Enferma en el extranjero, migrante en Chiapas pide ayuda

Ampary ha buscado ayuda con las oficinas gubernamentales de atención a migrantes y demás instancias del municipio y estado, pero a la fecha sigue siendo un obstáculo ser extranjera. Foto: Cesar Rodríguez

En la edad de los sueños e ilusiones, su vida podría terminarse en cualquier instante. El diagnóstico médico actual es una arritmia con taquicardia ventricular recurrente, y obstruida la válvula mitral del corazón. El problema para poder ser atendida es la falta de recursos económicos de la familia y la condición de extranjera, esta última que provoca el cierre de muchas puertas donde se pide ayuda.

Ampary Beatriz Peña Fernández tiene 15 años, es originaria de Santiago, República Dominicana. Vive desde hace 5 años en el fraccionamiento de interés social Solidaridad 2000, ubicado al sur poniente de Tapachula. De vez en cuando acude a la Secundaria Federal Número Cuatro, aunque lo tiene prohibido por el problema de salud que presenta. La válvula mitral ayuda a que la sangre en el lado izquierdo del corazón fluya en una dirección, y se cierra para impedir que la sangre se devuelva cuando el corazón late (se contrae).

Un poco tímida, dijo en entrevista que su mayor anhelo es poder terminar una formación profesional y convertirse en exitosa médico veterinario. Sin embargo  esta meta de vida trazada podría finiquitarse antes de lo planeado, porque requiere de la ayuda de las autoridades para poder recibir la atención, y sobre todo poder conseguir dinero para pagar los traslados altos de precio que le cobran cada vez que viaja a Tuxtla Gutiérrez.

“Se ha buscado ayuda con las oficinas gubernamentales de atención a migrantes y demás instancias del municipio y estado, pero a la fecha sigue siendo un obstáculo ser extranjera. A donde quiera que llegamos, e inclusive cuando están a punto de atenderla, al saber de dónde venimos, nos cierran en automático las puertas”, expresó.

La angustiada madre Yohanca Fernández narra cómo desde el año pasado inicio todo este calvario, que ha sido uno de los más caros y que han provocado además del cierre de un negocio dedicado a la decoración de uñas y limpieza de las mismas, con la que sostenía a toda la familia.

Actualmente, dijo, se han hecho muchas cosas para tocar el corazón de las personas y poder juntar  el dinero para pagar la renta de ambulancia porque su hija tiene que ser trasladada en una de estas a la capital del estado, viaje que tiene que realizar sedada y bajo la supervisión de un doctor, pues los cambios de presión y altura hacen que la joven corra riesgos.

“Hemos decidido iniciar con la elaboración de unos dulces para venderlos con los conocidos y que de esta manera nosotros obtengamos un ingreso importante aunque tal vez no sea mucho pero pueda ayudarnos para seguir costeando parte del tratamiento, la verdad hemos agotado todas las instancias y no recibimos ayuda”, expresó.

Y es que tan solo para viajar a Tuxtla Gutiérrez la jovencita, tiene que hacerlo a bordo de una ambulancia y con un medico acompañándola. La renta de la unidad en Cruz Roja tiene un precio de 12mil 800 pesos, cantidad que para la próxima consulta del próximo 23 de mayo no se tiene a la mano.

La mamá de Ampary expone que su embajada de República Dominicana con quien hace apenas unos días pudieron hacer contacto les ha dicho que las ayudan pero tienen que estar en su país sin embargo esto es imposible porque el estado de salud de la joven no es el adecuado para realizar este viaje de muchas horas, y lo peor que tampoco puede viajar en avión.

“Lo que le pediría a la autoridad es que no vean la parte de la nacionalidad  para poder ayudar a alguien, sino que vean la parte humana, pedimos al gobernador que publicita una campaña de ayuda a los migrantes que se toque el corazón porque la verdad a la fecha no hemos recibido ninguna ayuda”, añadió.

Por ello la invitación para las fundaciones y organizaciones serias que deseen ayudar pueden comunicarse directamente al número de celular 962 11 47144 con Jorge o Yohanca, pues a la fecha han sido algunos políticos que han dicho que ayudaran, piden un sinfín de documentos pero a la fecha todo queda en promesa, mientras la salud de la joven Ampary cada vez más requiere ser atendida.