Alicia Gallegos, persona de la tercera edad de Tuxtla Gutiérrez pide apoyo para la donación de una silla de rueda, al no poder caminar

Alicia Gallegos Juárez, pide a la ciudadanía que la apoyen con una silla de ruedas. Cortesía: Martín Utrilla.

*Según la Organización Mundial de la Salud (OMS), con frecuencia se da por supuesto que las personas mayores son frágiles o dependientes y una carga para la sociedad. La salud pública y la sociedad en general, debe abordar estas y otras actitudes contra la tercera edad, que pueden dar lugar a discriminación y afectar a la formulación de las políticas y las oportunidades de las personas mayores de disfrutar de un envejecimiento saludable.


Según estadísticas del Instituto Nacional de Personas Adultas Mayores (INAPAM), en México, habitan un total de 10 millones 055 mil 379 adultos mayores de 60 años y más. Si bien se ha aumentado la esperanza de vida de las y los mexicanos, el envejecimiento poblacional se ha ido convirtiendo en un reto importante para las sociedades modernas, pues las obliga a actualizar sus programas de intervención para evitar que las secuelas de los procesos degenerativos propios de la edad se conviertan en un problema de salud pública.

Asimismo, en Chiapas, en el año 2000 había 211 mil 566 ancianos, según la Encuesta de Población y Vivienda del 2005 del Instituto de Estadística y Geografía (INEGI), cifra que en 2015 se elevó a 345 mil 461 con base en los registros de la Secretaría de Desarrollo Social (SEDESOL), lo que corresponde al 23.5 % de la población total del Estado, siendo Tuxtla Gutiérrez un municipio con el 7.2% del total de la población de la tercera edad.

Alicia Gallegos Juárez, es una persona mayor, vive en la Colonia La Reliquia, ubicado en la capital chiapaneca, la diagnosticaron con osteoporosis. A raíz de una caída, no puede caminar, por lo que, solicita a la ciudadanía que la apoyen con la donación de una silla de ruedas.

Además, los médicos le dijeron que necesita una operación, sin embargo, se la realizaran hasta que la pandemia provocada por Covid-19 finalice. Aunque Gallegos Juárez añade que, tiene miedo y preocupación, primero por la condición económica en la que se encuentra, al ser de bajos recursos; la segunda es que, no hay quien la cuide, pues vive con sus nietas.

“Quien me va a cuidar, me dicen los doctores que yo no me mueva, que solo ande encamada, pero quien me va a cuidar, si llega el día que van a ir a clases mis nietas, me van a dejar solita tirada acá”, expuso Gallegos.

A su vez, añaden que, recurrieron al Sistema para el Desarrollo Integral de la Familia (DIF) Municipal, sin embargo no pudieron obtener el apoyo.

Cabe mencionar que, la osteoporosis (OSP) es una enfermedad progresiva del esqueleto, caracterizada por la disminución de la resistencia ósea que facilita el desarrollo de fracturas. Es el segundo problema sanitario asistencial en el mundo después de las enfermedades cardiovasculares, según la Organización Mundial de la Salud, su prevalencia va en aumento dado el progresivo envejecimiento de la población.

Durante el envejecimiento continúa la pérdida de masa ósea, tanto a nivel de la columna vertebral como de la cadera, que se ha iniciado en la posmenopausia en las mujeres y alrededor de los 60 años en los varones. En la senectud es además cuando se producen la gran mayoría de las fracturas por fragilidad ósea, cuya incidencia aumenta en los mayores de 75 años.

Sin comentarios aún.

Deja una respuesta

Este sitio usa Akismet para reducir el spam. Aprende cómo se procesan los datos de tus comentarios.

Comparta su opinión. Su correo no será público y será protegido deacuerdo a nuestras políticas de privacidad.