Enfermeras despedidas por denunciar crisis en el sistema de salud, hoy inician huelga de hambre exigiendo ser reinstaladas

Nos quitó el trabajo para intimidarnos y negociar nuestro trabajo por nuestro silencio. No lo van a lograr. Foto: Chiapas Paralelo

María de Jesus Espinosa de los Santos, Cielo Gramajo Cundapí, Elivón Castillo Escobar, Veronica Zenteno Pérez y María Isidro Orozco laboraban en el Hospital de La Mujer en la capital de Chiapas. El pasado mes de enero participaron en un movimiento de trabajadores para denunciar el desabasto de medicamentos e insumos, y la crisis que desde hace cuatro años se vive en el sistema de salud. Ellas y otros nueve trabajadores fueron despedidos por las denuncias. Hoy iniciaron una huelga de hambre para exigir su reinstalación.

En enero de este año, miles de trabajadores de clínicas y hospitales de Chiapas, iniciaron un paro laboral parcial. Su exigencia era el abasto de medicamentos e insumos. Denunciaron que desde el inicio de la actual administración la atención a los derechohabientes se fue deteriorando por estas causas.

Médicos y enfermeras de diversos hospitales abrieron sus puertas a medios de comunicación, para hacer públicas las condiciones en las que estaban laborando. También para denunciar que las irregularidades administrativas y el desvío de recursos habían alcanzado el dinero que les era descontado para su jubilación.

El gobierno del estado respondió haciendo entregas públicas de algunos insumos y medicamentos, que al decir del personal de la Secretaría de Salud, sólo alcanzó para unas semanas.

El 23 de febrero Julio Cesar Cruz Mayorga, trabajador administrativo y cabeza visible de la lucha que mantienen los trabajadores de la Secretaría de Salud, fue despedido acusado de “faltas administrativas”.  También fue despedido Rubén Castillejos Álvarez.

El 24 de marzo otros 14 trabajadores siguieron en la lista de despidos. Todos ellos tienen en común haber participado activamente en las manifestaciones del sector Salud.

Esta mañana, cinco de las enfermeras despedidas, iniciaron una huelga de hambre. Anunciaron que cada 48 horas se unirá a la huelga otro trabajador, “hasta que tenga una respuesta favorable de las autoridades a sus demandas de reinstalación, abasto de insumos y medicamentos, y reintegro de los recursos para su fondo de jubilaciones.

“Antes de tomar esta medida, buscamos acercamiento con gobierno del estado. Lo que obtuvimos amenaza y violencia. Nos quitó el trabajo para intimidarnos y negociar nuestro trabajo por nuestro silencio. No lo van a lograr”, dijo Espinosa de los Santos, quien durante 30 años a trabajado en la Secretaría de Salud.

Cielo Gramajo, otra de las enfermeras huelguistas, subrayó: “nos causan de delincuentes, y los delincuentes son ellos al violar la ley al robar el dinero de los trabajadores, y despedirnos por protestar”. Dijo que no pretende perder la plaza laboral que por 26 años ha desempeñado.

“Tantas riquezas tiene Chiapas, y los trabajadores somos tan pobres y tan pateados. Entrego mi salud y mi vida en nombre de todos mis compañeros.Luchemos por una salud digna”, dijo Veronica Zenteno, con 27 años de servicio, antes de unirse a la huelga.

Espinosa de los Santos también subrayó que el Sindicato del Sector Salud se hizo cómplice del robo del dinero destinado a la jubilación de los trabajadores, mismo que no fue entregado a los sistemas de administración.

Trabajadores de hospitales de diferentes municipios mantienen un plantón afuera del Hospital Pascacio Gamboa, donde las enfermeras instalaron la huelga.