Restituyen predio a católicos en el ejido Puebla de Chenalhó, para construir su templo

Desde agosto pasado, más de un centenar de indígenas católicos fueron desplazados por evangélicos que son mayoría en el ejido Puebla de Chenalhó.

Indígenas evangélicos del ejido Puebla en el municipio de Chenalhó, entregaron hoy a indígenas católicos que estaba desplazados, el predio para que construyan su templo, lo que originalmente causó el conflicto de ambos grupos  desde agosto pasado.

Con la mediación y presencia del secretario general de Gobierno, Eduardo Ramírez Aguilar y el subsecretario de Asuntos Religiosos, Víctor Hugo Sánchez Zebadúa, de la Diócesis de San Cristóbal de las Casas, representada por el Monseñor Enrique Díaz Díaz, este miércoles se firmó la entrega del predio que provocó la expulsión de un centenar de hombres, mujeres y niños católicos.

En el acto estuvo el Comisariado Ejidal, Agustín Cruz Gómez, donde se señaló que este “es un gran paso para la construcción de la armonía y la paz en el ejido”, desde donde agosto pasado los católicos fueron expulsados.

Ante autoridades ejidales y representantes de la iglesia Católica y la iglesia Nacional Presbiteriana, el secretario de Gobierno reconoció que este tema no ha sido fácil y que si bien no ha quedado del todo resuelto, se está avanzando significativamente, toda vez que es un tema presente en la agenda de gobernabilidad el cual no se ha desatendido en ningún momento.

Invitó a los evangélicos y al comisariado ejidal a respetar el dictamen de la Secretaría de Gobernación que tiene todas las garantías para que la iglesia Católica haga uso de este predio y puedan construir su templo, pues al final –dijo-  todos evangélicos y católicos estamos para hacer el bien común para que su comunidad viva en paz con la tranquilidad de sus familias.

Ramirez Aguilar manifestó que desde el Gobierno de Estado se seguirá trabajando en el tema de Puebla para darle solución a los asuntos pendientes. Por su parte, en representación de los católicos, el obispo Enrique Díaz Díaz pidió el respeto mutuo para poder construir una nueva comunidad en armonía de unos con otros.

Por parte de la Iglesia Nacional Presbiteriana de México, el pastor Jacobo Hernández Hernández reconoció la voluntad de la asamblea ejidal, la cual  se está materializando con este evento.

El predio que hoy fue entregado motivó una disputa entre católicos y evangélicos, en donde resultaron afectadas varias familias que decidieron albergarse en otras comunidades del mismo municipio.