“Feliz, contento y sin rencores”, regresa Patishtán a Chiapas

“Feliz, contento y sin rencores”, retornó a su tierra el indígena Alberto Patishtán Gómez. Foto: Amalia Avendaño

“Feliz, contento y sin rencores”, retornó a su tierra el indígena  Alberto Patishtán Gómez, quién fue fue recibido con una fiesta popular en San Cristóbal de las Casas, con la asistencia de sus familiares, amigos, conocidos y activistas solidarios que apoyaron su lucha durante los 13 años que estuvo preso.

“No puedo decir que estoy bien, sino regularmente, ya estoy en recuperación”, afirmó sobre su salud en entrevista para los medios de comunicación que cubrieron su retorno, y los festejos de recibimiento que iniciaron en el aeropuerto “Ángel Albino Corzo”, a las 12 del día, donde lo esperaba su familia, entre ellos su abuelo materno de 83 años, Francisco Gómez, quién nunca había podido visitarlo en la cárcel.

Patishtán explicó que su propósito es “reinsertarse” en su vida familiar, truncada hace 13 años, cuando fue detenido acusado de una emboscada en el municipio de El Bosque, en donde murieron 7 policías.

El maestro tsotsil estuvo en distintas cárceles del país hasta que agotó todas las instancias judiciales, incluyendo la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN), por la presión social nacional e internacional logró su libertad a través de un indulto decretado por Enrique Peña Nieto el pasado 31 de octubre.

Ahora, explicó el profesor Alberto Patishtán, la “segunda batalla” es por su salud  para remontar el tumor cerebral que le fue detectado hace dos años.

Patishtán consideró que fue detenido por su activismo social y posteriormente continuo apoyando la lucha indígena logrando la libertad de decenas de presos políticos desde el interior de la cárcel.

Desde la cárcel de San Cristóbal de las Casas, en calidad aún de recluso, el profesor viajó a principios de octubre para recibir radioterapia en el Instituto Nacional de Neurología, en la Ciudad de México, y recibió el indulto y la libertad el 31 de octubre pero continuó en la capital mexicana hasta este sábado, cuando concluyó las terapias que le permiten regresar a su casa por algunos meses.

Antes de llegar a El Bosque, a donde será recibido este domingo con una gran fiesta, hizo una escala en San Cristóbal de las Casas, donde descansó un rato y comió en el Seminario Conciliar. Posteriormente visitó la  tumba del JTatic Samuel Ruiz García, en el altar de la Catedral, donde se llevó a cabo una misa oficiada por el obispo auxiliar Enrique Díaz Díaz.

Durante la celebración llena de aplausos y  manifestaciones de alegría, el maestro que había sido condenado a 60 años de cárcel, dijo que  “de alguna manera las cosas malas vienen por bien, para seguir madurando, porque cuando muchas veces no pasa nada nos cuesta mucho madurar, entender lo que dice Dios”.