Denuncian poca claridad en el actuar del INM para las personas en movilidad
* Alertan sobre la violencia y posible represión ante las condiciones de desprotección que enfrentan las personas migrantes y refugiadas en Tapachula.
* Les repartieron unas fichas con números del 1 al 1,100, se llevaron sus pasaportes y les dijeron que les harán llegar información sobre qué día serán los traslados. Luego les dieron la indicación de estar atentos a las redes sociales del INM.
*El Colectivo hizo un llamado urgente a la Secretaría de Gobernación, INM, y GN al respecto a la integridad física y emocional de todas las personas; a la COMAR e INM a brindar una respuesta eficaz a las personas; y a la COMAR a reanudar las actividades de forma inmediata.
Por Redacción Alma Martínez
Entre 3,000 y 4,000 migrantes se dieron cita este 22 de noviembre en las instalaciones del Estadio Olímpico de Tapachula por un llamado discrecional del Instituto Nacional de Migración (INM) para trasladar sus trámites de regularización y refugio a otros estados del país. Sin embargo, el traslado no se resolvió y están exigiendo claridad y celeridad en sus procesos.
El Colectivo de Observación y Monitoreo de Derechos Humanos en el Sureste Mexicano (COMDHSEM), a través de un comunicado denunció que la información disponible sobre estos procedimientos es poco clara y confusa. Las personas no saben quiénes aplican a estos procesos, cuándo les trasladarán, ni a dónde. Como consecuencia se ha generado un clima de incertidumbre, confusión y tensión.
La desinformación sobre los traslados de los trámites a otros estados provocó que las personas decidieran desocupar sus espacios de alojamiento, quedando sin vivienda. Cientos de personas, en su mayoría haitianas y afrodescendientes, pasaron la noche en situación de calle, en los alrededores del estadio, bajo amenaza de ser desalojadas por la Guardia Nacional (GN).
Indicó que este 23 de noviembre, no llegó el personal del INM al estadio olímpico, por lo que ante la falta de respuestas e información clara, cerca de tres mil personas se manifestaron en la carretera Tapachula-Puerto Madero a la altura del estadio exigiendo claridad y celeridad en sus procesos. Además, la Comisión Mexicana de Ayuda a Refugiados (COMAR) anunció que suspendió sus operaciones en dicha instalación.
Aproximadamente 700 personas, entre ellas un porcentaje importante de niñas y niños menores de seis años, continúan esperando, improvisando espacios para dormir y descansar, sin agua potable y alimentos. Otros grupos de personas se han ido retirando hacia espacios públicos de la ciudad.
Es importante destacar que la semana pasada la Agencia de las Naciones Unidas para los Refugiados (ACNUR) suspendió la atención en el Centro de Atención a Refugiados. El cierre de espacios de atención humanitaria exacerba las condiciones precarias de vida en la que se encuentran las personas en espera de la resolución de sus procesos de asilo y regularización migratoria.
Asimismo, urgió al ACNUR para reanudar la ayuda humanitaria; a la Organización Internacional para las Migraciones (OIM), al Fondo de las Naciones Unidas para la Infancia (UNICEF) y a Protección Civil a brindar la atención correspondiente; y a la Comisión Nacional de Derechos Humanos (CDNH) a observar el respeto a los derechos humanos de la población migrante y refugiada, así como de las y los defensores.
Por último, señalaron que la información deber ser clara, eficaz y veraz por parte de las instancias gubernamentales a las personas sujetas de protección internacional y organizaciones de la sociedad civil que las acompañan. Continuaran en su labor de monitoreo y documentación de las violaciones a derechos humanos que puedan ocurrir en la zona.
Sin comentarios aún.