Lucharemos con fuerza, expresan ante disposición de Canadá en atender el caso de Mariano Abarca

Familia de Mariano Abarca frente a la Corte de Justicia de Canadá.

*La familia de Mariano Abarca con apoyo de organizaciones mexicanas y canadienses, busca una investigación en la Embajada de Canadá en México. Creen que, el cabildeo incondicional de la representación diplomática en apoyo a una empresa minera canadiense puso la vida del defensor ambiental en mayor peligro, previo a su asesinato.

La organización MiningWacht Canadá realizó el conversatorio “¿Qué nos enseña el asesinato del activista Mariano Abarca en México sobre la rendición de cuentas en Canadá?”, en el que discutieron la práctica canadiense con relación a las embajadas en el extranjero y conflictos de operaciones mineras, cuestionando si el caso del defensor ambiental es un patrón o excepción.

José Luis Abarca Montejo, hijo de Abarca, abogado, director de la Fundación Ambiental Mariano Abarca y líder del capítulo de Chiapas de la Red Mexicana de Afectados por la Minería (REMA) dio a conocer que, llevaron una denuncia a Canadá para exigir una investigación sobre la embajada canadiense en México.

Compartió que su papá fue fundador de la REMA y un líder comunitario importante, en especial cuando una mina de Barita que pertenecía a una empresa canadiense empezó a generar daños sociales y ambientales en el ejido Grecia en el municipio Chicomuselo.

Abarca Montejo indicó que, la empresa BlackFire operaba en su municipio desde finales de 2007 hasta el termino de 2009. La mina fue clausurada por violaciones ambientales, y pocos días después del asesinato de su papá, no lo ha vuelto a hacer.

En junio de 2009, mencionó que el defensor junto a un grupo de la comunidad y con el apoyo de Otros Mundos A. C., viajó a la Ciudad de México para participar en una manifestación frente a la embajada canadiense.

Abarca habló en ese entonces con una representante de dicha embajada sobre las promesas de trabajo incumplidas de la empresa, los daños que los camiones generaban a las casas y calles, y sobre todo la contaminación de los ríos que nacen en la Sierra Madre de Chiapas.

Al mismo tiempo, dialogó sobre un grupo de trabajadores de la empresa que estaban armados provocando intimidación. Tres semanas después de regresar a Chicomuselo, fue detenido por la policía en respuesta a una queja interpuesta por la empresa minera, quien hizo acusaciones falsas en contra de él, entre ellas: que se involucraba en el crimen organizado y, dañaba y amenazaba a la empresa.

Por ello, Otros Mundos y la REMA alertaron al mundo para que enviaran sus preocupaciones a la Embajada de Canadá, después de 8 días fue liberado, sin juicio por la falta de evidencia, pero aún estaba bajo riesgo.

Tres meses después, el 27 de noviembre de 2009, un hombre disparó y mató a mi papá cuando se encontraba sentado fuera de su restaurante. Todas las personas que tuvieron algún vinculo con el crimen estaban conectados con la empresa minera, hasta hoy no hemos logrado una investigación sería, por eso hemos llevado una denuncia en contra de las autoridades mexicanas ante la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH), expuso el hijo del defensor.

En dicha denuncia, exigen junto a United Steelworkers, MiningWatch Canada y Common Frontiers una investigación sobre la embajada canadiense en México. Con documentos obtenidos bajo una solicitud de Acceso a la Información, se muestra como la Embajada presionó a los funcionarios mexicanos.

Lo anterior, con el fin de que estos ayudaran a la empresa a obtener un permiso que era esencial para el funcionamiento la mina y se reunió con funcionarios del gobierno en Chiapas, con el fin de proteger los intereses de la empresa, cuando los residentes locales se enojaron con los impactos ambientales y sociales del proyecto.

Una vez operando, la documentación muestra que la Embajada hizo un seguimiento de cerca de los medios de comunicación en Chiapas, sobre las protestas constantes y del profundo descontento de la gente, esto debió haber sido una señal de alarma para la Embajada. Sin embargo, en sus documentos y un miembro de la Embajada los desestimo diciendo que, estaban tratando de chantajear a la empresa para obtener más dinero, añadió Abarca Montejo.

Investigación de la embajada de Canadá en México. Cortesía: JCAP

Sobre la base de estos hallazgos, el 5 de febrero de 2018, la Familia Abarca y sus simpatizantes presentaron una denuncia ante el Comisionado de Integridad del Sector Público de Canadá (PSIC) en Ottawa, pidieron una investigación sobre los actos y omisiones de la Embajada de Canadá en México, creen que contribuyeron para poner en peligro la vida de Mariano Abarca.

Mi papá no va a regresar, pero pensamos que este proceso puede ser un precedente importante para la lucha de otras comunidades, quienes corren peligro por estar luchando para proteger su medio ambiente y salud, frente a los daños mineros, concluyó el abogado.

Por su parte, Miguel Mijangos, representante de la REMA en Guerrero, participó en febrero de 2018, con la delegación a Ottawa para presentar al PSIC, la denuncia original en el caso BlackFire. Dicha organización sigue siendo cliente junto a la familia Abarca, en la revisión judicial ante la Corte Federal de Apelaciones.

Empresas canadienses poseen concesiones mineras en Chiapas. Foto: Cortesía

Mijangos acentuó que, Canadá es preponderante en la extracción de metales preciosos en México, pues todas las minas de oro, plata y platino que hay en el país, un 80% es operado por el capital canadiense.

Es decir, si tiene una influencia muy grande en el extractivismo y obviamente de ese tamaño es la problemática que tenemos. Hay una operación permanente del gobierno canadiense tanto a nivel estructural, vale la pena decir que aún apenas había ganado el actual presidente, aún no asumía el cargo y ya la Embajada de Canadá había visitado sus oficinas parciales, para empezar una serie de procedimientos, mencionó el representante de la REMA en Guerrero.

Ante dicho contexto, resaltó que el asesinato de Mariano, tiene un patrón de conducta narrado y descrito por las vivencias que tienen y por grupos que los ayudan a sistematizar las diferentes formas de actuación del gobierno canadiense, las minas y la violencia que se desencadena contra las resistencias.

Lo anterior, generó una serie de estrategias desde las resistencias para llamar la atención, detener la agresión, y hacer del conocimiento público que la minería canadiense, la responsabilidad social y la protección del desarrollo del progreso son mentiras. En consecuencia, son verdades la destrucción del medio ambiente, contaminación, asesinato e intimidación.

Hay un creciente número de casos de criminalización y atentados a la vida perpetrados contra defensores y defensoras del territorio. Foto: Cortesía

Mijangos compartió que, en la toma de la Embajada, el defensor ambiental tomó el micrófono, pocos meses después lo asesinaron. Posterior a ello, al regresar al lugar, Bety Cariño, coordinadora de la REMA en Oaxaca hizo lo mismo, luego de algunos meses la asesinan.

Así tenemos un patrón de conducta que ha estado vinculado no solo por la omisión, hay un desprecio de los políticos a través de la operación desde la diplomacia en el gobierno canadiense que, constantemente esta operando en nuestro territorio, expuso Mijangos.

Destacó que, por fin van a poder participar en una litigada en Canadá, con el caso de Mariano. Sin embargo, no le sorprende que eligieran el mismo día de este evento, por la gran difusión y un poco de la política que le gusta mucho al país de “lavar las heridas”.

Por último, dijo que mandaron una nota positiva para expresar que, “el gobierno canadiense esta dispuesto a atender el caso”. A su vez, les ha enseñado a luchar con fuerza de la mentira, esa con la que, los manejan y manipulan todo el tiempo.

¿Quién es Mariano Abarca?

Mariano Abarca pugnaba porque la industria minera no dañara el medio ambiente en su natal Chicomuselo. Foto: Archivo Familia Abarca

Abarca Roblero, un albañil sencillo y modesto, valiente, con una gran consciencia social y ambiental, esposo y padre de cuatro hijos, nació el 20 de noviembre de 1958, en el municipio de Chicomuselo, en la cabecera que lleva el mismo nombre.

A partir de la llegada de la empresa minera canadiense BlackFire en 2007, para extraer el mineral de Barita, empezó su resistencia colectiva y organizada con un grupo de mujeres, al ver las afectaciones socioambientales de su pueblo.

Por su lucha fue amenazado, intimidado, golpeado e intentaron corromperlo, sin embargo, no cedió. Bajo acusaciones falsas y en acuerdo con el gobierno local, la empresa canadiense logró encarcelarlo de manera ilegal.

Chicomuselo, el botín de las empresas mineras. Foto. Chiapas Paralelo

Sin embargo, gracias a la presión y solidaridad nacional e internacional, pero sobre todo a su integridad y determinación, logró salir una semana después, un 28 de agosto de 2009.

Como representante de la REMA en Chicomuselo, coordinó el encuentro estatal de esta contra el Modelo Extractivo en su pueblo natal. No contentos los intereses mineros, el 27 de noviembre de 2009, fue asesinado por la espalda a manos de empleados de la misma empresa.