En Chiapas rechazan censo de escuelas y maestros
En el 59.48% de las escuelas de Chiapas, padres de familia y/o maestros rechazaron participar en el Censo de Escuelas, Maestros y Alumnos de Educación Básica y Especial, mismo que será la base para crear el Sistema de Información y Gestión Educativa, parte del proyecto de la Reforma Educativa.
De acuerdo al Instituto Nacional de Estadística y Geografía (INEGI), Chiapas es la entidad que reportó el mayor porcentaje de negativas respecto a los centros visitados. También hubo rechazo en Michoacán, Oaxaca y Quintana Roo, aunque en menor medida.
El censo tiene un costo de 740 millones de pesos, forma parte de los cambios incluidos en la Reforma Educativa. Inició el pasado 26 de septiembre y se espera termine este mes de noviembre.
Se realizó porque la Secretaría de Educación Pública (SEP) no tiene una base de datos que permita saber con certeza cuáles son las condiciones en que toman clases 26 millones de alumnos de educación básica en el país, cuántos profesores están frente a un grupo o cuántos en actividades administrativas.
Para el censo, los docentes deberán dar su nombre, la clave de su plaza, el grado y las horas que imparte a los enumeradores del INEGI, encargados de levantar la información; lo que ha sido rechazado, principalmente por la inconformidad que hay respecto a la aplicación de la Reforma Educativa.
Además de las 225,000 escuelas de educación básica, el objetivo es censar las 28,419 oficinas administrativas todos aquellos lugares donde estén personas que tengan plaza docente.
El resultado del censo se cruzará con el Registro Nacional del Alumnos, Maestros y Escuelas (RNAME) y con los datos que tiene la secretaría sobre la nómina de los maestros para confirmar el número de docentes y trabajadores activos
De acuerdo a lo que informó el Secretario de Educación, Emilio Chuayffet Chemor, con esta información, la SEP podrá “generar un diagnóstico que determine cuáles son las principales problemáticas del sistema educativo y, con base en ello, tomar las decisiones pertinentes para su mejora”, pues hasta el momento no se cuenta con información cualitativa sobre las condiciones de los planteles escolares.
Maestros y maestras rechazaron participar en el censo, porque argumentaron que viola los preceptos originales de los Artículos Tercero, 73º y 123º de la Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos, y buscaría aniquilar sus derechos laborales, la estabilidad en el empleo y la plaza de base.
En un desplegado, profesores sostuvieron que la elaboración del censo es una prueba de que la Reforma Educativa está sin sustento pedagógico y social nacional, “y es solo una reforma administrativa, laboral y empresarial”.
Consideraron que con esta medida se pretende ubicar selectivamente al magisterio movilizado 2para que empiecen las sanciones mayores o actos de intimidación (…) el trasfondo es dar facultades de autogestión a las escuelas para que los gastos en infraestructura, mantenimiento y gastos de operación recaigan en alumnos, maestros, directores y padres de familia”.
El INEGI dio a conocer que no obstante los porcentajes de no respuesta en estados como Chiapas, en el resto del país el operativo censal continua conforme a lo programado y concluirá en tiempo y forma.
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