Abandonados a su suerte más de mil desplazados de Chalchihuitán

Crisis por desplazados en los Altos de Chiapas

Mas de mil indígenas tsotsiles desplazados de una decenas de sus comunidades de origen en el municipio de Chalchihuitán, denunciarn hoy que han sido abandonados por las autoridades gubernamentales, que la ayuda humanitaria ha dejado de fluir y que tampoco hay condiciones para que regresen a sus tierras y sus hogares.

Comen lo poco que llega de organizaciones como Cáritas que no las abandona.

El padre Marcelo Pérez Pérez, párroco de Simojovel, dijo hoy que los desplazados de Chalchihuitán han sido abandonados a su suerte por el gobierno municipal, el estatal y el federal, y que las organizaciones públicas, civiles y no gubernamentales han dejado de llegar, por lo que han empezado a resentir su situación de desplazado.

En campamentos improvisados, así viven los desplazados

 

Hast hoy, la única organización civil, es la católica Caritas de la Diócesis de San Cristobal, la que mantiene presencia en la zona pero poco puede hacer ante las necesidades de los desplazados.

 

Cáritas hizo un recuento de los desplazados y señaló que hay todavía 160 personas que conforman 39 familias de Bejelton, 14 familias con 70 personas de Cruz Ton, 61 familias con 195 personas de Tulantic, 11 familias con 50 personas de Cruz C’ac’anam, 17 familias con 100 personas de Xixim Tontic, 20 familias con 133 personas de Jolc’ante’tic, 20 familias con77 personas de Pom, 69 familias con 231 personas de C’analumtic, 10 familias con 44 personas de Ch’en Mut y 29 familias, de Bolol Ch’ojon.

Siguen en situación de emergencia.

Unas 290 familias con unas mil 60 personas, entre hombres, mujeres, niños, niñas y ancianos, todas las comunidades del municipio de Chalchihuitán.

 

“La situación y condiciones de sus vidas es preocupante, según comentan de que los disparó continúan”, dijo el sacerdote Marcelo Pérez Pérez.

 

Los desplazados señalaron que desean regresar a sus comunidades, pero no hay condiciones para hacerlo, orque siguen acosando los grupos civiles armados de Chenalhó que desde el pasado mes de noviembre, los obligaron a abandonar sus hogares y sus tierras.

Duermen a la intemperie más de mil indígenas desplazados

Señalaron que no sólo es la ayuda humanitaria la que ha dejado de fluir, sino que además no tienen un hogar donde vivir y siguen en campamentos improvisados.

 

 

Sin comentarios aún.

Deja una respuesta

Este sitio usa Akismet para reducir el spam. Aprende cómo se procesan los datos de tus comentarios.

Comparta su opinión. Su correo no será público y será protegido deacuerdo a nuestras políticas de privacidad.