#LeyTelecom, la libertad que pretende acotar Peña Nieto

Cada que me preguntan cómo fue que me hice “periodista independiente”, puedo ubicar sin duda alguna ese periodo de hace 5 o 6 años, cuando la censura gubernamental y los intereses económicos de las empresas periodísticas se juntaron para crear una nube de desinformación y obscurantismo mediático en Chiapas.

La historia hubiera quedado ahí, a no ser por la fortuna de estar en el momento histórico en el que la tecnología hizo posible la masificación en el uso del internet y las redes sociales.

Entonces un grupo de periodistas y ciudadanos/as tomamos por asalto estas herramientas, para hacer uso de nuestra libertad de expresión, para hacer valer el Derecho a Saber de la sociedad.

Contra eso poco o nada pudieron hacer, nos ganamos a pulso el ejercicio de nuestros derechos.

La historia no fue sólo nuestra, en el resto del país se fueron tejiendo otras cuentas. Con el tiempo fui conociendo a la nueva generación de periodistas que se nutrió y nutre de hombres y mujeres, quienes decidimos caminar independientes a los intereses de los grupos de poder y las industrias mediáticas.

Construimos nuestros propios medios de comunicación, construimos espacios informativos ciudadanos; y, de a poco, a pesar de las carencias que tenemos, vamos ganando audiencia y franjas que las empresas mediáticas “tradicionales” ya no pueden recuperar, porque sus intereses no están del lado de la sociedad.

La falta de legitimidad y liderazgo que ensombrece la figura del presidente de México (y de muchos gobernantes), es parte de esa resistencia social al sometimiento, que hizo posible en gran medida el uso del internet, las redes sociales y los medios de comunicación independientes.

Por eso ahora no es de extrañar que Enrique Peña Nieto y los grupos de poder que hay detrás, delante y encima de él, quieran acotar esa libertad y esos derechos.

Con la iniciativa de Ley de Telecomunicaciones #LeyTelecom, se pretende crear zonas de silencio y bloquear las señales de TV, radio e internet, cuando a través de estas se difundan o den cobertura a acciones que “ponen en peligro la seguridad nacional”.

Esta es una grave afrenta a la libre expresión. Por eso es un tema que nos debe preocupar y ocupar, porque afecta y acota el Derecho a Saber que como sociedad y ciudadanos/as tenemos.

Internet debe Fluir. Que se escuchen todas las voces #ContraElSilencioMX