Publican 15 microcrónicas del Covid-19 en Tuxtla Gutiérrez
*Los primeros casos humanos de coronavirus (SARS-CoV-2), síndrome respiratorio agudo grave, tuvieron lugar en Wuhan, ciudad de China, en los primeros días de diciembre del 2019.
José Luis Castro Aguilar, cronista chiapaneco a través de un cuadernillo de microcrónicas compartió como fue el avance de la pandemia en la capital de Chiapas, el 23 de abril de 2020, la ciudad de Tuxtla Gutiérrez se encontraba hundida en silencio, ya que, no había vida diurna ni nocturna.
El cronista acentuó que, en particular los barrios, colonias y zonas residenciales, no se escuchaba ruido de vehículos y motocicletas que circulan de manera diaria, en tiempo normal solían registrarse más de 218 mil en circulación.
Castro Aguilar puntualizó que, el tráfico vial es de un 60%, en ese entonces circulaban en la ciudad capital el 50% de taxis, además, la ciudad tiene más de 700 mil habitantes, de los cuales 26 mil 498 son indígenas, el total se encuentran distribuidos en más de 125 mil viviendas y 743 asentamientos, entre barrios, colonias, fraccionamientos y zonas residenciales.
Añadió que, los tuxtlecos comentaban sobre la falta de un paquete de ayuda económica para los vendedores ambulantes, un subsidio para las personas desempleadas y la distribución de despensas para la población más pobre, anciana y enferma que se hallan en los cinturones de la ciudad capital.
El cronista expuso que, hasta ese entonces, nadie había recibido nada, nadie les ha llevado alguna despensa, ayuda económica o mensaje de esperanza.
La crisis sanitaria y económica se pone cada día más difícil entre la población que se encuentra en cuarentena (60%), particularmente de la desempleada: crisis económica y crisis familiar, aumento de conflictos entre parejas, aburrimiento de los niños y fastidio de los abuelos engentados; vaya, hasta los perros y gatos se ven aburridos o fastidiados, expone el cronista en su microcrónica.
Castro Aguilar visibilizó que, la vida de las personas que salían de sus casas a buscar el sustento diario de su familia, por ejemplo: empleados de mostrador, vendedores ambulantes, trabajadoras domésticas, meseros, albañiles, peones, meseros, neveros, fontaneros, afiladores, paleteros, limpiaparabrisas, pepenadores, limosneros, resultó ser más difícil, pesada y peligrosa.
Para ese mes, Tuxtla Gutiérrez tenía tan solo 29 casos positivos de los 85 que había en Chiapas, ante ello, el cronista mencionó que urgieron cortar las cadenas de contagios mediante la disminución de la movilidad social.
No hay manera efectiva de hacerlo en tanto no se tengan asegurados las tres comidas diarias en cada uno de los hogares. Algunos padres de familia comentan que se están quedando solos, ¡Solos en las manos de Dios!, expuso el cronista.
Dicha microcrónica expuesta forma parte del cuadernillo: «El Coronavirus en Tuxtla Gutiérrez. 15 minicronicas y un cuento», en su edición digital, bajo la autoría de Castro Aguilar, en cada una de ellas relata la llegada del coronavirus hasta la capital chiapaneca.
Aunado a ello, el primer caso de coronavirus, como el confinamiento y el distanciamiento social, que desarrolló la crisis económica y social, ya que, muchos negocios se vieron forzados a cerrar.
Incluso hay una microcrónica dedicada a su madre quien, al fallecer, la familia enfrenta un sepulcral diferente a lo que se acostumbra, además, al final el autor comparte un cuento titulado “Combate al coronavirus”.
Sin comentarios aún.