Criminalidad impacta economía de San Cristóbal de Las Casas, la ciudad intenta levantarse
Ejército y policías mantienen recorridos en zonas de disturbios
Menos de 24 horas después que los enfrentamientos entre grupos del crimen organizado paralizaron la principal ciudad turística de Chiapas, algunos comercios y restaurantes abrieron sus puertas, y artesanos continuaron con la venta de sus obras; los prestadores de servicios turísticos y de comercio advirtieron que dejar morir esta actividad expondría más a la población a actividades ilícitas.
La actividad turística en el estado cerró el 2022 con una afluencia de 82 millones de visitantes y una derrama económica de más de 27 mil 800 millones de pesos, según datos de la Secretaría de Turismo.
El turismo es la segunda fuente de ingresos propios en el estado, solo por debajo de las remesas. Sin embargo, el gobierno de Estados Unidos emitió una alerta de viaje a San Cristóbal de Las Casas por la situación de violencia que se está viviendo; el turismo de esa nación representa el 29 por ciento de quienes visitan Chiapas.
La zona norte de San Cristóbal
Luego del mediodía de este martes, en los dos corredores turísticos de San Cristóbal de Las Casas -el Eclesiástico y el Guadalupano- algunas tiendas y restaurantes abrieron sus puertas. A esa hora se veían pocos transeúntes, pero cuatro horas después, turistas que pasaron el día anterior resguardados en sus hoteles, empezaron a transitar.
En las calles más alejadas, sólo las tiendas que abastecen a la población local abrieron. Claudia, una chef que tiene un restaurante exitoso a unas calles de los andadores turísticos dijo que ella no abrió su negocio, porque las personas que trabajan ahí viven en la zona norte de la ciudad, donde se dieron los enfrentamientos que duraron más de 8 horas; y en ese lugar aún se vive tensión y miedo.
En la zona norte de San Cristóbal vive la clase trabajadora, la que fundó las 96 colonias que ahora componen este lugar de calles sinuosas ubicadas en laderas. Son en su mayoría indígenas que fueron expulsados o migraron voluntariamente de sus municipios.
Habitantes de esa zona -con la condición del anonimato- accedieron a explicar porque el lugar se ha convertido en un lugar de enfrentamientos. Detallaron que entre la clase trabajadora sus principales ingresos provienen de emplearse en restaurantes, tiendas u hoteles; o fundar sus propias tiendas, y es por ello que tienen locales en los principales mercados de la ciudad.
Esta población también genera más de 35 mil votos en periodo electoral, y con estos votos cualquier persona que quiera ser alcalde, gana el proceso. “Por eso los partidos políticos y candidatos empezaron a formar grupos de choque en esta zona, para presionar la tendencia del voto. También empezaron a armarlos y desde hace dos trienios, les dieron motos para que se movilizaran mejor”.
A la par, en el afán de ampliar el comercio con lo que demanda el turismo, algunas personas empezaron a participar en la venta de mercancía ilícita, particularmente la venta de droga para turistas que llegan a la ciudad y buscan esas sustancias.
En los corredores turísticos la venta de mariguana es común, en esta actividad también participan extranjeros que se han quedado a vivir en la ciudad.
Los pobladores explicaron que, al igual que en resto del país, la presencia de los grandes cárteles nacionales que controlan la producción y tráfico de droga “vieron en esta región de Chiapas un campo perfecto para crecer”, aunque a nivel local -explicaron- en años recientes la población de un municipio vecino montó sus propios laboratorios.
Los mapas de la Unidad de Inteligencia Financiera del gobierno de México, y especialistas en seguridad, ubican la región de los Altos de Chiapas con una prevalencia del Cartel de Sinaloa, aunque también reconoce la existencia de una organización local importante.
Pobladores de la zona norte de San Cristóbal explicaron que estas condiciones y la falta de oportunidades para acceder a trabajos legales bien remunerados, hizo que creciera la participación de algunos de sus habitantes en otros negocios ilícitos relacionados con las dinámicas globales, como el tráfico de personas y armas que pasa por esta región de la frontera sur de México; actividades para las que se organizan de manera autónoma en subgrupos que a veces rivalizan entre sí.
“El avance de los cárteles que se da en general en el país y la disputa entre ellos, también no ha pegado en varias regiones de Chiapas, en la zona norte de San Cristóbal algunos grupos empezaron a querer irse con el cártel contrario y es lo que ha provocado las disputas armadas recientes”, explicaron.
Aclararon que la población en general de esta zona norte de San Cristóbal de Las Casas no participa en ninguna actividad ilícita, “pero quedamos atrapados en estas dinámicas de violencia, porque todos somos vecinos”.
Militares y policías se instalan en la zona
En las calles de la zona norte de San Cristóbal la vida también amaneció con paso lento, un día después del asesinado Gerónimo Ruiz, líder de la Asociación de Locatarios de Mercados Tradicionales de Chiapas (Almetrach).
En la jornada previa, durante más de 8 horas sus seguidores recorrieron la zona norte disparando con armas de grueso calibre, quemaron al menos cuatro viviendas y asesinaron a dos personas. Por la noche, cuando ya se habían replegado, incursionaron a este lugar decenas de policías y militares.
En la calle que lleva a la colonia El Pinar, una cresta empinada donde crecen pinos que le dan el nombre al lugar, hay en una esquina restos de sangre, ahí murieron los dos jóvenes cuyos cuerpos quedaron tirados varias horas.
En las ventanas de una casa y en las cortinas de metal de una tienda de esa esquina aún se pueden ver los orificios que dejaron los disparos. Una cuadra adelante seguía tirado en el piso un casquillo de bala calibre 5.56 que, por sus características, fue disparada por un rifle AR-15.
Ahí fue el principal campo de confrontación, por lo que tres patrullas de policías estatales, dos de militares y un vehículo de la Guardian Nacional permanecieron apostados en ese lugar desde la noche del lunes en que entraron.
Alrededor de las 4 de la tarde algunos jóvenes empiezan a transitar por estas calles. También a pasar por esa avenida personas en coches, motos y en camionetas de transporte colectivo que llevan hasta el mercado. Cuadras adelante abrieron sus puertas algunas verdulerías, tiendas refacciones de autos, de ropa de segunda mano.
A esa hora había pocas mujeres hay en la calle, quienes transitaban eran ante todo jóvenes a bordo de motocicletas y unos cuantos, caminando, quienes observaban a los uniformados y a periodistas que llegan al lugar. “Algunos vienen a halconear”, dijo un trabajador del área de comunicación del ayuntamiento.
“Esperamos que ya el miércoles todo vuelva a la normalidad, aquí yo he venido hasta en las noches y es un lugar tranquilo, solo que a veces la gente dispara al aire, pero en general es seguro”, insistió el trabajador.
en un comunicado, la Secretaría de Seguridad Publica de Chiapas dijo que “elementos del Grupo Interinstitucional continúan realizando acciones para mantener la seguridad y el orden público en el municipio de San Cristóbal de Las Casas, a través de patrullajes aéreos y presencia policial con las diferentes instituciones de seguridad federal, estatal y municipal”.
También el alcalde de San Cristóbal, Mariano Díaz Ochoa, dijo en entrevista que la ciudad estaba recuperando la normalidad.
Seguros de vida de turistas no cubren Chiapas
Esta imagen de “normalidad” no es compartida por los prestadores de servicios turísticos. Alba María Guadalupe Moguel, presidenta de la Asociación de Hoteles de San Cristóbal, explicó que los hechos de violencia como los del pasado lunes no son hechos aislados, sino que se han venido gestado desde hace años.
“Ha venido creciendo como una bola de nieve porque nuestras autoridades, desde hace años, se han cruzado de brazos, no es de ahorita, lo que sí es de ahorita es la política de ´abrazos, no balazos´” que, a su ver, fomenta el aumento de los grupos del crimen organizado.
Guadalupe Moguel dijo que el resultado ha sido la cancelación de las reservaciones que los turistas hacen, en el caso de Chiapas, hasta con un año de antelación; sobre todo cuando, como en el caso de Estados Unidos, los países hacen advertencia a sus connacionales de que en estas ciudades hay violencia.
Detalló que otra medida que han tomado en las naciones de donde son originarios los turistas, es no hacer válidos sus seguros de vida mientras estén en Chiapas. “Si usted viene, su seguro de viajero, mientras pase por Chiapas no lo cubre. Eso es grave porque, mientras hacen el recorrido por México, les cubre el seguro, pero en el en los días que esté durante en Chiapas ya no”.
La empresaria hotelera cuestionó la postura de las autoridades. “Nuestro gobernador insiste en que vivimos en un estado seguro, pero la verdad es que ni él se la creé, y no se vale esa ese afán por burlarse de nuestra sociedad, porque yo eso lo veo como una burla; insistir en que no pasa nada cuando pasa todo, y no solo en nuestro estado en todo el país”, reiteró.
Por su parte, Eduardo Villatoro, presidente de la Cámara de Comercio Servicios y Turismo de San Cristóbal de las Casas, explicó que el sector comercial está teniendo grandes pérdidas porque muchas de sus ventas dependen de la actividad turística.
Pero más aún, cuestionó que la política de seguridad esté basada en el despliegue policiaco y militar, y no en el desarrollo de los habitantes de la ciudad. “Lo que sí queremos es tener un lugar donde se esté atendiendo a toda una población, al turismo, pero también a la población local, a quienes viven acá, a quienes viven en la colonias y los barrios”.
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