Avanza rechazo a megaproyectos en la Sierra de Puebla
Los opositores del gasoducto Tuxpan-Tula y del proyecto hidroeléctrico Puebla 1, en los municipios de Pahuatlán y Ahuacatlán, respectivamente, han tenido buenas noticias, el primero ya no pasará por Pahuatlán y una asamblea ciudadana apoyada por el alcalde revocó los permisos para la hidroeléctrica.
Aranzazú Ayala Martínez
Gasoducto Tuxpan–Tula
El 4 de enero el presidente Andrés Manuel López Obrador visitó el municipio de Pahuatlán, donde prometió públicamente que el gasoducto Tuxpan–Tula no atravesará el municipio. Sin embargo, pese a las declaraciones solo es un compromiso de palabra, pues ninguna de las dependencias federales involucradas ha confirmado que haya una fecha o acción concreta para mover el trazo.
A la fecha no hay confirmación oficial para cambiar el trazo. Dentro de las dependencias de gobierno, la Comisión Federal de Electricidad (CFE), encargada de operar el tema del gasoducto, canalizó a LADO B directamente con la presidencia de la República, que según será la única oficina que dará información oficial del tema.
Por su parte, presidencia dijo que la responsable era la Secretaría de Energía (SENER), cuya responsable de comunicación social dijo que hasta el 13 de agosto no había una fecha y la compañía y la CFE tendrían que reunirse para hacer un plan de trabajo.
El presidente anunció que el gasoducto será desviado y no pasará por Pahuatlán, principalmente por la zona sagrada otomí de la junta auxiliar de San Pablito, del mismo municipio.
“Nosotros estamos revisando estos casos [de contratos irregulares]; aquí en San Pablito y Pahuatlán, aunque tengamos que pagar, no va a pasar el gasoducto por los cerros sagrados. Y no vamos a aceptar esas condiciones. Vamos a proponerle [a la empresa] otros trazos que no afecten las zonas sagradas. Pero les digo a ustedes no va a pasar por este cerro el gasoducto”, dijo el presidente durante su intervención en el evento oficial.
Izel Victoriano, habitante otomí de San Pablito y defensor del territorio, dijo en entrevista para LADO B que los pobladores celebran la decisión y que es el resultado de tres años de lucha y resistencia. Si bien están a la espera de la reunión con la CFE, Izel dijo que hay confianza en lo que declaró López Obrador.
Proyecto hidroeléctrico Puebla 1
El domingo 12 de enero habitantes de Ahuacatlán, en la zona nahua-totonaca de la Sierra Norte del estado hicieron una marcha y una asamblea para visibilizar tanto el rechazo al proyecto de la hidroeléctrica Puebla 1, como la unión de las comunidades. Al término de esta el ayuntamiento hizo pública un acta de Cabildo de junio de 2019 donde revoca los permisos para la construcción de la hidroeléctrica, planeada para ejecutarse en el río Ajajalpan.
El proyecto hidroeléctrico Puebla 1, a cargo de la empresa Deselec–Comexhidro, lleva años en una lucha legal entre habitantes de Ahuacatlán y San Felipe Tepatlán, acompañados por el Consejo Tiyat Tlali, el Instituto Mexicano para el Desarrollo Comunitario (IMDEC) y FUNDAR.
Diana Pérez, abogada del Consejo Tiyat Tlali, explicó a LADO B que la sesión de Cabildo en la que se revocaron los permisos fue en junio de 2019, haciendo cumplir al presidente municipal su promesa de campaña, pues había asegurado que estaría del lado del pueblo en el tema de la hidroeléctrica.
La revocación contempla los permisos de uso de suelo y la licencia de construcción y movimiento de tierras que fueron otorgados desde 2009, mucho tiempo antes de que los pobladores se enteraran de las intenciones de la construcción de la hidroeléctrica.
El que se quitaran los permisos es, de acuerdo con la abogada, resultado del proceso de incidencia de las comunidades, que inició desde marzo del año pasado. Esto significa que la empresa no puede construir nada en el territorio de Ahuacatlán, entre ello dos obras indispensables para el proyecto: al menos la mitad del embalse y la cortina de la presa.
Aparte de la revocación, que reitera el rechazo de las comunidades al proyecto en uno de los tres municipios implicados –siendo el tercero Tlapacoya– todavía se está en espera de la resolución del recurso de revisión respecto a la sentencia de un amparo, que fue emitida el año pasado a favor de la empresa.
La fecha tentativa de la resolución es a finales de enero o principios de febrero, pero como ha marchado lento no hay certeza de cuándo saldría.
La abogada Diana Pérez dijo que hay probabilidades de que el caso se envíe a la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN) si alguna de las partes lo solicita, o por la relevancia del caso.
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