Exigen investigar actos de tortura contra migrantes ocurridos en la estaciones de la región metropolitana
*El Colectivo de Observación y Monitoreo de Derechos Humanos en el Sureste Mexicano reportó el hacinamiento en que se encuentran las Estaciones Migratorias ubicadas en Tuxtla Gutiérrez y Chiapa de Corzo. Además, la detención de bebés, niñas, niños y adolescentes, pese a que el Instituto Nacional de Migración (INAMI) tiene prohibido mantenerlas en dichas estaciones.
*Exigieron a la Comisión Nacional de los Derechos Humanos (CNDH) y a la Fiscalía General de la República (FGR) investigar los actos de tortura aplicados por el Instituto Nacional de Migración (INM) en las instalaciones migratorias de Tuxtla Gutiérrez.
Por Redacción Alma Martínez
El Colectivo de Observación y Monitoreo de Derechos Humanos en el Sureste Mexicano (COMDHSM), fue testigo del hacinamiento en que se encuentran las Estaciones Migratorias Cupapé 1 en Tuxtla Gutiérrez y Cupapé 2 (La Mosca) en Chiapa de Corzo; en este último se calculan cerca de 400 personas privadas de la libertad.
Mediante un comunicado, las organizaciones que integran el COMDHSM, señalaron que en ambos lugares no se implementan protocolos de bioseguridad ante la pandemia de COVID-19, incrementando de forma grave las probabilidades de contagio. Además, La Mosca es una bodega abandonada que no cuenta con las condiciones mínimas para garantizar el bienestar de las personas migrantes, por el contrario, las expone a sufrir diversas formas de violencia, tortura y abusos de autoridades públicas y privadas.
Expusieron, en la Estación Migratoria Cupapé 1 no hay una cifra consolidada de personas detenidas, sin embargo, documentaron la presencia de por lo menos 80 mujeres detenidas, entre ellas mujeres embarazadas que fueron violentadas (malos tratos e inhumanos) por personal público y privado dentro de las instalaciones.
Asimismo, observaron más de 15 niñas, niños y adolescentes (NNA) en detención, incluyendo bebés de solo cuatro meses en contravención a las normas vigentes de NNA migrantes que tajantemente prohíben la detención migratoria y estancia en Estaciones Migratorias y Provisionales del Instituto Nacional para La Atención a Menores Infractores (INAMI).
La situación de hacinamiento es tal que recibieron testimonios de mujeres durmiendo de pie o en los baños de las celdas y algunas junto con sus hijas e hijos han pasado la noche y día en el patio al aire libre bajo la lluvia.
La situación de detención masiva y arbitraria en Tuxtla Gutiérrez contra las personas migrantes en su mayoría haitianas que llevan procedimientos de solicitud de protección internacional y regularización migratoria es resultado de la expansión de la estrategia militar de contención que se ha desplegado en la costa pacífica de Chiapas a los desplazamientos colectivos de migrantes que han querido salir de la ciudad cárcel (Tapachula), expresaron en el comunicado.
El Colectivo indicó que en el corredor central migratorio en Chiapas (Frontera Comalapa, Comitán, San Cristóbal de las Casas, Tuxtla Gutiérrez y Chiapa de Corzo), los operativos de detención entre el INM y la Guardia Nacional (GN) se concentran en los alrededores de la ciudad de Tuxtla y en las carreteras entre los municipios fronterizos de Motozintla, Frontera Comalapa y Chicomuselo.
Recordaron que recientemente se denunció que policías municipales en esta región están deteniendo en separos preventivos (cárceles) a personas migrantes incluyendo familias con niñas, niños y adolescentes para luego entregarlas al INAMI, acción completamente ilegal, pues las fuerzas de seguridad no tienen funciones de control migratorio.
En semanas anteriores recabaron testimonios de personas y familias con niñas y niños pequeños que fueron detenidas durante los desplazamientos colectivos en el corredor de la costa pacífica. Testificando que tras la detención violenta fueron trasladadas y abandonadas en la madrugada en el punto fronterizo denominado La Mesilla y en Tenosique, Tabasco.
Siendo que el mencionado primer punto fronterizo, es territorio reconocido por la presencia de grupos del crimen organizado y tráfico de personas. A las personas migrantes no se les dio información alguna dejándolas en pleno desamparo y sin orientación de donde se encontraban y sin posibilidades de cubrir necesidades básicas.
Por lo anterior, exigieron la liberación inmediata de personas solicitantes de refugio y con procedimientos de regularización migratoria; alto inmediato a la violencia y represión contra personas migrantes; y agilizar y respetar los procesos de atención y seguimiento a las solicitudes de refugio.
Reclamaron soluciones integrales y respetuosas de los derechos humanos para las personas migrantes, permitir y garantizar la movilidad de solicitantes de protección internacional a espacios con acceso a empleo, alimentación y vivienda y castigar los actos corruptos que limitan el acceso a la protección internacional.
También demandaron que la CNDH y la FGR investiguen las detenciones ilegales de personas en movilidad por parte de la policía municipal en los municipios fronterizos; y la Liberación inmediata de niñas, niños y adolescentes migrantes y sus familias que se encuentran privadas de la libertad de forma ilegal en Estaciones Migratorias y Estancias Provisionales del INAMI.
Finalmente, pidieron seguridad plena a defensoras y periodistas que documentan y denuncian las violaciones de derechos humanos de las personas migrantes.
El Colectivo de Observación y Monitoreo de Derechos Humanos en el Sureste está integrado por organismos de México, Estados Unidos y Centroamérica como el American Friends Service Committee (AFSC) – Oficina para América Latina y el Caribe, Apostólicas del Corazón de Jesús, Programa de Asuntos Migratorios – Universidad Iberoamericana (UIA), Centro de Derechos Humanos Digna Ochoa, Centro de Derechos Humanos Fray Matías de Córdova A, C., y muchos más.
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