Ya basta, dicen mujeres contra el acoso callejero

Mujeres contra el acoso callejero

Coordinadas desde Chiapas, cientos de mujeres en esta entidad, Quintana Roo y Distrito Federal salieron a las calles, para sumarse a la “Jornada ciudadana contra acoso sexual callejero”.

La activista feminista, académica e investigadora, Patricia de los Santos Chandomí dijo que fue necesario salir a las calles para manifestar su rechazo al acoso sexual callejero, una de las violencias más cotidianas que viven mayoritariamente las mujeres.

Desde el pasado 21 de junio el organismos Derechos de Humanas Centro de Investigación (DEHCIDE) y la organización civil Iniciativas Feministas lanzaron una convocatoria para tomarse una foto contra el acoso sexual callejero en el Parque Bicentenario de Tuxtla Gutiérrez, a donde acudieron decenas de madres, abuelas, hijas, estudiantes, padres, vecinos a tomarse la foto con una leyenda contra el acoso sexual callejero.

Desde el pasado 21 de junio el organismos Derechos de Humanas Centro de Investigación (DEHCIDE) y la organización civil Iniciativas Feministas lanzaron una convocatoria.

A raíz de la respuesta positiva que recibió esta campaña, las organizaciones lanzaron una siguiente convocatoria llamada “Chiapas diez municipios de diez contra el acoso sexual callejero”, a la cual se unieron Cancún en Quintana Roo y el Distrito Federal.

En Chiapas hubo manifestaciones en Comitán, Chiapa de Corzo, Motozintla, Frontera Comalapa, Villaflores, San Cristóbal de las Casas, Berriózabal y Cintalapa.

Las manifestaciones fueron pacíficas y en espacios públicos, entre las actividades que se realizaron se contó con marchas, obras de teatro, exhibición de pancartas, concurso de cárteles y volanteo.

Selene Domínguez, una de las convocantes de DEHCIDE dijo que el acoso sexual callejero es una interacción forzada entre un desconocido y la víctima, tiene un contenido alusivo a la sexualidad, hay empleo de símbolos, palabras, mensajes escritos, silbidos a distancia, actos de exhibiciones, persecuciones, hostigamiento, acercamiento de órganos sexuales, susurros, proposiciones o comentarios sexuales que llegan incluso a ser amenazas de violación sexual, que no son autorizados ni correspondidos, generando un entorno inseguro para la víctima.

Por su parte, Patricia Chandomí, otra de las organizadoras señaló que el acoso sexual callejero ocasiona en las mujeres impactos negativos como temor a transitar solas por las calles, demoras innecesarias al evitar ciertas zonas consideradas inseguras, gastos extra para poder costear transporte privado, dependencia de otros hombres (padres, hermanos, parejas, entre otros) a quienes piden compañia y protección en las calles, abandono de centros de trabajo (si la zona del trabajo es considerada insegura para una mujer), entre otros.

La Campaña “Chiapas Diez municipios de Diez” contra el acoso sexual callejero busca sensibilizar a la población para que rechacen conductas que hacen sentir a las personas más inseguras en las calles.

El acoso callejero es definido por la especialista estadounidense Holly Kearl, como «las palabras y acciones no deseadas llevadas adelante por desconocidos en lugares públicos, que están motivadas por el género e invaden el espacio físico y emocional de una persona de una manera irrespetuosa, rara, sorprendente, atemorizante, o insultante».

En un estudio de 811 mujeres realizado en 2008 por Stop Street Harassment, casi una de cada cuatro niñas de 12 años habían experimentado acoso en la calle y casi el 90% de las de 19 años.

La encuesta demostró además que, mientras las víctimas del acoso callejero son preferentemente las adolescentes y jóvenes de menos de 30 años, la probabilidad de que esto ocurra nunca desaparece a lo largo de la vida de una mujer.

En el país no existen estadísticas acerca de este grave problema, pero quienes lo vivimos sabemos que si tiene un impacto en nuestra seguridad en los espacios públicos.

—————-o0o———–