Preso por homonimia durante 17 meses
Les cuento que nos colgamos otra medalla, otro premio. De esos que me gusta ganar y llevo muchos en estos años de periodista. Víctor Hernández Gómes, un indígena de la etnia zoque de #Ocotepec estuvo preso un año con cinco meses en el penal de #Villaflores por un crimen que no cometió en Villacorzo.
Su pecado fue llamarse casi igual que un criminal que asesinó a un joven en una colonia de Villacorzo, y aunque el único testigo y el padre de la víctima nunca reconocieron al presunto culpable como el asesino, al juez penal del Poder Judicial Chiapas Horacio García Estrada junto al MP de la PGJE, nunca hicieron su chamba, les valió madre y le dieron ocho años de prisión.
Afortunadamente les cayó una amiga abogada, Francelia Estrada Valdez, muy hábil echó abajo la setencia pero no quedó libre. El presunto culpable por más que demostró ser otro y no el criminal, que dicen anda de mojado en EU, no fue dejado en libertad.
Fue hasta que le ayudamos con una campaña de denuncia mediática como por fin logramos liberarlo. Las autoridades como las moscas, sólo entienden a periodicazos. Y eso que apenas empezábamos. Venía lo mejor.
Con un «usted disculpe», la PGJE se desistió de la acción penal y quedo libre.
Y bueno, ya libre nos dimos cuenta que en efecto, Víctor no entiende bien el español, en su juicio nunca tuvo traductor. Y nada más por pena o no quedar mal a todo dice que sí. Le da pena decir que no sabe leer y escribir, simula que lee pues, y en una de esas al juez se le dio por irse por la vía fácil y pum, cerrar el caso con la sentencia.
Se perpetró pues un crimen sobre otro, un doble crimen. Primero el del joven villacorcense y luego el del indígena zoque, padre de cinco menores que sufrieron y sobrevivieron sin padres duranre 17 meses en la más vil miseria y pobreza.
El indígena zoque se llama Víctor Hernández Gómes y el verdadero asesino aún prófugo Víctor Manuel Hernández Gómez. Y por más que se puso eso en las manos del juez y TODA las pruebas, se montaron en su macho y ni madres lo dejo libre.
La CEDH de Juan Oscar Trindad Palacios, «el Señor de la hamaca», jamás hizo nada por el pobre Víctor.
Bueno, Víctor ya está libre, ahora lo que demanda es que allá en su pueblo donde el honor cuenta mucho, que se le pida una DISCULPA PÚBLICA, porque más de uno allá cree que si es un asesino.
Además pide ahora al Estado criminal en este caso, que le paguen los gastos que hizo su esposa y su padre. Se deshicieron de algunos cochis, unas láminas, unas vacas, pidieron «emprestado» con todo mundo para poder pagarle a un primer abogado que nomas no hizo mucho por su proceso. Y el tiempo que dejó de ganar un salario para mantener a su familia.
Es de esos casos que me joden el alma, me dan alegría, rabia e indignación.
Bueno, ojalá el gobernador Manuel Velasco Coello ponga la cara por el error garrafal que cometieron estos sus «servidores públicos» que deberían no sólo ser destituidos del cargo e inhabilitados para ocupar cargos públicos de por vida, sino ir a prisión ellos 17 meses para que sientan lo que pasó Víctor. Ojalá esto se resuelva acá nada más y no tenga que llegar a la CNDH o hasta la CIDH de la OEA en Washington.
En fin, este es uno de tantos casos de presos por homonimia en Chiapas. De pensar que hay muchos Víctor en las cárceles de Chiapas y no hay una o un abogado que los encuentre y nos diga acá hay otro.
Como decía al principio, no me pregunten jamás qué premios estatales o nacionales de periodismo he ganado. Ni me lo ofrecen ni los busco. Porque no tengo ninguno. (Bueno, una vez fui Jurado del Premio Nacional de Periodismo en el 2010) Mejor les haré una larga lista de casos de injusticia que se han resuelto por nuestra intervención como periodistas. Esas son las verdaderas medallas que me gusta colgarme.
Bueno el mérito no es exclusivamente mío, gracias a todos y todas las que apoyaron para hacer visible el caso de Víctor.
A los zoques también Gómez Ramiro Fer Ledesma D Saul Kak el indigenista Pepe Espinosa, la abogada Francelia y muchos otros colegas periodistas chiapanecos que apoyaron con replicar la denuncia. A todos gracias.
Y sobre todo a Change.org y mi amigo Miguel Trancozo Treviño
Toda la info en Soyvictorsoyinocente
Mi más sincero reconocimiento, créeme que quienes leemos este artículo nos contagiamos de esa alegría que compartes, pero que ante todo, es un acto de valor y respeto a la sociedad y sus leyes que muchos han perdido. Felicidades!!!