En el SMAPA, aviadores, red de corrupción y 18 denuncias penales: Araujo Esquinca

Alfredo Araujo Esquinca, director del Sistema Municipal de Agua Potable y Alcantarillado de Tuxtla Gutiérrez (Smapa) dice que hace siete meses recibió una oficina en quiebra técnica, que gastaba más de lo que ingresaba.

Alfredo Araujo Esquinca, director del Sistema Municipal de Agua Potable y Alcantarillado de Tuxtla Gutiérrez (Smapa) dice que en febrero pasado recibió una oficina en quiebra técnica, que gastaba más de lo que ingresaba, que había 60 aviadores que cobraban sin trabajar, una red de corrupción que reimprimía recibos de pago por cantidades diferentes para quedarse con dinero que debió haber entrado a la caja y que los pasivos han colapsado.

Pero que eso no se ha quedado así, que ya se abrieron 18 procesos penales y al menos tres expedientes  fueron consignados judicialmente.

Que se necesitan 589 millones de pesos para rescatar a Smapa, 350 millones de pesos para obra pública, 145 para pagar las deudas y cerca de 100 millones de pesos más para liquidar a los mil 200 trabajadores y recontratar después sólo a la mitad de ellos.

Le pagan 1.2 millones al hospital privado Metropolitano

“Lo primero que reviso es cuanto ingresamos y cuanto gastamos. Y encuentro una diferencia en rojo, en negativo de cerca de 10 millones de pesos mensuales, es decir un déficit de un poco más 120 millones de pesos al año”, dice Araujo Esquinca.

Entrevistado en su oficina en un edificio anexo a la Torre Chiapas, Araujo Esquinca dice que lo primero que encontró fue un Smapa “en quiebra técnica”.

“Lo primero que reviso es cuanto ingresamos y cuanto gastamos. Y encuentro una diferencia en rojo, en negativo de cerca de 10 millones de pesos mensuales, es decir un déficit de un poco más 120 millones de pesos al año”, dice Araujo Esquinca.

Dice que el déficit fundamentalmente se hallaba en dos rubros, tales como el pago del crédito Banobras por la Ciudad del Agua de alrededor de 3.3 millones de pesos. Y el pago a la empresa FYPASA que opera la Ciudad del Agua que son alrededor de 4.1 a 4.2 millones de pesos mensuales.

“Entre esos dos rubros se anda en los 8 millones de pesos. Los otros dos millones de pesos tiene que ver con el gasto corriente como gasolina, refacciones y otros gastos administrativos”, dice Araujo Esquinca.

“Encontramos realmente un Smapa en quiebra técnica que gasta más de lo que ingresa. Y con problemas muy graves que no permiten la operatividad del sistema. Por ejemplo, tenemos una nómina de cerca de 14 millones de pesos mensuales. Le pagamos a la Comisión Federal de Electricidad (CFE) un promedio de 13.5 millones de pesos mensuales. Tan sólo acá ya van 27.5 millones de pesos”, dice el servidor público.

Dice que además le pagan una cantidad de 1.2 millones de pesos mensuales a un sanatorio médico privado (Metropolitano) que es subrogado para que preste  el servicio a los trabajadores.

“Acá nada más  ya van cerca de los 29 millones. Y gastamos en medicina un promedio de entre 700 mil y 800 mil pesos mensuales. Y si se suman, prácticamente ya estamos en los 30 millones de pesos mensuales” , explica.

Que de los 30 mdp que ingresa, todo se va en nómina, luz, medicinas y sanatorio

Precisa que el ingreso que tiene el Smapa oscila justo en los 30 millones de pesos mensuales. Entonces, en esos cuatro rubros se van los 30 millones de pesos que ingresan: nómina, CFE, medicinas y sanatorio.

Para Araujo Esquinca, en ese esquema no se cuenta con recursos para poder tener el equipo necesario, para poder atender fugas, atender a los usuarios y dar respuesta a la demanda del propio Smapa.

Agrega que esto limita o casi imposibilita el mantenimiento preventivo que debería existir de forma permanente.  Pues hay válvulas que tienen un determinado período de vida útil. Y se lleva un control de ello.

“Y si ya llegó su vigencia no vamos a esperar a que se truene, debiera cambiarse tan pronto como ha llegado a su etapa de vida útil”, menciona Araujo Esquinca.

“Si no tenemos para el trabajo preventivo, mucho menos queda recursos para el mantenimiento correctivo. Es decir, si una válvula ya tronó no debe aplicarse un remedio casero al problema porque no hay dinero para comprar otra válvula”, abunda.

Más de 60 aviadores en SMAPA, cobraban sin trabajar

Dice que empezó a hacer una reingeniería para ver de qué forma podía ahorrar algunos gastos para que pudiera tener recursos, ya no para la actividad preventiva, al menos para que pudiera atender los problemas correctivos como la reparación de fugas.

“Entonces lo primero que hicimos fue avocarme en donde podría obtener más recursos. Porque bajo esas condiciones, el recursos para operar el sistema era de cero. Lo primero que hicimos fue revisar la nómina y descubrimos cerca de 60 aviadores. Estas personas tenían buenos sueldos sin hacer nada y decidimos correrlos. Pedimos que se les dejara de pagar y nadie vino a reclamar porque en efecto cobraban sin hacer nada, no venían a trabajar”.

Dice que empezó  a hacer una reingeniería para ver de qué forma podía ahorrar algunos gastos para que pudiera tener recursos, ya no para la actividad preventiva, al menos para que pudiera atender los problemas correctivos como la reparación de fugas.

Indica que el problema del drenaje “es terrible” en Tuxtla Gutiérrez, pues ya se cuenta con “drenajes colapsados”.

De un promedio d 140 fugas reportadas a diario se bajó la cifra para atender de 30 a 40 fugas, es decir, se redujo considerablemente el número de fugas de agua.

Y que aun así, una vez que hizo los ajustes, empezó a investigar cómo iba a resolver el buen funcionamiento de Smapa en cuanto al servicio que requiere la ciudadanía.

Aclara que Tuxtla tiene cinco captaciones, la más importante es Ciudad del Agua. Esta captación se inauguró en el 2008, donde se tienen cuatro equipos de bombeo con 500 litros por segundo de capacidad cada equipo. Y desde que se inauguró en el 2008 había funcionado sólo con tres equipos, es decir bombeaba nada más mil 500 litros por segundo. La empresa operadora argumentaba diversos temas técnicos que había problemas para echar a andar el cuarto equipo.

Fue en marzo que por primera vez, desde que se inauguró en el 2008, cuando se echó a andar la cuarta bomba de ciudad del Agua y ahora sí empezó a enviar dos mil litros de agua por segundo. Lo que les permitió a los tuxtlecos, dice, pasar una época de estiaje sin grande problemas.

Indica que en el poniente de la Ciudad se tienen dos captaciones subterráneas, una galería filtrante en La Chacona y un pozo artesiano en un lugar llamado Rancho Viejo en Terán. Y tienen también un manantial en Plan de Ayala. Mismo que por obvia razón, en tiempos de estiaje estas captaciones pierden agua y se les complica suministrar agua en el lado poniente de la ciudad.

A la par de ello se tiene el Sistema Santo Domingo. El sistema de Santo Domingo tiene una capacidad de mil 650 litros por segundo, de los cuales nada más bombea poco menos de 300 porque todo el equipo de bombeo está totalmente deteriorados, tienen problemas técnicos y mecánicos, ya cumplió su ciclo.

En esa red se cuenta con tuberías quemadas, pues una vez a un campesino se le fue el fuego y quemó las tuberías de polietileno.

“Tenemos en ese sistema una gran deficiencia que por supuesto requieren de urgencia grandes inversiones”, dice Araujo Esquinca.

“Cuando echamos a andar el cuarto equipo de ciudad del agua, por un lado nos solucionó un problema, pero por el otro lado nos causó otro, pues,  al meter más potencia Tuxtla se volvió una pichancha porque las viejas tuberías no tuvieron capacidad ante la presión emitida. Dice que la tubería es obsoleta. El tope de fugas llegó hasta las 160 fugas en un solo día”, agrega el funcionario.

Drenaje colapsado en Tuxtla

“Además tenemos algo muy preocupante, un sistema de drenaje obsoleto. Dice que en las casa construidas hace más de 20 años les pusieron tubos de concreto y arena, que con la humedad se empiezan a fracturarse por las vibraciones por el paso de muchos autos sobre la superficie, se empiezan a deshacer, a romperse por completo. Llega un momento que estos tubos desaparecen y lo único que queda bajo la tierra es la oquedad por donde pasa el agua del drenaje o sanitarios. Y a la hora de fracturarse se tamponean.”, dice Araujo Esquinca.

Señal que se tiene un problema muy complejo en la vieja ciudad donde se usaron tubos de concreto que se rompen. Y cuando se rompen esos tubos es un problema para sus trabajadores andar resolviéndolo casa por casa, lo ideal sería de una vez toda una cuadra, pero eso sí requiere de muchos recursos. Por lo que ahora están usando un tubo de PVC durable.

–          Y en el marco de la remodelación con la llamada obra de “Viva el Centro no arreglaron eso?

–          Te confieso que en esa obra no participamos como Smapa, al menos nosotros no la hemos recibido. El Smapa debió haber participado, porque somos los técnicos. Pero nunca nos tomaron en cuenta. Y hemos encontrado anomalías tan grave como piezas hechizas. Dice que en muchos casos los obreros en vez de comprar, por ejemplo, un codo requerido, ellos mismos lo hacían quemándolo, ablandando el tubo, de tal forma que modificaban su grosor y esto se adelgazaba, ante la presión de agua, se rompía.

Dice que de los 13.5 millones de pesos que le estamos pagando a la CFE, considera podría bajarlo hasta en un 25 o 30 por ciento: “Tenemos consumos muy altos actualmente. Pero se reduciría con una buena inversión para cambiar cableado de mayor calidad y equipo ahorrador de energía eléctrica”.

En Tuxtla hay 128 mil usuarios y mil 250 trabajadores en Smapa

Y que en cuanto a la nómina, si bien se tiene a 128 mil usuarios, se cuenta con unos mil 250 trabajadores: “Tenemos unos 10 trabajadores por cada mil tomas. Los estándares nacionales e internacionales señalan que para que un sistema municipal de agua potable sea eficiente debe tener máximo cuatro empleados por cada mil tomas. Es decir, estamos a más del doble de empleados. Si bien corrimos a los 60 aviadores. El extremo es que tenemos gente que no cumple con el perfil que requiere el Smapa. Por ejemplo, tengo de jefe de taller mecánico a un médico veterinario. Afortunadamente para él tiene antigüedad y liquidarlo me requiere de recursos”.

Menciona que en la gestión pasada a Smapa se le vio como una bolsa de empleo, donde muchos funcionarios podían cumplir sus compromisos políticos o personales. E inclusos tener amigos recomendados que no asistían a laborar.

Según él se perdió la brújula en la contratación de personas, contrataron gente con otros perfiles no necesarios y se olvidaron que lo que se necesita realmente, son fontaneros, plomeros, ingenieros, administradores que sepan del agua, de ingresos, de manejo de nómina, es una empresa especializada.

“Pero nos empezó a llegar  otros perfiles no requeridos. Eso nos complicó en pagar una nómica de cerca de 14 millones de pesos cuando en realidad no deberíamos gastar no más de siete millones de pesos”, dice Araujo Esquinca.

Añade que Smapa debería tener en promedio unos 500 empleados. De los mil 250 trabajadores, unos 800 están sindicalizados y el resto son eventuales y de contrato. “Tenemos la necesidad de reducir gastos como el consumo de la luz y la nómina. Por otro lado tenemos la necesidad de grandes inversiones para que la ciudadanía tenga el servicio realmente merece”.

Se plantea liquidar a todos los trabajadores y recontratar a una mitad de ellos. Los especialistas, los que sí cumplen con el perfil para seguir en la empresa de dar agua a los tuxtlecos.

Dice que el número de empleados es tan alto porque acá se jerarquizan desde el ayudante, del ayudante, del ayudante de…

Descubrió una red de corrupción

Que además, descubrió una red de corrupción en el Smapa, donde se giraban recibos por una cantidad justa y alta, pero al venir a negociar establecieron una complicidad con el cajero que les reimprimía el recibo por una cantidad menor y presentaban copia de cheque y recibo con la cantidad girada, pero en realidad cajero y pagador se repartían la diferencia de otro recibo que quedaba en el Smapa.

Por eso ahora en cada recibo se imprime la cantidad anterior pagada realmente en la caja, de esa forma el dueño de la empresa ya no era timado por su contador que le entregaba otro recibo diferente al pagado en Smapa.

Se tienen ya 18 procesos penales, tres ya fueron consignados

Revela que se tienen ya 18 denuncias penales por toda esa red de corrupción.  Dice que todas son contra trabajadores y extrabajadores de Smapa. De las cuales tres ya fueron consignadas.

Cuando llegó se encontró con un requerimiento del Órgano de fiscalización Superior del Congreso del Estado (OFSCE) para que se solventaran unos 500 millones de pesos tan sólo del 2011.

De inmediato turnó al OFSCE toda la documentación que no se había turnado en la gestión pasada. “Por eso fue la observación, pues la administración pasada se negaba a entregar la documentación y nosotros la hicimos de inmediato, pues al menos nosotros no tenemos nada que ocultar. Que la revisen y que ellos determinen lo procedente”.

Desde que llegó, dice, se puso en coordinación con el OFSCE, por lo que ahora Smapa está en un sistema en red, de tal forma que cuando acá se gira un cheque, automáticamente el OFSCE sabe qué número de cheque fue, porque cantidad y a quien se le pagó ese monto. Algo que no existía en la gestión anterior. Esto con la mayor transparencia para evitarse problemas futuros.

Dice que ante la problemática se planteó a Smapa el programa de Mejora Integral de Gestión (MIG) que no es otra cosa que un contrato de prestación de servicio en el cual el esquema en la cual se hace una mezcla de recursos federales con recursos privados.

Menciona que hay una inversión necesaria prevista de casi mil millones para la Ciudad del Agua, de los cuales 589 millones se requieren en el plazo inmediato. De los 589 millones se requieren para obras inmediatas. Los 145 millones de pesos para sanear los pasivos de Smapa. Y el restos, unos 100 millones de pesos, para liquidar a los mil 200 trabajadores conforme marca la ley, con la vigilancia estricta de la Junta Local de Conciliación y Arbitraje. Eso sí, van a recontratar a unos 625 trabajadores.

Smapa debe 140 millones de pesos a proveedores

Dice que dentro de los pasivos se tiene una deuda de más de 140 millones de pesos al año: “Debemos 64 millones de pesos a proveedores. Cerca de 48 millones a la empresa Fypasa que opera la Ciudad del Agua. Y debemos 36 millones de pesos a la CFE. Estos suma más de 140 millones de pesos”.

Con el MIG se «busca sacar de la crisis de operación al Sistema y brindar el servicio de agua potable y saneamiento que merecen los tuxtlecos».

Para Araujo Esquinca las deficiencias en la red hidráulica y sanitaria que diariamente afectan a los usuarios, principalmente a familias de escasos recursos; así como la crisis financiera del SMAPA (déficit mensual de más de 10 mdp) y los factores que propiciaron su quiebra técnica.

«El proyecto de Mejora Integral de Gestión no es privatización ni botín político, no hay venta de activos, toda la rectoría y responsabilidad seguirán siendo del SMAPA, sólo se busca un socio que invierta los recursos que se necesitan para rehabilitar la red hidráulica y sanitaria, sanear al Sistema, y poner el servicio en el rango de eficiencia que merece la ciudadanía», dice el director de Smapa.

Explica que algunos de los beneficios del proyecto de Mejora Integral de Gestión en la capital de Chiapas serán: servicio de agua potable las 24 horas del día, rehabilitación de la red sanitaria, mayor cobertura de servicios, tarifas estables e instalación de micromedidores que procuran el ahorro y uso racional del vital líquido.

Señala que con el MIG Tuxtla se está cuidando el bolsillo de la ciudadanía, “mantendremos las mismas tarifas, pero estaremos en condiciones de mejorar la calidad del servicio para los  tuxtlecos, con inversiones urgentes en infraestructura y para rehabilitar la red sanitaria y de distribución del agua”.

“Yo no me voy a ir de Tuxtla, aquí he vivido toda mi vida y después de esto seguiré aquí, no dejaría que este proyecto atente contra el derecho al agua de los tuxtlecos”, concluye el director de Smapa.