Enoc, el lacayo de gobierno
Con mi apoyo y solidaridad para César Domínguez, Víctor Amezcua y sus familias.
Lo que hace que un gobierno sea útil son los contrapesos, y esos contrapesos no se los impone sólo; los ciudadanos, las organizaciones sociales y los medios libres tienen que hacer esa función, ponerle límites. Si la sociedad se desentiende de sus autoridades devienen los abusos.
Vayamos al asunto de fondo: el caso de los arrancones en San Cristóbal es sólo un ejemplo de cómo se maneja el poder. La tragedia tiene que ver, además del homicidio de una persona, con el uso de recursos y el poder público para beneficiar en lo específico a un partido y un precandidato, lo que representa una clara violación a la ley en función de que, presente o no el personaje, se trata de actos anticipados de campaña como ya se ha evidenciado hasta el cansancio, sin que la autoridad electoral actúe porque el autoungido “líder moral” y multi Tlatoanis es el nenuco en turno de la casa de gobierno.
El último documento disponible de Enoc Hernández no sólo es un insulto a la inteligencia, sino un agravio contra la sociedad sancistobalense y chiapaneca. Con un alto grado de cinismo habla de imprudencia y señala que “fue el propio presidente del comité de feria quien autorizo la nueva fecha para el día domingo 19 de abril a las 10 horas, pero en el eje vial numero dos, dentro de la zona urbana y en un perímetro muy peligroso porque es una zona habitacional”, como si no hubiera sido él y su partido quienes insistieron en que así fuera, en virtud de que en el otro escenario a 22 kilómetros de San Cristóbal no gozaría de la misma clientela política.
La pregunta clave es ¿habría existido evento sin partido político?, desde luego que no, porque el único propósito de los arrancones era rentabilidad política en beneficio de un partido y un personaje, insisto, respaldado desde el poder.
A eso hay que agregarle que el señor sigue impunemente en campaña anticipada, derrochando recursos, sabiendo como TODOS, que es el principal responsable de lo que sucedió, porque el único fin de los arrancones era promover la imagen de su partido.
Enoc, desde su imposición como alcalde en 2002, ha sido un personaje oscuro en San Cristóbal. Abogado metido en un principio a los medios de comunicación, hábil como operador político y como vendedor de espejitos al poder en turno, ha brincado en los últimos 15 años del PRI al desaparecido PAS, con el que gracias al apoyo de Pablo ganó la alcaldía, después al PT, al verde y ahora al morado.
Es esa especie de político pragmático, cínico y útil al poder porque no tiene moral, no le importa su reputación, ni tiene escrúpulos y está dispuesto a hacer cualquier cosa para mantenerse pegado a esa teta.
Enoc es uno de los instrumentos con el que los últimos gobernadores, desde Pablo, han utilizado para manifestar su desprecio hacia la sociedad coleta, un lacayo que es capaz, incluso de sacrificar a sus más fieles para salvarse él mismo.
Insensible, irresponsable, soberbio e “imprudente” presume la protección que le da el poder tras el trono y la impunidad de la que goza y según él, seguirá gozando.
Si la sociedad no hace algo, Enoc y quien lo patrocina se van a seguir burlando de los ciudadanos y eso significará que esta desgracia no ha terminado. El escenario ideal para ellos es que Víctor Amezcua y César Domínguez vayan a la cárcel por un delito que no cometieron, que el delito quede impune y la familia de la víctima en el abandono, que Enoc aparezca en la boleta electoral el 19 de julio, y que con el respaldo que trae y presume, sea el primero en estrenar el palacio municipal a partir del 1 de octubre, ante la indolencia de los sancristobalences.
Si eso ocurre habrá quedado consumada otra humillación hacia la sociedad coleta perpetrada desde la casa de gobierno. Advertidos están todos.
@amadoavendanov
eso que se habla de enoc hernandez cruz es toda la realidad de la corrupcion en chiapas.
yo tengo en mi poder documento originales de como ha usado este tipo el recurso publico pagandole a sus amigos 25 mil pesos a la quincena por dar dos horas de cursos los dias lunes, miercoles y viernes, firmados y autorizados por este tipo.