Aprueba Congreso paridad en candidaturas locales y federales

 Anayeli García Martínez

La demanda de las mexicanas de participar en condiciones de igualdad en la vida política del país se abrió paso luego de que el Congreso de la Unión aprobó incluir en el artículo 41 constitucional, la obligación de los partidos de garantizar la paridad de género en las candidaturas al Poder Legislativo federal y local.

El pasado martes, el Senado avaló una reforma a la Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos, para crear el Instituto Nacional Electoral, reducir los tiempos de campañas electorales, y la posibilidad de anular una elección por rebase de topes de campaña. Además contempla la demanda de paridad del movimiento de mujeres.

Hoy fue el turno de la Cámara de Diputados y la reforma político-electoral fue aprobada en lo general por el Pleno legislativo.

En un primer momento, el dictamen de las comisiones unidas de Puntos Constitucionales, Gobernación, Reforma del Estado, Estudios Legislativos Primera y Estudios Legislativos Segunda del Senado, colocaba la participación política femenina en un artículo transitorio, pero las legisladoras lograron incluirla en la reforma constitucional.

En la discusión plenaria, tres senadoras alzaron la voz para que la paridad de género en las candidaturas legislativas quedara en la Carta Magna.

La legisladora del PRD Angélica de la Peña; del PRI Diva Hadamira Gastélum, y del PAN Marcela Torres Peimbert, llevaron a la tribuna la voz de las senadoras de todos los partidos.

Casi al concluir este 2013, año en que se conmemoró el 60 aniversario del sufragio femenino, las legisladoras hicieron un frente común para obligar a que el 50 por ciento de las candidaturas al Poder Legislativo sean para mujeres. Al quedar esta garantía plasmada en la Constitución, las legislaciones locales tendrán que adaptarse al nuevo criterio normativo.

La senadora De la Peña mencionó que desde 1953, cuando las sufragistas lograron el derecho al voto para las mexicanas, los avances han sido importantes en las cuotas de género, pero consideró que en esta reforma político-electoral era hora de contemplar la paridad en las elecciones federales y estatales.

Recordó además que esta modificación responde a los compromisos del Estado mexicano asumidos en la Convención sobre la Eliminación de Todas las Formas de Discriminación Contra la Mujer, el Pacto Internacional sobre Derechos Civiles y Políticos, y otras conferencias internacionales.

La demanda de paridad era un pendiente de la Legislatura federal anterior cuando también se trabajó una reforma política, pero la propuesta respaldada por todos los partidos políticos, empresarias, profesionales, académicas y activistas, no se tomó en cuenta en las discusiones.

La senadora Marcela Torres destacó que Acción Nacional tiene la convicción democrática de fomentar la participación igualitaria de las mujeres en la vida pública nacional.

“Este año se cumplieron 60 del reconocimiento del derecho al voto de las mujeres. Seis décadas han pasado y las mujeres seguimos luchando para que el voto pasivo, es decir, el derecho a ser postuladas como candidatas, sea una realidad”, dijo.

Puso en contexto que son pocas las gobernadoras, presidentas municipales y diputadas locales en comparación con las legisladoras federales que en 2012 llegaron al Congreso, gracias a una resolución de la Sala Superior del Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación.

Sobre estas mujeres que hoy ocupan una curul destacó: “No fue producto legislativo, ni de los partidos políticos; fue resultado de la tenacidad de las mujeres, que nos agrupamos en una red, sin distingo de partido, llamada Red de Mujeres en Plural”.

La priista y presidenta de la Comisión de Igualdad de Género, Diva Hadamira Gastélum, acotó que el pasado 11 de octubre el Ejecutivo federal presentó una iniciativa que “quita la trampa” por la cual muchas mujeres que aspiran a ser candidatas no pueden llegar.

La propuesta de Enrique Peña Nieto modificaba los artículos 218, 219 y 220 del Código de Instituciones y Procedimientos Electorales, para elevar la cuota de género de 40 a 50 por ciento, establecer que las fórmulas a senadurías y diputaciones (titulares y suplentes) sean del mismo sexo, y eliminar la excepción por la que los partidos podían incumplir la cuota al realizar “procesos democráticos internos”. No obstante, la iniciativa del Ejecutivo quedó pendiente en comisiones legislativas.

Esta tarde, la Cámara de Diputados aprobó en lo general la reforma político-electoral enviada por el Senado. De concretarse, la paridad de género en las candidaturas será una realidad en las elecciones federales de 2015.