias disidencias. Y es mucho más difícil aceptar que esas disidencias podrían tener razón.

 

  1. La izquierda y la banqueta

Un grupo de mujeres, del contingente separatista de la marcha del #24A, escribieron en la banqueta del anti-monumento: “Nosotras no somos Ayotzinapa, para ustedes sólo somos un número, ni una menos”. Eso decía, como ya dije, en la banqueta.

Al otro día un sitio web llamado Guerrilla Comunicacional publicó la foto de la pinta, indignados. Probablemente les pareció que la fotos de una banqueta pintada no era suficiente y buscaron más fotos. Encontraron dos más, que aunque eran de otro día y de otra marcha, las pusieron igual. Mintieron, manipularon la información, postearon algo falso. Murillo Karam los recibiría gustoso en su equipo. Por supuesto, las tres imágenes se hicieron virales entre las personas que apoyan o han apoyado el movimiento que exige justicia en el caso de los 43 normalistas.

Más tarde la misma cuenta convocó a un trolleo masivo contra una de las mujeres que habían pintado la banqueta.

Captura de pantalla 2016-04-29 a las 11.01.31 a.m.

 

La respuesta fue brutal.

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Aquellos que se quedaron callados el fin de semana, aquellos que ni se enteraron del #MiPrimerAcoso, aquellos protagonistas de esos y otros acosos, tomaron los muros.

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Los fans de la página de GC (que se asume de izquierda, que espera el triunfo de la revolución proletaria, que reconoce en el capitalismo al único y verdadero enemigo, que forma parte de algo llamado la Liga de Unidad Socialista) se dieron vuelo: generalizaciones, insultos, lugares comunes.

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El ajusticiamiento, tan caro a la izquierda mexicana. Los defensores del monumento que representa a un movimiento que busca justicia, piden fusilar a alguien sin juicio ni nada.

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…y Jaime. ¿Qué podemos decir de Jaime que no haya dicho él mismo ya?

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La lucha. Luchan por nada. Luchan por nadie. Nadie y nada, esa mitad del mundo, esos 61 millones de pobladoras de un México lastimado por la violencia, que los otros 58 millones no ven, no quieren ver. Pero al final, la frase tiene sentido: Son Nadie, por eso Nadie las quiere.

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Aberración

(según el diccionario de la RAE)

  1. f. Acto o conducta depravados, perversos, o que se apartan de lo aceptado como lícito.

(según el Wikcionario)

  1. Comportamiento desviado de lo aceptado como normal.

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Las verdaderas mujeres. Las otras no son verdaderas, son una fantasía. Una ilusión.

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Recordar otra vez: todas estas personas acudieron al llamado de un agregador de noticias que se dice de izquierda. Todas estas personas se asumen de izquierda. Esta es nuestra izquierda, cuyo principal argumento es un adjetivo sin sentido al que le suman otros adjetivos.

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Se portó mal, hay que romperle la boca. ¿Dónde está la diferencia entre una militante de izquierda y una de derecha? ¿dónde está esa frontera?

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putazos… viejas… La marcha, si recordamos, era en contra de las violencias machistas. Los destinatarios del mensaje tenían que aparecer de algún modo.

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Es grave que haya fans de la página Guerrilla Comunicacional que por defender la pureza de la banqueta que está frente al anti-monumento, pinten un muro virtual con una llamado a una ejecución sumaria. Es grave que haya mujeres que ante ese llamado, las acusen a ellas de estúpidas. Es grave que el resto, lectores y fans, no hayan dicho nada ante semejante barbaridad. Es grave que Guerrilla Comunicacional no se haya deslindado de todo esto.
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Cosas bonitas, dice. La imagen de su perfil dice muchas cosas más.

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¿Cómo se puede luchar por la justicia en el caso Ayotzinapa si tu pensamiento es el mismo que el de sus verdugos? Si la solución ante la disidencia son bolsas negras, entonces usted no es Ayotzinapa, usted es la policía de Iguala, de Cocula y de Huitzuco.

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La izquierda mexicana no puede ser esto. No puede ser tan cobarde. Tan cruel. Tan imbécil.

Una persona dejó el siguiente comentario en la página de GCM: “Camaradas, para ser de izquierda se necesita un requisito principal: tener buenos sentimientos y un gran amor por la humanidad”.

 

  1. Pelear con el enemigo equivocado

El anti-monumento es un símbolo para muchas luchas, no es la bandera de un solo grupo. El signo de más nos dijo que no sólo se buscan 43, sino muchos más, muchas más. Decir que somos Ayotzinapa es decir que nos adherimos a una exigencia de fin a la impunidad, a la violencia institucional y a la corrupción. Esa adherencia nos obliga y nos empuja a también buscar a las desaparecidas, a combatir el feminicidio, a expulsar las violencias machistas de nuestros entornos. Es la misma pelea. Desconocerlo es convertirse en cómplices.

El barco naufraga. Podemos matarnos unos a otras por ver quién se hace del timón de la “verdadera lucha”, pero esa será la única pieza del barco que nos quede al final, mientras nos hundimos.

6 Responses to “Del grafiti en la banqueta a los muros de odio”

  1. Luis
    2 mayo, 2016 at 9:00 #

    Hay que jalar parejo para bien común, esto es como una yunta de Bueyes, quien no coopere simplemente no pertenece.

  2. Led
    2 mayo, 2016 at 8:51 #

    Genial, nada mejor para explicar el problema al que se enfrenta la sociedad mexicana al negarse a ver la falta de valores de mucha gente, que usar las propias palabras de lo/as asesino/as, los agresores y violadores en potencia. No es invento, la violencia contra toda mujer que se atreva a señalar, existe.

    Y que conste también que muchas mujeres conformes con ser mantenidas son también parte de la agresión.
    Pero muchísimas mujeres, incluso no feministas marcharon porque se dan cuenta de que nuestra sociedad las marca y las encierra y muchos hombres marcharon porque se dan cuenta que si ésto no cambia, ellos también están condenados a ser señalados como avales de las actitudes que tanto dañan a la sociedad. Nuestra ciudad no debería estar dividida, pero tampoco debería ser ya tan abierta como antes,: abierta al abuso y a la manipulación. Quizá cambiando la maquinaria, haciéndola más congruente, el siguiente y necesario paso sea cambiar las instituciones que dan cobijo, alojamiento y comida a la misogínia a través de la más descarada impunidad y proteccionismo.

  3. Ayesha Altamirano
    1 mayo, 2016 at 15:25 #

    COMUNICADO DE LAS MUJERES DE LOS COLECTIVOS:
    RESISTENCIA MÉXICO
    Y RED DE ASAMBLEAS Y COOPERATIVAS

    DIRIGIDO A LAS MUJERES QUE HICIERON PINTAS EN EL ANTI-MONUMENTO
    Y A LA SOCIEDAD EN GENERAL.

    1. A pesar que nos sentimos afectadas por el mensaje de la pinta y por no considerar nuestra opinión para poner letras al anti-monumento, nosotras no estamos solicitando una disculpa, ni siquiera una explicación (tampoco nuestros compañeros del género masculino). Sólo expresamos que es muy importante para nosotras que nos dejen cuidarlo y mantenerlo como fue la idea inicial. Abogamos por la libre expresión, pero les pedimos que tengan cuidado con los mensajes que emiten; quien realmente lleva heridas en el alma es sensible y cuidadoso con las heridas de otros.
    2. Los colectivos participantes hemos tomado muchos riesgos para arrebatarle ese espacio al Estado. Como hemos participado hombres y mujeres en su colocación, defensa (porque nos llevaron granaderos y policía motorizada en diversas ocasiones para quitarlo), en el mantenimiento y cuidado, lo consideramos un espacio que se legitimó mixto, no un espacio exclusivo de ningún género. Los espacios no son propiedad privada, se legitiman con el trabajo y esfuerzo.
    3. Los colectivos que participan en el movimiento +43 de forma ACTIVA no han emitido en sus páginas ningún calificativo a las compañeras ni a la acción que realizaron en la marcha. Aunque el video de Guerrilla Comunicacional nos ha sido útil; no conocemos personalmente a nadie de ese medio y son otros los colectivos que participan en el cuidado y mantenimiento del anti-monumento. Cualquier problema con ellos esperamos puedan resolverlo de la mejor manera mediante el diálogo. Aún así, decimos explícitamente, que nos gustaría mucho que los que simpatizan con nuestro movimiento y los colectivos de feministas implicados terminaran con los insultos que se han desencadenado; por el bien de todas las luchas legítimas.
    4. Nuestro colectivo y los demás colectivos que participan en el cuidado y mantenimiento del anti-monumento y que apoyan activamente a los padres de los 43 no tenemos una lucha exclusiva, ni mucho menos una machista; nos regimos bajo los principios de igualdad social, equidad de género, respeto mutuo y justicia social. Solicitamos no ser enjuiciados ni calificados como «machos». Hemos participado en las diversas luchas del sur del país; por cuestiones de movilidad con más énfasis en las de Guerrero y TODAS las de la Ciudad de México.
    5. Sobre la versión que difunde Radio Zapote y algunas feministas que «dos o tres hombres golpearon y jalonearon a las mujeres» (en otras versiones dicen que fue sólo un hombre), estamos indagando cuál es la verdad. Los testimonios recabados de personas conocidas por nosotros, así como las fotos y videos que nos han proporcionado diversos ciudadanos y medios apuntan a lo contrario. Si las personas que difunden la versión de la agresión tienen algún material donde pueda corroborarse, solicitamos lo proporcionen; procederemos a solicitar asamblea con los otros colectivos del +43 para que se haga justicia.
    6. Respecto a la acusación de que para nosotros los feminicidios son sólo un número, desafortunadamente no lo son; son la vivencia personal que alberga en el corazón de dos miembros de este colectivo; agregando además el secuestro y asesinato de un menor de edad; el fallecimiento de uno de nuestros compañeros de lucha que fue preso político y víctima del acoso estatal que desgastó su salud . Ante estas penas personales, esta rabia colectiva y la violencia cotidiana que el Estado ejerce contra nosotrxs nos organizamos cotidianamente y actuamos en consecuencia mediante la organización, suma solidaria a toda lucha contra cualquier opresión y mediante proyectos de trabajo comunitario en diversos territorios de la Ciudad de México.
    Por otro lado, las madres de Ayotzi, en su recorrido por el país han solicitado que las madres y padres de otros desaparecidxs se sumen al movimiento para ser una fuerza nacional exigiendo el esclarecimiento de cada uno de los casos de desaparecidos del país. Nadie ha acudido al llamado; lo entendemos, porque todos aquí sabemos del terror que implica enfrentar al Estado, no juzgamos.
    #nosotrassísomosayotzinapa
    #vivasnosqueremos
    #vivxslxsqueremos https://www.facebook.com/245062295521140/photos/a.255651537795549.80361.245062295521140/1312396158787743/?type=3&theater

  4. Mayanin
    30 abril, 2016 at 21:15 #

    Grandiosa aportación. Mejor de expresar, imposible.

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