Conflicto territorial Chenalho – Chalchihuitan, retroceso de 7 años

Marcha para exigir solución a la disputa de tierras entre Chenalhó y Chalchiuitán. Foto: ARCHIVO

El conflicto territorial entre ambos pueblos comienza en 1973 con el inicio de los trabajos de reconocimiento y titulación de los bienes comunales de ambos pueblos por parte de los ingenieros topógrafos de la extinta Secretaría de la Reforma Agraria. Cuando realizaron las mediciones en ese proceso, los ingenieros no quisieron meterse al río para realizar las mediciones y lo hicieron caminando por la orilla del mismo. El resultado fue la modificación de los límites entre ambos pueblos que venían respetando al río como límite natural. El conflicto, por tanto, fue creado por la Secretaría de la Reforma Agraria, hoy  Secretaria de Desarrollo Agrario, Territorial y Urbano (SEDATU).

El 26 de mayo de 1957 y 6 de octubre de 1975 respectivamente, se publicaron el Diario Oficial de la Federación, las resoluciones presidenciales de Chalchihuitán y Chenalhó.

Después de que se emitió la Resolución Presidencial de Chalchihuitán, la comunidad de Chenalhó se dio cuenta de que no se respetó el límite natural entre ambas comunidades, límite que desde tiempo inmemorial había sido el río. Para no agravar la situación entre ambas comunidades, en fecha 6 de agosto de 1976 se firmó un convenio ante la Secretaria de la Reforma Agraria, en el que se acordó que al Ejecutarse la Resolución Presidencial de Chalchihuitan se tendría que reconocer el Río como límite natural.

No obstante el acuerdo citado, Chalchihuitán alambró y construyó muros de concreto en 1981 dentro del territorio comunal de Chenalhó para materializar la ejecución parcial que se le había hecho de su resolución presidencial el primero de diciembre de 1980. En 1983 Chenalhó quita los alambrados y destruye los muros. Sigue una aparente calma de 17 años.

En el año 2000, a raíz del inicio de diligencias por Chenalhó para la ejecución de su resolución presidencial, Chalchihuitán demandó a Chenalhó ante el Tribunal Unitario Agrario la restitución de 58-25-00 hectáreas, que presume se le había despojado desde Tz’ak Uk’um a Seranichimtik. Chenalhó contrademanda solicitando anulación de la ejecución parcial de 1° de Diciembre de 1980 de la resolución presidencial de Chalchihuitán.

Mientras se desarrollaba el litigio agrario, una serie de robos, destrucción de cultivos e invasiones se atribuían a Chalchihuitán, hasta culminar en el asesinato de un Antonio en el año 2008.

A raíz de este hecho, ambos pueblos acordaron la constitución de un Grupo Multidisciplinario para el estudio, análisis y conclusión del conflicto. Ambos pueblos acordaron aceptar las conclusiones y recomendaciones del Grupo Multidisciplinario. En el año 2010 el grupo citado emitió su informe, concluyendo que en señalar la responsabilidad de la Secretaría de la Reforma Agraria en el conflicto entre pueblos, y señalando que la propiedad histórica sobre el territorio corresponde a Chenalhó. Chalchihuitán reivindica derechos sobre el área en conflicto derivado de una errónea medición de los límites que generó una también errónea resolución presidencial.

El Grupo Multidisciplinario recomendó que la Secretaría de la Reforma Agraria, hoy SEDATU, acepte su responsabilidad y pedir disculpas  públicas a ambos pueblos por el conflicto causado, así como compensar los efectos provocados. Además dijo: “El Estado mexicano, a través del sector agrario, debe proveer de medidas compensatorias adicionales a favor de Chalchihuitán, para darle tierras de igual calidad a los parcelarios que resulten afectados por la desocupación de los terrenos de Chenalhó, así como dar certidumbre jurídica en el largo plazo para ambos pueblos sobre sus bienes comunales”.

El pasado día 13 de mayo funcionarios del gobierno del Estado y de la SEDATU, desconocieron tanto el acuerdo de 1976, como el informe del Grupo Multidisciplinario, y decidieron que quienes deberían recibir una compensación de 15 millones de pesos a cambio de entregar las tierras es Chenalhó. Tal decisión lejos de abonar a resolver el conflicto lo reactiva, retrocediendo seis años en el proceso de resolución.