Despido por embarazo, discriminación

Nora Beltrán, ciudadana del Distrito Federal, tenía un año cuatro meses trabajando en el Grupo Fisher’s cuando decidió ejercer su derecho a la maternidad. Ejercer su derecho reproductivo desató el acoso y hostigamiento laboral contra su persona, para, finalmente, ser despedida hace cinco meses, a las 27 semanas de gestación.

Su indignación la llevó a utilizar las redes sociales y a través de Twitter denunció su despido injustificado. El pasado 7 de junio en su cuenta personal, Nora escribió: “La empresa Grupo Fisher’s me acaba de despedir porque estoy embarazada, estoy siendo discriminada”.

Las siguientes denuncias revelaron que fue dada de alta ante el Instituto Mexicano del Seguro Social con menos salario. La joven dio a conocer los nombres de quienes la despidieron.

La denuncia de Nora llegó hasta el Consejo para Prevenir y Eliminar la Discriminación de la Ciudad de México (Copred), a través del director del Consejo, Iván Pérez Vitela.

Ahí la historia empezó a cambiar y hoy es ya una campaña activa para dar a conocer que el despido por embarazo en el DF es un delito, porque es un acto discriminatorio que atenta contra los derechos de las mujeres.

Como Nora, hay cientos, miles de mujeres que son despedidas durante el embarazo, tanto en el sector privado como dentro de las instancias de gobierno, incluso dentro de Poder Judicial, son removidas de su empleo eliminando con ello su derecho a la seguridad, a tener un parto digno en una institución de salud, como bien recordó ayer la ministra Olga Sánchez Cordero, durante su intervención en el lanzamiento de la campaña “Despido por embarazo, discriminación”.

Durante años eliminar esta práctica ha sido una constante del movimiento feminista y amplio de mujeres. En 2007 se propuso la reforma al artículo 133 de la Ley Federal del Trabajo para eliminar el requisito del examen de ingravidez para contratar a las mujeres, pero no fue sino hasta el año pasado que esta reforma quedó plasmada en dicho artículo en las fracciones XIV y XV.

La discriminación contra las mujeres es reconocida por el 52.5 por ciento de las personas que fueron encuestadas sobre discriminación en la capital mexicana. Algunas de las prácticas discriminatorias que se reconocen son el despido por embarazo, la no contratación y la violencia en hospitales, entre otras.

Lograr desterrar esta práctica y brindar información hacia las capitalinas es el sentido que emana de la campaña “Despido por embarazo, discriminación”, que estará en todo el sistema de transporte público capitalino y en medios de comunicación.

Hasta hoy el Copred cuenta con 25 denuncias de despido por embarazo. Seguramente vendrán muchas más; el reto es lograr primero la sanción para las empresas y patrones que violenten el derecho de las mujeres embarazadas, y la segunda parte será que esta práctica quede desterrada de la cultural laboral.

Veremos con el tiempo qué ocurre; mientras tanto la denuncia será la forma de romper el silencio cómplice que durante años ha permitido que esto siga ocurriendo. Silencio que incluye a la autoridad laboral, que tiene mucho que hacer para garantizar la ley.

Un buen paso será que esta iniciativa que lanza el Copred sea replicada en el resto del país, para que ninguna mujer sea despedida por ejercer su derecho reproductivo a la maternidad.

*Periodista y feminista, directora general de CIMAC.

Twitter: @lagunes28