En las calles de Colima, Imelda Velasco y otras madres desplegaron una búsqueda desgarradora pero esperanzadora, pegando fichas con los rostros de sus hijos desaparecidos.

Esta iniciativa, enmarcada en la Jornada Nacional de Búsqueda Humanitaria, refleja el esfuerzo colectivo por encontrar a más de mil 293 personas desaparecidas en el estado, mientras exigen justicia y seguridad para todos.

Por Monserrat Cárdenas

Como quien acaricia el rostro de su hijo, la señora Imelda arrastra sus dedos sobre la ficha de desaparición de Christian Nicolás Ortega Velasco para que quede bien pegada en un poste de luz en el centro de Comala, Colima. Su hijo de 34 años fue visto por última vez el 8 de junio de 2020 en la capital del estado y, desde entonces, participa en la Red Desaparecidos en Colima A.C., el primer colectivo de búsqueda creado en Colima que hoy trabaja en conjunto con el Colectivo Solidario de Búsqueda para encontrar a las más de mil 293 personas desaparecidas en la entidad.

La búsqueda en vida que hoy realizan las madres consiste en colocar en bardas, postes y donde se pueda fichas con información de mujeres y hombres desaparecidos para difundir cada caso y, de paso, transformar el panorama citadino colimense que desde hace años ha comenzado a tapizarse de fichas, lonas y espectaculares de gente desaparecida.

“Es una forma de unirme y de empatizar con las demás compañeras”, explica doña Imelda Velasco cuando le pregunto por qué este viernes recorre los municipios de Colima, Comala y Villa de Álvarez pegando fichas. “Mi interés es encontrar a mi hijo y a los de todas mis compañeras”, expresó.

Esta es una actividad enmarcada en la Jornada Nacional de Búsqueda Humanitaria, una iniciativa de más de 250 colectivos de búsqueda de México y Centroamérica que continuará este sábado 20 de abril y culminará con la marcha nacional del 10 de mayo, en la que madres buscadoras todo el país tomarán las calles para recordar a sus hijas e hijos, exigir al Estado seguridad y las investigaciones necesarias para localizar a las más de 115 mil 921 personas que se encuentran ausentes de sus hogares.

En Colima, Imelda aplana con sus dedos las orillas de cada ficha de su hijo Christian. No quiere que queden despegadas y que fácilmente alguien las arranque. Con ellas también quedan sobre las paredes y postes de jardines y avenidas principales las de Diego Fernando Castañeda Salazar, de 17 años; Reyes Rentería Anguiano, de 40 años; Martín Vergara Rodríguez, de 32 años; Yadira Ríos Linares, de 40 años; y Bryan Alejandro Dionicio Barajas, de 19.

“Se invita a las familias a que se unan para que haya más presión, para que empaticen con nosotros. Participar aquí me da una emoción grande porque me da más esperanzas y más ilusiones de poder encontrar a mi hijo”, finaliza Imelda Velasco.