Registran a nueva especie de Abronia
* La publicación especifica el registro por primera vez de una nueva especie de lagartija arborícola.
Adam G. Clause, Roberto Luna Reyes, Oscar Mendoza, Adrián Nieto e Israel Solano publicaron un artículo científico, en el que dan cuenta del registro de una nueva especie de Abronia arbórea que se conoce únicamente de la localidad tipo en las tierras altas del norte de Chiapas.
Las especies del género Abronia, son conocidas coloquialmente como «escorpiones» o «Dragoncitos». Se tratan de un grupo de lagartijas nativas de América, en su mayoría arborícolas, con aspectos y colores llamativos y que por el contrario a lo que se cree, ninguna es venenosa.
En el artículo, se idéntica los bosques montañosos de Mesoamérica como famosos por su biodiversidad endémica, y los lagartos caimanes arbóreos (género Abronia) son vertebrados de alto perfil endémicos de esta región.
La nueva especie se diagnostica a partir de todos los demás miembros del género Abronia por la siguiente combinación de caracteres: falta de escamas supraauriculares protuberantes o en forma de espinas, falta de escamas posterolaterales de la cabeza protuberantes o en forma de casco, dorso de la cabeza de color amarillo pálido con marcas distintivas. marcas oscuras, 35 a 39 filas de escamas dorsales transversales, la fila más lateral de escamas ventrales agrandada en relación con la fila medial adyacente y el dorso marrón con bandas transversales más oscuras que a veces se reducen a filas de manchas.
Incluimos provisionalmente la nueva especie en el subgénero Lissabronia según la evidencia genómica y morfológica, pero sus resultados también sugieren una estrecha relación con el subgénero Abaculabronia .
La nueva especie está geográficamente separada de las especies más cercanas de Lissabronia y Abaculabronia por la Depresión Central de las tierras bajas de Chiapas.
La pérdida continua de hábitat y otros factores ponen en peligro a la nueva especie, lo que nos lleva a proponer su inclusión en múltiples marcos de especies amenazadas. Debido a que la Sierra Norte tiene poca cobertura de áreas protegidas, comentamos brevemente el potencial de esta nueva especie para estimular la conservación en la región, resaltaron.
La etimología o bien el nombre de la especie es un adjetivo femenino singular en el caso nominativo derivado de Cuñemo (ortografía alternativa: Kuñømø o Kujnyä’mä), que es el nombre de Coapilla en la lengua indígena zoque. Coapilla se deriva de las palabras náhuatl coatl (serpiente) y apan (río) y significa “río de las serpientes”, mientras que Cuñemo ha sido traducido de diversas formas como agua entre los árboles (“agua entre los árboles” en inglés), lugar de la gran capital (“lugar de la nueva o gran capital”), o corona de cerros (“corona de colinas”) según los vecinos de la zona.
El nombre elegido, derivado de la lengua zoque, se refiere al ejido y municipio que alberga la única población conocida de la nueva especie. Nuestras consultas a los vecinos de Coapilla sobre este nombre recibieron respuestas universalmente positivas. La pronunciación en inglés recomendada es “koon-YEM-ih-kuh”.
Sin comentarios aún.