“¿Tienes frío? Toma uno ¿Quieres ayudar? Deja uno”

En las afueras del área de urgencias del hospital Gilberto Gómez Maza, las y los familiares de las personas enfermas se las arreglan para pasar el día y la noche. Colocan hamacas, casas de campaña, cartones en el piso, intentan descansar mientras esperan la recuperación de sus familiares.

Frente al hospital está un albergue que fue diseñado, precisamente, para dar atención a las familias de las y los enfermos. Sin embargo, para poderse sostener cobra algunos servicios, que aunque podrían resultar económicos para algunos, para muchos otros es imposible de costear.

El albergue se llama “Juan Sabines” se inauguró durante la administración pasada de Juan Sabines Guerrero. Desde un inicio se tenía previsto que ese lugar serviría de albergue, pero al ex gobernador se le ocurrió que debería ser un Museo para su padre.

Se conformó una Fundación llamada igual que es presidida por Juan Pablo Sabines –hijo del ex gobernador-. Los otros integrantes son también personas cercanas a la familia. Lo malo de todo esto que cuando terminó el gobierno, los integrantes de la Fundación abandonaron sus actividades.

El albergue ahora se sostiene de milagro. El nombre no le ayuda en nada para conseguir recursos, lo asocian con el anterior gobierno y en cierta forma lo está por su creación. Fue abandonado por todos.

La recién creada Fundación Chiapas Nos Une Gilberto Gómez Maza – y vuelven a caer en el mismo error al ponerle el lema del sexenio- debería de recuperar el albergue y hacer que funcione para lo que desde un inicio fue pensado.

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Cada vez que hablamos de donación o trabajo social hay quienes confunden estas acciones con un asunto de caridad o la manera en la que puedan deshacerse de lo que ya no les sirve y a la vez “autoengañarse” de que hicieron una buena acción.

En más de una ocasión he escuchado decir a las personas “esto ya no me sirve, así que lo voy a regalar”. Cuando decidimos donar algo debe de ser bajo el principio de entregar algo que le puede ser útil a la otra persona, NO que ya no nos sirva a nosotros.

Debemos de  solidarizarnos con las y los demás debe bajo una perspectiva de derechos humanos, de ver en el otro o la otra a nuestro igual. A veces una es árbol que da sombra, otras tantas veces, somos quienes necesitamos la sombra del árbol.

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“Muchos años después, frente al pelotón de fusilamiento, el coronel Aureliano Buendía había de recordar aquella tarde remota en que su padre lo llevo a conocer el hielo”. La primera vez que leí está narración –es el inicio del libro de Cien Años de Soledad de Gabriel García Márquez- fue en el hospital regional Rafael Pascasio Gamboa en Tuxtla Gutiérrez mientras cuidaba a mi padre que se recuperaba de una cirugía.

No recuerdo el tiempo exacto que mi padre estuvo internado en esa ocasión  porque la recuperación se le complicó –hay cosas que la memoria prefiere olvidar-. En medio de médicos, enfermeras, otros convalecientes y familiares con la misma angustia que yo,  es que conocía Macondo –ese lugar imaginario del autor colombiano-.

La lectura me ayudó a sobrellevar la situación. Nada es tan malo cuando se está absorta en una novela. Todo va a estar bien si aún podemos perdernos en las letras.  El tiempo se vuelve efímero cuando leemos. Las angustias se viven diferente cuando nos acompaña un libro.

Casualmente –nada es casualidad- el libro lo dejé en el cuarto del hospital cuando le dieron de alta a mi papá. Entre los medicamentos, recetas, indicaciones y la silla de ruedas el libro quedó olvidado. Nunca lo extrañé. Cumplió su cometido. Espero y siga rodando.

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En las redes sociales se hizo viral diferentes imágenes en donde están colgado abrigos y cobijas con la leyenda “¿Tienes frío? Toma uno ¿Quieres ayudar? Deja uno”.

Este miércoles 16 de Diciembre a partir del mediodía estará afuera del área de urgencias del hospital “Gilberto Gómez Maza” un espacio para que puedan donar ropa de frío en buen estado y limpia para las y los familiares de las personas enfermas del hospital. También se pondrá una caja para que puedan liberar libros y revistas.  Favor de replicar la información.