Gobiernos recurren a diversas tácticas para minimizar las desapariciones: Frayba
*Redacción Carlos Almazán
El informe Tocar el vacío, publicado en 2024 por el Centro de Derechos Humanos Fray Bartolomé de las Casas (Frayba), analiza la creciente crisis de desapariciones de personas en Chiapas.
El informe es el resultado de una colaboración con las organizaciones Voces Mesoamericanas Acción con Pueblos Migrantes y Melel Xojobal, ésta última enfocada en procesos participativos con niñas, niños y adolescentes de pueblos originarios.
El informe señala que las instancias estatales y federales encargadas de investigar y buscar a las personas desaparecidas recurren a diversas tácticas para minimizar la gravedad del problema; desde la negativa a aceptar denuncias hasta la omisión de incluir a las personas desaparecidas en los registros oficiales.
La Fiscalía Especializada en la materia, ubica el informe, enfrenta una grave escasez de personal, lo que refleja el desinterés estatal en crear las condiciones necesarias para llevar a cabo investigaciones efectivas.
Entre el 1 de diciembre de 2018 y el 30 de junio de 2023, la Fiscalía General del Estado de Chiapas registró 201 carpetas de investigación por desaparición de personas a manos de particulares, pero ninguna por desaparición forzada.
Además, existe un extendido silenciamiento en los territorios donde ocurren estas desapariciones. Los patrones que se observan reflejan dinámicas nacionales, pero también presentan particularidades propias de las condiciones históricas, políticas y sociales del estado.
Tocar el vacío identifica dos focos rojos en la región. El primero, basado en datos del Comité de Naciones Unidas contra la Desaparición Forzada (CED), revela que la desaparición de mujeres en Chiapas supera con creces los índices nacionales. El segundo foco rojo, visibilizado por la organización Melel Xojobal, indica que en 2022 Chiapas ocupó el cuarto lugar a nivel nacional en desaparición de niñas, niños y adolescentes (NNA). Esto significa que, estadísticamente, existe un riesgo mayor de desaparición para mujeres y NNA en el estado.
La desaparición en Chiapas se presenta en distintos contextos que reflejan patrones diferenciados. Uno de los enfoques del informe es analizar la desaparición relacionada con la disputa y el control territorial por parte de la delincuencia organizada.
La situación en la región Sierra y Frontera es particularmente preocupante debido a la violencia exacerbada por los conflictos entre grupos delictivos, lo que ha resultado en un aumento de las desapariciones. Sin embargo, para las organizaciones es medir la magnitud del problema debido a la violencia imperante y a la desconfianza en las autoridades.
Otros patrones documentados en el informe incluyen la desaparición de personas en movilidad internacional, desapariciones vinculadas con la violencia político-electoral, detenciones arbitrarias por agentes estatales, violencia contra mujeres, incluidas la trata de personas y el feminicidio, desapariciones de defensores de derechos humanos, y las cometidas en el contexto de las acciones militares y paramilitares de contrainsurgencia durante los años noventa.
Dentro del informe, ubican al pendiente histórico: la guerra de contrainsurgencia que siguió al levantamiento armado del Ejército Zapatista de Liberación Nacional (EZLN). El Centro de Derechos Humanos Fray Bartolomé de Las Casas registró al menos 37 personas desaparecidas en este contexto, además de 32 personas desaparecidas en combate reivindicadas por el EZLN. El gobierno actual, bajo la administración morenista, continúa incumpliendo con su deber de búsqueda, verdad, justicia y reparación integral.
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