La sombra digital de las y los candidatos
Después de los desvaríos y ridiculeces que hemos comenzado a ver en redes sociales por parte de algunos candidatos a puestos de elección popular, probablemente nos vuelva a surgir la duda sobre si acudir o no a votar en la próximas elecciones.
La vieja premisa de “que hablen mal de ti, pero que hablen”, tiene sus límites. Hacer jingles estúpidos, tomarse fotos ridículas sentado en el suelo hablando con un adulto mayor, salir disfrazado de narco, insultar a policías o algunas otras linduras sí los va a hacer que los recordemos, pero como estúpidos, ridículos o delincuentes; y si llegan a ganar, será porque son los favoritos del gober, porque son plurinominales o porque los apoya el narco. Pero todo eso no tiene nada que ver con la democracia.
El desencanto social se debe a que no vemos a alguien que valga la pena, lo que se alcanza a distinguir son propuestas demagógicas y trilladas, escándalos, frases vacías y poco creativas, pleitos o ridiculeces y muy escasamente propuestas.
Además las elecciones intermedias, especialmente las federales, han sido históricamente desdeñadas por los electores, porque los diputados no ofrecen beneficios directos, viajan mucho, trabajan poco, no rinden cuentas y la mayoría de la gente no sabe cuál es su verdadera función.
Sin embargo estas elecciones nos pueden servir para hacer experimentos sociales que nos lleven a mejorar nuestra práctica ciudadana de ejercer la democracia como un proceso constante en el que los comicios son únicamente una parte.
Por ejemplo, recientemente el Instituto Mexicano para la Competitividad (IMCO) lanzó el portal candidatotransparente.mx, que busca reconstruir la confianza ciudadana a través del compromiso y transformación de la clase política en nuestro país. “Queremos candidatos que antepongan los intereses de México a los suyos, una nueva clase política en donde no se haga política con dinero ni dinero de la política”.
Esto implica que invitan a todos los candidatos a gubernaturas, alcaldías y diputaciones de todo el país, a presentar mediante formatos descargables sus declaraciones patrimonial, de intereses y fiscal e irlas subiendo para su consulta pública en el portal para que cualquiera pueda verlos.
La idea es que los ciudadanos les pidan (o exijan) a los candidatos, sean del partido que sean, que presenten sus tres declaraciones. Sin embargo de los alrededor de 21 mil candidatos de todo el país, apenas se han registrado dos candidatos a gobernador, 9 candidatos a alcaldes y 9 candidatos a diputados, en total 20. Ninguno de ellos de Chiapas.
Aún cuando esta iniciativa independiente, u otras, no llamaran la atención de los candidatos por los que nos toca votar, es nuestra obligación y responsabilidad como ciudadanos conocerlos, investigarlos, informarse y no llegar sabiendo poco o nada de ellos a las urnas a elegir sin elementos.
Hoy existe muchas herramientas digitales para buscar en Internet y en las redes sociales la sombra digital de todos aquellos que pretenden representarnos y vivir del presupuesto público durante los próximos tres años. Hay que hacerlo, hay que hacer democracia por nuestra propia mano, ellos no lo van a hacer por nosotros.
@amadoavendanov
amado.avendano@mathesis.mx
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