Peregrinación arriba hoy a capital de Chiapas para exigir acciones contra la delincuencia organizada

Marcha del Pueblo Creyente: Foto: Cortesía

• Las autoridades tienen nuestras demandas en sus manos: Pueblo Creyente de Simojovel.

“No escondemos nada, todo lo hemos dicho públicamente, las autoridades tienen nuestras demandas en sus manos y estas son: cierre de cantinas, alto a los asesinatos, alto a la prostitución, alto al narcotráfico, alto a los narcopolíticos, tráfico de armas, alto a la trata de personas. Exigimos agua potable, hospital digno para nuestros enfermos, mejores condiciones del camino”, expresaron habitantes de Simojovel y la zona norte de Chiapas, la víspera de que arriben a la capital de Chiapas.

Unas 15 mil personas han caminado por más de 200 kilómetros, en una acción pacífica para exigir a los gobiernos de Chiapas y federal, actúe y dé trámite a las demandas formales y denuncias púbicas que desde hace dos años han realizado, para advertir que la delincuencia organizada se ha apoderado del municipio de Simojovel y en general, del resto del estado.

A la marcha-peregrinación que inició el Pueblo Creyente de Simojovel, se han unido miles de ciudadanos y ciudadanas para denunciar la descomposición institucional y la situación de inseguridad y violencia en la que viven, similar a estados como Guerrero, que son controlados por la delincuencia organizada.

Desde meses antes de la peregrinación, el sacerdote Marcelo Pérez Pérez, uno de los iniciadores del movimiento, ha sostenido diversas reuniones con personal de la secretaría de Gobierno de Chiapas, para demandarles detengan esta situación. La respuesta que le han dado son ofrecimientos a él, de manera personal, para que acepte custodia policiaca y un auto blindado.

El problema de fondo no lo han querido abordar porque, de acuerdo a lo que ha señalado en las reuniones personal de la Subsecretaría de Gobierno, “la situación está muy cabrona”.

Cinco peregrinaciones sin respuesta

Horas antes de iniciar el último tramo de la peregrinación de los cuatro días que les llevó llegar a la capital de Chiapas, las y los peregrinos dieron a conocer un comunicado público donde reiteran: “estamos peregrinando porque ya van cinco peregrinaciones que hemos hecho en Simojovel para que se detenga la violencia y, hasta el momento, no hemos tenido una respuesta satisfactoria de parte del Gobierno municipal, estatal y nacional”.

Tal como lo han señalando en ocasiones anteriores, explicaron que si bien en el caso de Simojovel el presidente municipal es Javier Guzmán Hernández; quien gobierna son Ramiro Gómez Domínguez y Juan Gómez Domínguez, ambos ex presidentes y precandidatos del PRI para ocupar de nueva cuenta la presidencia municipal y la diputación local.

“Estas dos personas han controlado, saqueado, empobrecido y secuestrado al pueblo de Simojovel, han cooptado las distintas autoridades que están en Simojovel. Con esto queda evidenciado que la raíz de esta violencia es la corrupción institucionalizada, que ha generado violencia institucionalizada”.

En su pronunciamiento público sostiene que a su demanda de paz y justicia han respondido con amenazas de muerte contra todos y todas quienes conforman el Consejo Parroquial, representantes del Pueblo Creyente.

“Y es que las amenazas en nuestra contra no han parado, desde los primeros días que empezamos a denunciar en la cabecera de Simojovel, hasta estos días de nuestra magna peregrinación; por ejemplo, el segundo día de nuestro caminar saliendo de Bochil recibimos información confiable de que los cantineros se reunieron con los Gómez para planear asesinarnos durante el camino”.

“Ese mismo día, ya por la tarde, nuestro equipo de seguridad nos informó que dentro de la peregrinación habían detectado a personas infiltradas, minutos después pudimos constatar, y tenemos las pruebas, de que son agentes del Centro de Investigación y Seguridad Nacional (CISEN) que estaban disfrazados de personal de Protección Civil.

“Y hasta el día de hoy, también tuvimos información sobre un grupo de personas armadas que nos esperaban escondidas a la orilla de la carretera mientras caminábamos de Ixtapa a Chiapa de Corzo”.

Reiteraron que las autoridades de los tres niveles de gobierno tienen las demandas y la solución en sus manos.

“Cuando la violencia y la corrupción institucionalizada se imponen, el pueblo no solo tiene derecho de levantarse a luchar con buen mexicano sino que es una obligación, para dejar un buen futuro de los mexicanos y mexicanas”, sostuvieron.