Estados deben reconocer que han fallado en gestionar la migración, solo así se puede avanzar: REDODEM
La Red de Documentación de las Organizaciones Defensoras de Migrantes (REDODEM) exigió a los Estados participantes en la “Cumbre Regional sobre Migración “Por una vecindad fraterna y con bienestar”, asuman y rindan cuentas por sus responsabilidades legales en materia de protección y garantía de derechos de todas las personas que se encuentran o transitan por su territorio.
En el marco del dicha Cumbre, la Redodem insistió en el reconocimiento del Estado Mexicano en fallar en sus medidas para gestionar la migración e incumplimiento con sus obligaciones internacionales en materia de derechos humanos, derecho humanitario, refugio y protección internacional.
Solo así se podrán sentar las bases para avanzar en la construcción de soluciones y en un acuerdo regional coordinado y coherente que, efectivamente, ponga en el centro la dignidad y los derechos de miles de seres humanos forzados a salir de sus países de origen debido a las fallas de sus propios Estados para garantizarles la vida, seguridad, integridad y desarrollo, externó.
Las organizaciones de la sociedad civil e internacionales recordaron los años de cuestionamiento y crítica de las políticas y medidas de contención, ya que han documentado y hecho evidente todos sus efectos nocivos para las personas en contexto de movilidad humana, llevándolas al límite y desprotegiéndolas; lo que a su vez favorece al crimen organizado que ha creado un negocio ilegal rentable a costa de sus necesidades y desesperación.
No hay duda de que se necesita un esfuerzo regional y coordinado para abordar las causas de la expulsión, pero estos esfuerzos, si se impulsan con políticas efectivas y sostenibles, verán resultados a largo plazo. Cada Estado tendrá que tomar medidas y tener la voluntad política y condiciones para llevarlas a cabo de manera sostenible, sostuvieron.
Reflexionaron sobre la necesidad urgente de políticas y programas que atiendan las necesidades básicas de las personas que actualmente se encuentran en contexto de movilidad, ya que miles de seres humanos, incluidos bebés, niñas, niños, adolescentes, mujeres, entre otros grupos de población, enfrentan dichas violencias y afectaciones que ponen en riesgo su vida, integridad y desarrollo.
Por tanto, la Cumbre debería servir para que los Estados recuerden sus obligaciones nacionales e internacionales para proteger los derechos humanos y las necesidades de protección internacional.
Al mismo tiempo, aprovecharon para reiterar que los derechos y dignidad de las personas no pueden ser objeto de retóricas electorales. Se aseguren del cumplimiento de alternativas legales, como en México están consideradas, para garantizar el tránsito regular de personas por el territorio nacional que reduzcan los riesgos.
Implementen medidas de atención humanitaria que atiendan las necesidades de protección especial para poblaciones en mayores condiciones de vulnerabilidad. Reconozcan la responsabilidad legal de cada país en materia de protección y garantía de los derechos de todos los seres humanos, sin ninguna distinción Y en la medida en que los Estados nacionales reconozcan que las personas en contexto de movilidad humana no son «el problema», sino las maneras de abordar esta realidad.
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