El grito de la incongruencia

Foto: Osiris Aquino/ Chiapas PARALELO.

No fue equivocación que el gobernador del estado, Manuel Velasco Coello haya incluido en la celebración de este año del grito de la independencia a Emiliano Zapata, personaje histórico que es altamente valorado en Chiapas. Hasta un ejército con su nombre hay. La acción no me parece criticable por un sentido histórico, sino por una cuestión de congruencia.

El video oficial del grito de la independencia inicia con la imagen del gobernador de Chiapas esperando recibir la bandera nacional. El gobernador se percibe durante todo el acto, como siempre, como que si estuviera en otra parte, como una persona que se maneja en automático, con una risa forzada, sosteniendo la bandera de forma robotizada.

En su arenga por la celebración de la independencia, el gobernador no sólo agregó al General Emiliano Zapata. También gritó vivas para: Fray Matías de Cordova, Fray Bartolomé de las Casas, Belisario Domínguez, los pueblos y comunidades indígenas, la unidad de Chiapas y remató con una frase que para más de uno sonó demasiado religiosa “Que el cielo bendiga hoy y siempre al pueblo Chiapaneco”.

Manuel Velasco agregó a los héroes que han enarbolado los grupos sociales que se han manifestado en contra de su gobierno.
A nivel nacional también los presidentes de la república han puesto su “sello” al grito de la independencia. Adolfo López Mateos: “¡Viva la revolución Mexicana! Luis Echeverria: ¡Vivan los países del tercer mundo!

Carlos Salinas ya había hecho mención de Emiliano Zapata en un grito de independencia. A todo pulmón desde el palco de Palacio nacional dijo: ¡Viva el caudillo revolucionario Emiliano Zapata! Ernesto Zedillo grito una viva por la democracia. Existe toda una historia de gritos incongruentes.

Bajo ese contexto la critica que se le hizo al gobernador, Manuel Velasco por haber mencionado a “Emiliano Zapata” en el grito de la independencia por una razón histórica se me hace excesiva. Yo le critico otras cosas como: sus faltas de políticas públicas para los pueblos indígenas que salió a vitorear la noche del 15 de Septiembre. Bien decía Octavio Paz sobre la celebración de esta fecha: “una multitud enardecida grita por espacio de una hora, quizá para callar mejor el resto del año”.

Manuel Velasco ha sido omiso con las luchas que enarbolaron los héroes que salió a vitorear: ¿Qué ha hecho por los pueblos indígenas de Chiapas? ¿Qué ha hecho a favor las y los agricultores de Chiapas? ¿Por la verdadera separación de los Poderes de Gobierno? ¿Por la libertad de expresión? Lo incongruente del grito se me hace criticable, lo demás es tan sólo anecdótico.