Ciudadanos, campañas y sobrevivencia
La cátedra no basta; los problemas y necesidades de Chiapas hay que entrarle y resolverlos desde la política ciudadanizada, afirma la académica Sonia Torres, tras dejar las aulas por una candidatura a la diputación federal en la actual ruta a los comicios de junio próximo.
Doctora en Educación y catedrática de Derecho en tres universidades de esta capital, la aspirante a legisladora federal por el distrito VI con cabecera en Tuxtla Gutiérrez, sostiene que las demandas comunitarias de apoyo son por la sobrevivencia.
La gente tiene hambre, quiere comer, aunque sus peticiones tienen anhelos por una existencia digna basada en la justicia y la restitución del Estado de derecho, expone.
Torres, quien también dejó el litigio y su despacho donde ha asesorado de manera gratuita a madres solteras, personas de la tercera edad e indígenas, enmarca los contrastes del discurso institucional con la realidad que padecen las mujeres rurales.
En el ejido Aguatenango del municipio de Venustiano Carranza las mujeres le expusieron que sus maridos las golpean hasta que echan sangre por la boca ; luego éstos con dos o tres refrescos que obsequian a la autoridad local consiguen impunidad.
Agrega que en el ejido Copoya de Tuxtla Gutiérrez, jóvenes de educación media aspiran al servicio permanente de internet para realizar sus tareas escolares.
La candidata del Partido del Trabajo (PT) dice que como resultado de una cultura paternalista electoral, las familias optan por la dádiva y soslayan la propuesta política como alternativa para la búsqueda de solución de sus necesidades.
Qué me traes, qué me vas a dar para que yo te abra la puerta y escuche, son las expresiones recurrentes durante el itinerario proselitista, afirma Torres, quien por la estrechez de su presupuesto de campaña, es apoyada por algunos de sus alumnos de las carreras de licenciatura y maestría.
Por ello, la candidata a diputada federal, cuyo distrito electoral lo conforman doce municipios de la región Centro, critica el despilfarro propagandístico de otros candidatos y partidos políticos.
Éstos son los candidatos que se dicen ambientalistas, pero que con sus materiales de propaganda: lonas y plástico degradan y contaminan los espacios naturales donde son colocados, denuncia.
Sonia Torres es originaria del barrio de Guadalupe en Tuxtla Gutiérrez. Es hija integrante de una familia de taqueros.
Con los suyos, dice, aprendió el valor del trabajo, como también la concientizó la discriminación y exclusión en sus días de estudiantes de leyes, a finales de 1970 en San Cristóbal de las Casas, donde observe cómo el indígena bajaba la acera al paso de los caxlanes ( mestizos).
Estas experiencias que forjaron su ideario político, afirma, pretende incluirlas en iniciativas legislativas de inclusión, justicia y equidad.
Sin comentarios aún.