“La autoexploración y la detección temprana del cáncer de mama: salva vidas”
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El cáncer de mama es la tercera causa de muerte en mujeres adultas en México, en 2022 se registraron 7 mil 888 muertes por cáncer de mama, de las cuales 99.4 % fueron mujeres. Es una enfermedad que no se puede prevenir, por lo que la concientización y sensibilización sobre la importancia de autoexplorarse es fundamental para la detección oportuna.
Por Aitana Rodríguez /@Aitanaerg
El cáncer de mama es un tumor maligno (grupo de células que crece de manera desordenada e independiente) que se origina en los conductos donde se produce y transporta la leche hacia el pezón. Actualmente, el cáncer de mama es el más frecuente en las mujeres, tanto en países desarrollados como en desarrollo, en México es la tercera causa de muerte en mujeres adultas, según el Instituto Nacional de Estadística y Geografía (INEGI).
Durante 2021, se registraron 7 mil 973 muertes por cáncer de mama, de las cuales 99.4 % fueron mujeres. En el país, la tasa de mortalidad por cáncer de mama, según el INEGI (2022) es de 18 por cada 100 mil mujeres de más de 20 años. La tasa más alta de defunciones se registró en el grupo de mujeres de 60 años y más, con 48.24%. Mientras que la más baja se presentó en mujeres de 20 a 29 años (0.74%).
En 2019, el Instituto Nacional de las Mujeres señaló que la mayoría de las muertes por cáncer de mama se producen en los países de ingresos bajos y medianos, donde “gran parte de los casos se diagnostican en un estado avanzado, sobre todo, por la escasa concientización y las barreras que dificultan el acceso a los servicios de salud”.
Tres años después, en 2022, el INEGI informa que la incidencia (casos nuevos) de cáncer de mama fue de 23 mil 790 entre la población de 20 años y más; en ese mismo año, del total de muertes por tumores malignos en personas de 20 años y más (87 mil 880), el 9% fue por cáncer de mama (7 mil 888). De estos casos, 99.4 % se presentó en mujeres (7 mil 838) y 0.6 %, en hombres (50).
Asimismo, la Secretaría de Salud aclara que el cáncer de mama no puede prevenirse, por lo que la detección oportuna es la única opción para descubrir la enfermedad y obtener un diagnóstico en etapas tempranas.
Las acciones básicas de detección son la autoexploración, la exploración clínica y la mastografía, que es estudio de rayos “X” que se recomienda a mujeres de 40 a 69 años de edad, que no presentan signos, ni síntomas de cáncer y tiene como propósito detectar anormalidades en las mamas, que no se pueden percibir por la observación.
Ante esta situación, la Organización Mundial de la Salud (OMS) recomienda la sensibilización de las mujeres por medio de la educación sobre la importancia de conocer las características normales de sus mamas para que al detectar una anomalía demanden atención médica.
A su vez, el Centro Nacional de Equidad de Género y Salud Reproductiva explica que la educación para la salud es un elemento imprescindible para abatir la tasa de mortalidad del cáncer de mama, debido a que la educación permite, mediante el intercambio de información, desarrollar habilidades así como cambiar actitudes y comportamientos para cuidar la salud, individual, familiar y colectiva.
La autoexploración puede salvar tu vida.
“Un día explorando mis senos encontré una pequeña bolita en mi seno derecho, eso fue en la madrugada. A mí se me hacía tarde que amaneciera para ir con mi médico a revisarme. En cuanto yo sentí esa bolita, yo no quise dejar pasar más tiempo y quise saber inmediatamente si era algo más, porque no era algo normal en mi cuerpo”, cuenta María Jesús López Martínez, quien tiene 65 años y hace 13 años le detectaron un tumor maligno en la mama. La autoexploración y la detección del cáncer posibilitó que hoy sea una sobreviviente.
15 días después de la detección de su tumor fue extirpado en cirugía, la pronta demanda de atención médica fue fundamental para su tratamiento. Sin embargo, María López reconoce que acceder a servicios de salud privados no es posible para todas las personas:
“En los hospitales, uno tiene que hacer fila y esperar a ver si los pueden atender. Desafortunadamente, hay mucha gente que tiene que esperar sus citas hasta por seis meses, como fue mi caso, pero decidí buscar atención en otro lugar”.
Para María López el acompañamiento de su familia y amigos fue fundamental durante y después de la enfermedad. Involucrarse en grupos donde pueda sentirse entendida ha sido un proceso importante en su sanación, por lo que llegó al activismo por medio del colectivo “Una Pincelada por la Vida” donde pintan las cicatrices de tumor extirpado como un llamado para sensibilizar sobre la importancia de la autoexploración.
“Yo sí tuve todo el apoyo de mi familia, de mis amigos, de todo mundo, pero desafortunadamente no hubo un grupo con el cual yo pudiera compartir mi sentir y pudieran apoyarme. Ahora soy parte de un grupo de sobrevivientes que empatizamos por nuestra experiencia combatiendo el cáncer de mama”.
“En una Pincelada por la Vida estamos haciendo la concientización para que tanto mujeres como hombres chequen su cuerpo, chequen sus senos, se exploren, porque el cáncer cuando es detectado a tiempo como en mi caso podría salvar tu vida”, concluye María López.
Luchar contra el cáncer de mama
En el 19 de octubre se conmemora el Día internacional de la Lucha contra el Cáncer de Mama, es un día que tiene el propósito de fomentar la autoexploración mamaria para la detección temprana de tumores malignos.
El riesgo de tener cáncer de mama puede aumentar en las siguientes situaciones:
- Antecedentes familiares de cáncer de mama o quistes en los pechos.
- Llegar a la menopausia después de los 50 años.
- Tener la primera menstruación antes de los 12 años.
- Si no has tenido hijos o hijas.
- Tener más de 45 años de edad.
- Cuando se ha utilizado terapia hormonal de reemplazo por más de 10 años.
Alguna de las recomendaciones, según Instituto Mexicano de Seguro Social para reducir el riesgo de ser diagnosticado con cáncer de mama, es adoptar conductas y estilos de vida saludable:
- Realizar ejercicio.
- Evitar el consumo de alcohol y cigarro.
- Adoptar una dieta balanceada.
- Autoexploración de las mamas frecuentemente, recomendablemente 7 días después de la menstruación.
- A partir de los 25 años acudir con personal médico capacitado para la exploración.
- A partir de los 40 años en adelante realizar mastografías anualmente.
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