La Pituca, el que enloqueció de amor
La Pituca. Foto: Jacob García
Son las 4 de la tarde y suena “Mueve tus botitas” de Kc and the Sunshine Band, los chamacos saltan de sus lugares y jalan a las chavas que están sentadas en las sillas de madera alrededor de la pista del Viejo Casino Tuxtleco….
En medio del centenar de chamacos que bailan al ritmo del grupo La Familia, destaca uno que gira sobre su eje, agita su melena, y mueve sus piernas como si hiciera un pase de futbol, alternadamente izquierda y derecha, moviendo su cuerpo como si desde los pies recibiera una onda eléctrica que lo hace ondularse, como cuando uno sacude una vara de pituti, es La pituca; que se dice, vive por cantarranas y es machín.
No se le conocen amigos, tampoco una chava, solo se le mira por la zona de la prevo, en el sospó o en el INJUVE jugando futbol y los domingos en las tardeadas del Casino Tuxtleco, viejo salón de baile, que tiene un enorme plafón lleno de pequeños focos que simulan un cielo estrellado, pero que para 1977 pocos focos funcionan.
Siempre se paró cerca de la puerta, siempre ausente, de mirada perdida, recargado en la pared, luce pantalón acampanado, zapatos flexi de suela de goma, como todos los que llegábamos al Casino, esperando a que abrieran la puerta para entrar a danzar.
Como siempre después de bailar suele estar solo, abismado, en su lugar. El Casino despareció como en 1978; cuando salieron las discotecas los chavos nos fuimos a ellas, abandonamos el viejo salón y con él a muchos de sus personajes, entre ellos a la Pituca.
En 89, lo encontré en su barrio el Canta ranas ya vestido de túnica blanca, guitarra en mano, sentado a las afueras de la balconería del Gil. Se había convertido en coco de los niños, Lo miran con temor por su aspecto de vago y porque les asusta que habla solo. Canta viejos éxitos de Roberto Carlos, Camilo Sexto y maldice a las mujeres después de cada canción.
El dueño del caserío el Oscar Borras, le dice -“ya cállate con esa pinche canción, si tanto quieres a la vieja ve a buscarla, La Pituka, masculla entre dientes “-pinche chavo no aguanta vara” ¿Tú qué sabes de amor, si nunca te han amado? Le inquiere. El Borrás, se enoja y amenaza con tirarle su vaso de trago, cosa que nunca sucede, porque Gil calma al Borrás, La Pituca fiel a su pasividad, se para, toma su guitarra, gira sobre su eje, deja hablando y mentando madres al Borrás.
-¿Estás seguro pinche Pituca? No voy a trabajar de vicio cabrón ¡cuidado me sales con que te rajas!
-Si, seguro pinche Gil. Así ya me voy olvidar de esa cabrona….
En cantarranas, cuenta la leyenda que a la Pituca le puso el cuerno su mujer, que la cachó con su mejor amigo y que por eso se volvió loco, sin dirección, quedó atrapado en el odio, consolado por su guitarra y su fiel caguama.
Dicen que pidió ayuda de dios, que rezó, realizó mandas y no halló solución a su mal de amor. Como nunca llegó la ayuda celestial, decidió encarnar a Cristo, el hijo de dios que se sabe, murió célibe. Entonces le pidió a su madre le hiciera una túnica blanca y fue con el Gil para que le hiciera un cinturón de castidad.
-Haber levántate la nahua.
La Pituca se levanta la túnica que ya no luce blanca, deja que el Gil le acomode el cinturón, que esta hecho de lamina y cuero, al que Gil. cierra con un pequeño candado. Es el instrumento que le hará olvidar el pecado original.
Se persigna, gira sobre su eje y agarra en dirección de la iglesia del Carmen….en menos de 15 minutos está de regreso. -Te lo dije culero, que no te iba yo a quitar el cinturón si te rajabas…ahora chíngate, -Ya pues Gil no seas malo, ya estoy todo escaldado… los que están en el taller del Gil sueltan la carcajada.
Ni madres, ¡te chingas pinche Ramón! El Gil con sonrisa sádica , le muestra la llave y se la guarada en su bols.
El Borrás apoya la medida de dejar a la Pituca con el cinturón de castidad
-que se joda por pendejo y lárgate de acá, ¡¡pinche marihuano! Dice el Borrás con su vaso de trago en la mano.
Empieza un suplicio que duró toda la tarde, hasta que el Gil aburrido de los llantos decide quitarle el cinturón de castidad. Saca la llave y abre el candado, La pituca da pequeños saltos de alegria.
-Te juro Gil que no necesito de eso para no volver a pecar….sentencia La Pituca.
Riela el calor en Tuxtla, el calor que está a punto de fuego purificador, un calor que curte la piel, que deja surcos en la cara de la Pituca, que sigue vistiendo de túnica que un día fue blanca, metralleta de palo en el hombro, como si fuera comandante zapatista, de barba y melena canosa, convertido en un Cristo guerrero, luce en el pecho medallón religioso de cartón y un crucifico con el Cristo en el que se ha convertido, un Cristo que toca la guitarra y que promete y sentencia a quienes viven en el pecado original.
El crucero de 5 de Mayo, es el centro de su vida, donde predica, donde balbucea palabras y talonea, ahí, en donde estuvo la Prevo. Se acerca al vehículo que conduzco y de inmediato me ubica, diciéndome con familiaridad.
-Un varito carnal, ta duro el calor…. Vos sos buena gente, ¿te acordás de mi?
-Simón Ramón, le contesto.
-Te sabes mi nombre, chido me voy a tomar una Kawasaki a tu salud, estira la mano y le doy unas monedas….
Es el mismo Pituca que conocí de Chavo, al que no mató el desamor, el que han desollado en las redes sociales, el que soporta el olvido, el que camina y camina sin salir del mismo lugar, como cuando bailaba como trompo, en su eje en el mismo lugar.
Hace su paso de baile, justo el que hacía en el casino Tuxtleco, gira sobre su propio eje y se va caminando entre los carros, que esperan el verde del semáforo.
Camina como cuando se metía entre los bailarines del Casino Tuxtleco que celebrábamos su estilo, se acerca a la banqueta de la primaria Juan Benavides, la única banqueta de la avenida central con árboles y sombra, la que ha convertido en su oasis, ahí es donde guarda el producto de su talón, su caguama que lo salva del pecado original y del infernal calor de Tuxtla.
Para fraseando a Daniel Robles, La Pituca muere de amor y no le basta.
Pues uma de tantaa historias de Tuxtla y de La Vida…
… Yo le he visto en varias okasiones pero apenas konozco la historia aobre el a traves de este relato tan kuidadoso y muy bien elaborado, no cabe duda ke es un gran personaje y fue buena persona (dentro d lo ke kabe en sus sanas fakultades mentales).
No amigos aun no se lamenten de haberle konocido, pues le vi pasar caminando x una farmacia rekonocida apenas hace unoa dias y una persona me lo menciono, haciendo referencia de su seudonimo pero no sabia aun la historia.
…Aun Hay Pituca Para Tuxtla Amigos Mios…
Ramon, como cualquiera que se enamora, y como a cualquiera que le cambia la vida un amor mal logrado…hoy se rehabilita en un centro donde el amor de muchos iguales a El le han enseñado que se puede….SOLO POR HOY!!!
PUES LA PITUCA UNA GAN PERSONA COMO SER HUMANO, LOS COMENTARIOS POR SU SITUACION VERDADEROS O FALSOS SOLO DIOS SABE, YO LO CONOCI Y LO ADMIRAVA POR SU GRAN ABILIDAD EN EL FUTBOL, PERO LO LAMENTABLE DE ESTO ES QUE TENIENDO TANTOS AMIGOS Y CONOCIDOS «NO LE HEMOS BRINDADO HAUN EL APOYO REAL QUE EL REQUIERE» POR QUE NO HA MUERTO VERDAD?
No ha muerto dejenlo de matar varias veces con falsas declaraciones
se llama Ramon, no pituca como le nombran
No ha muerto lo he visto ahi en el 5 de mayo en el mismo lugar de siempre lo han matado tantas veces con falsos comentarios
MUCHAS COSAS SE PODRAN DECIR DE ESTE AMIGO, YO LO CONOCÍ JUGABAMOS FUTBOL, Y HASTA TRABAJE CON EL UN TIEMPO, LE AYUDABA EN SU TRABAJO DE REFRIGERACION. QUE POR CIERTO LO TENÍA EN UN LOCAL QUE EL DECIA SE LO PRESTARON SUS SUEGROS. PERO COMO NO LE FUE MUY BIEN Y LO DEJO. ERA MUY TRANQUILO PERO CUANDO SE DROGABA CAMBIABA MUCHO. CON SU MUJER RECUERDO ERAN DOS HIJOS Y SU ESPOSA EL COMENTABA QUE TRABAJABA FUERA DE TUXTLA CREO QUE ERA MAESTRA. SU MAMA DE EL VIVIA ARRIBA EN LA MISMA CASA QUE LE DIERON LOS SUEGROS A SU ESPOSA EN LA ENTRADA DE UNA VECINDAD. EN VARIAS OCASIONES EL SE DESAPARECIA Y POR ESO YA SU MUJER TERMINO LA RELACIÓN Y YA NO LO DEJO ENTRAR A SU CASA DE ELLA. QUE DESCANSE EN PAZ EL AMIGO PITUCA QUE LAS DROGAS Y EL ALCOHOL LE AFECTARON DEMASIADO.
La recreación tan sencilla que haces del personaje me parece que es lo que provoca el interés de seguir leyendo hasta el final; la frase de uno de los poemas de Daniel Robles S. con que cierras el relato….La Pituka , «muere de amor y no le basta»…..es asombrosa!. Me gusta, gracias
Gracias a los comentarios tan acertados y no, a la nota que deja mucha información fuera de la realidad. Saludos.
yo estudie en la Prevo lo conocí de vista desde que tenia 15 años actualmente tengo 51 de edad. te puedo decir que crecí viendo ese personaje, hasta ahorita se como se llamo, lo conocí siempre delgado siempre con pantalón de mezclilla, lo conocí porque se sentaba en el parque 5 de mayo en ese tiempo estaba considero bien de sus facultades mentales, porque nunca platique con el, pasaron los años yo me fui fuera de Tuxtla y después lo veía en el 5 de mayo con su túnica y pidiendo dinero, nunca me dio gusto verlo así, lo digo con mucho respeto porque lo consideraba parte de mi misma generación, hoy me entere que ya falleció dios sabrá porque se lo llevo, yo no te puedo decir si era o no feliz, nunca se lo pregunte cuando me pedía una moneda, pero la noticia para mi no es agradable porque a un ser humano nunca se le desea un mal, que dios lo cuide y bendiga.
Buen articulo, pero mejor el contraste de los comentarios.
Lamento muchísimo la muerte de Ramón, fue un muchacho de gran corazón, alegre y sentimental, de ahí su afición al baile, al canto, a la música, al futbol. La familia de él vivía en la Colonia Mexicanidad Chiapaneca de la ciudad capital, de donde se destaca su participación en la representación de un vía crucis, en la que ocupó el papel principal, de ahí su afición de ponerse la tunica y no por el motivo que se señala en la nota. Él vivió en concubinato con una mujer, que se debe aclarar, no lo engañó por serle infiel, sino debido al abandono de Ramón quien se ausentaba por temporadas de su casa debido adicción a las drogas, cuando él regresó a su casa, encontró a su esposa con el hermamito de él, las condiciones en que los encontró fueron manipuladas por él para justificar su abandono. Son muchas cosas que se podrían decir de él, pero debemos ser prudentes en decirlas máxime si no nos constan los hechos que argumentamos. En paz descanse Ramón Romero Delgado.
Ramón Romero Delgado, su verdadero nombre, en su historia de vida fue un excelente futbolista, con clase y de una zurda privilegiada como muy pocos han de recordar. Jugó con el equipo de Estudiantes de Chiapas y participó en aquel encuentro realizado en el flor del Sospó contra los Pumas de la UNAM. La vida nos cobra todo…
Creo que esta historia es un mito que se ha creado en torno a él. Lo conoci de lejecitos en el barrio de San Roque como en 1974, cuando llegaba y era novio de una chica de la secundaria del Estado con la que posteriormente tuvo un hijo. El gran problema que ya enfrentaba en ese entonces era que tomaba y consumía mariguana, y puede que todo su desequilibrio así como su truene sentimental se deba a lo mismo.