Ciclo escolar lejano a la realidad de estudiantes indígenas y rurales
Con el inicio de la pandemia, se cerraron escuelas y se adaptaron modalidades de trabajo, para estudiar desde casa, sin embargo, en las comunidades indígenas la educación en línea o por medio de la televisión no es una opción que se adecue a las necesidades de los niños y las niñas de escuelas rurales, en donde la población no cuenta con acceso a internet y las clases transmitidas por la televisión no son comprendidas por las y los alumnos.
En la comunidad indígena Monte de los Olivos, perteneciente al municipio de Venustiano Carranza, se ubica la Escuela Primaria Federal Bilingüe «Mariano Escobedo», en donde toman clases cerca de 50 niños y niñas de primero a sexto grado, dentro del aula multigrado. Bartolomé Vázquez, quien es el docente a cargo de la escuela, señaló que la pandemia representa un atraso educativo en todos los niveles pero en especial, a los niños y niñas de escuelas rurales, en donde el uso de la tecnología es un recurso al que la mayoría no puede acceder, por factores como la lejanía de sus comunidades y la situación económica con la que se vive en los pueblos indígenas.
El maestro Bartolomé, protagonista del documental “El sembrador”, mencionó que en las comunidades indígenas la educación no es una prioridad para los padres de familia.
La pandemia, es un retraso para los niños de las comunidades, aquí no hay internet, tampoco tienen celulares ni computadoras, como los tienen los niños en la ciudad, por ello si no hay clases en las aulas, los niños simplemente no aprenden, expresó el profesor Bartolomé Vázquez.
Pese a las indicaciones por parte de autoridades de mantener las aulas cerradas, en las comunidades los docentes, padres y madres de familia han llegado a acuerdos para que los docentes acuden una o dos veces por semana para revisar tareas y asignar nuevas actividades.
Según el Maestro Bartolomé, los docentes reciben indicaciones por parte de supervisores para que valoren la situación de sus comunidades y con base a ello determinen su forma de trabajar ante la pandemia, por ello todas las actividades son acordadas con el consentimiento de las autoridades de las comunidades.
En las juntas los supervisores nos indican que debemos valorar la situación, para acudir a trabajar ya queda a criterio si hacemos acuerdos entre los padres de familia, para determinar cómo vamos a trabajar y avanzar con la educación de las niñas y los niños, Dijo el profesor Bartolomé
Ante las indicaciones sobre valorar el estado en el que se encuentran las comunidades rurales y así desarrollar un plan de trabajo para esta contingencia, existen docentes que se han reservado a acudir a sus comunidades para poder trabajar, ya que se escudan con las indicaciones que reciben a nivel federal para no regresar a las aulas, señaló Bartolomé Vázquez.
Foto: Daladiel Jiménez
Al inicio del ciclo escolar, en medios de comunicación como radio, internet y televisión se dieron indicaciones para que niños, niñas y jóvenes sintonizaran canales de televisión para seguir contenidos escolares y de esa forma iniciar el ciclo escolar. De acuerdo al Maestro Vázquez, esta modalidad de aprendizaje, dejó de lado a los y las niñas de educación rural, debido a que los niños y las niñas bilingües, tienen un proceso de aprendizaje diferente a los demás, ya que los tiempos en los que procesan la información son distintos a los de otros niños y por lo tanto ver y escuchar los contenidos a una velocidad mayor a la que están acostumbrados dificulta el proceso de aprendizaje.
La intención de las autoridades fue buena al transmitir contenidos por televisión, una tele es un aparato que tiene mayor presencia en los hogares a diferencia del internet, lo malo es que los contenidos no estaban adecuados a la forma de aprendizaje de los niños y niñas de las comunidades rurales, Comentó el Profesor Bartolomé.
El maestro Bartolomé, quien tiene más de 25 años de experiencia en educación bilingüe, acude a su escuela dos veces por semana jueves y viernes, para impartir clases y apoyar a sus alumnos con las dudas que tengan sobre las actividades que realizan en casa.
Por ello, el hecho de la suspensión de clases presenciales preocupa muy poco a las poblaciones indígenas, señaló, que si bien existen comunidades que han exigido la apertura de las escuelas, la razón se debe a las autoridades que integran las asambleas de los pueblos, les molesta saber que los maestros continúan con su pago quincenal sin asistir a las aulas de forma normal.
Niños y niñas reciben talleres de panadería.
Foto: Daladiel Jiménez
Docente rural, una figura de la humanidad y guardián de los pueblos indígenas; Melissa Elizondo
Imágen de los niños y niñas de la Escuela «Mariano Escobedo» n Venustiano Carranza
Melissa Elizondo, se graduó del Centro Universitario de Estudios Cinematográficos de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM), con “El Sembrador”, un documental que retrata la labor de un maestro rural, llamado Bartolomé Vásquez López, que guía por el conocimiento a una escuela multigrado “Mariano Escobedo” ubicada en la comunidad Monte de los Olivos, municipio de Venustiano Carranza.
A raíz de la Reforma Educativa propuesta por Enrique Peña Nieto, se desataron cientos de movilizaciones en Chiapas, Oaxaca, Guerrero y Michoacán; estados con la característica común de concentrar la mayoría de las escuelas rurales del país. En este contexto, Elizondo conoce al docente Bartolomé.
En un trabajo de 5 años, Elizondo produjo a “El Sembrador” en 2018, su puesta en escena produjo una gran aceptación en el Festival Internacional de Cine de Morelia (FICM); además, el filme recibió el premio Guerrero de la Prensa Documental y Premio a Documental Realizado por una Mujer y Premio del Público a Largometraje Documental Mexicano en el FICM.
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